¡He ahí el grito con el que el bolivariano cuanto revolucionario pueblo de Venezuela suele responder a las palabras de su líder Hugo Chávez!
Pero no, no estoy de acuerdo.
Observe y escuche cuidadosamente este video que recoge el discurso mundialmente conocido como el “Discurso yanquis de mierda”.
¿Se dio cuenta? ¿Eh?
Habrá usted notado que a los 15 segundos Chávez dice:
¡Acabamos de enterarnos que los Estados Unidos expulsan al embajador de Bolivia!
Luego, a los 33 segundos, agrega:
¡Nosotros evaluaremos la relación diplomática con Estados Unidos!
Y después, justo a los 58 segundos, sentencia:
¡El embajador yanqui tiene 72 horas para salir de Venezuela!
Así las cosas, nosotros (es decir, Chávez) evaluó la relación diplomática entre Venezuela y Estados Unidos en ¡exactamente 25 segundos! Y además ¡mientras se estaba dirigiendo en vivo a su pueblo!
Pero eso no es lo que me impide estar de acuerdo con la bolivariana cuanto viril alocución.
Lo que me parece mal es que Chávez haya llegado a esa conclusión de nosotros y anunciado su decisión de nosotros ¡sin haberle preguntado a la asamblea si estaba de acuerdo!
En teoría, a eso del segundo 48, Chávez debería haber preguntado “¿Están de acuerdo?” Y a eso del segundo 54 la multitud habría acabado de responder en armonioso coro:
“¡Sííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííííí!”
Realizado lo cual, Chávez ya habría mandado al “carajo” a los “yanquis de mierda” habiendo cumplido con el protocolo de un líder legítimo.
Menos mal que, a diferencia de Chávez, nosotros sí somos nosotros.
Es un escritor, editorialista y académico, especialista en poesía mexicana moderna.
