En inglรฉs se usa mucho la palabra procrastinate: dejar para maรฑana. Se traduce a veces por aplazar,diferir,posponer,postergar orelegar, queno dan la idea de hรกbito. Por otra parte, posponer,postergar y relegar implican, en primer lugar, ‘dar menos importancia’(a una de las personas o cuestiones que esperan, por ejemplo); y secundariamente ‘dejar para despuรฉs’. Aplazar y diferir significan ‘dejar para otra fecha (definida o no)’, pero no necesariamente como un hรกbito personal. A la persona que lo tiene, se le llama en inglรฉs procrastinator, y a su inacciรณn procrastination.
Las tres palabras derivan del latรญn procrastinare,procrastinator y procrastinatio con los mismos significados. Estรกn formadas a partir del prefijo pro ‘hacia’ y el adverbio cras ‘maรฑana’; no ‘la maรฑana’, sino ‘el maรฑana’, y en particular ‘el dรญa siguiente a hoy’. El anuncio jocoso que todavรญa se ve en algunas tienditas: “Hoy no fรญo, maรฑana sรญ” viene del Imperio romano: “Crascredo, hodie nihil”, o sea “Maรฑana fรญo, hoy nada”.
Los romanos eran muy ejecutivos, y se burlaban de los indecisos. Hay una sรกtira de Marcial (siglo I) sobre un personaje al que intencionadamente llama Pรณstumo (nombre que sรญ existรญa), como diciรฉndole: No tendrรกs vida pรณstuma (fama) si dejas todo para maรฑana (Epigramas V, 58):
Cras te victurum, cras dicis, Postume, Semper.
Dic mihi, cras istud, Postume, quando venit?
Maรฑana tรบ vivirรกs, maรฑana, dices, Pรณstumo, siempre.
Dime, el maรฑana ese, Pรณstumo, ¿cuรกndo viene?
En el siglo III, en Capadocia, un comandante romano se sintiรณ atraรญdo por la fe cristiana y (diabรณlicamente, segรบn la leyenda piadosa) era desviado de la conversiรณn por un cuervo que graznaba cras cras, que es la voz del cuervo (de donde viene crascitar), como si le dijera: “Dรฉjalo para maรฑana”. Pero el centuriรณn, muy ejecutivamente, aplastรณ al cuervo respondiรฉndole: hodie hodie (hoy hoy). Se convirtiรณ al cristianismo, fue martirizado y se venera el 19 de abril como San Expedito.
Es de suponerse que el nombre es un apodo, porque el cuervo aparece frecuentemente en su iconografรญa, como puede verse en Google Imรกgenes. Se volviรณ popular desde el siglo XVIII como intercesor de las causas urgentes, y tiene fama de hacer milagros rรกpidos. Hay pรกginas de la Wikipedia sobre รฉl en siete idiomas, asรญ como numerosos portales y blogues donde se narran sus milagros.
Los tribunales de Mรฉxico, que tanto hablan de “justicia pronta y expedita”, deberรญan adoptarlo como santo patrรณn, para que les haga el milagro. Por cierto que, cerca de la Suprema Corte, en la esquina de 20 de Noviembre y Venustiano Carranza de la ciudad de Mรฉxico, hay un templo del siglo XVIII (San Bernardo) con un altar dedicado a San Expedito. El 19 de cada mes a las 12 los padres agustinos reciben a los devotos que van a agradecer los milagros recibidos.
En el siglo IV, San Agustรญn se burlรณ de sรญ mismo por no ser expedito ante el llamado a la conversiรณn (Confesiones, VII, 12 y 17): No tenรญa nada que responderte, Seรฑor, sino “maรฑana y maรฑana” (cras et cras)… “Dame, Seรฑor, castidad, pero todavรญa no”.
La palabra cras pasรณ al espaรฑol con el mismo significado. Gonzalo Correas (Vocabulario de refranes y frases proverbiales, 1627) recoge el refrรกn medieval “A lo que has de hacer no digas cras, pon la mano y haz” (nรบmero 1329), equivalente a “No dejes para maรฑana lo que puedas hacer hoy”. Tambiรฉn recoge “Cras crastinando, dijo el cuervo; y no sรฉ cuรกndo se tornarรก blanco”, explicando que se dice “Contra los que dilatan lo que hay que hacer” (nรบmero 1113). Obsรฉrvese, de paso, la palabra dilatar usada para el tiempo, como es comรบn en Mรฉxico, aunque algunos suponen que el uso es incorrecto, y debe limitarse a lo que se dilata espacialmente.
En la Biblioteca Virtual Cervantes (www.cervantesvirtual.com) se puede documentar un centenar de usos de la palabra cras en muchos libros, por ejemplo: en el Libro de buen amor (aรฑo 1330) de Juan Ruiz, Arcipreste de Hita (estrofa 1256), donde dice que las monjas “traen a muchos locos”, pero
que amaban falsamente a cuantos las amaban.
Son parientas del cuervo, de cras en cras andaban,
tarde cumplen o nunca
Y en el Corvacho (1466) del Arcipreste de Talavera, hay un refrรกn contra los indecisos como San Agustรญn: “De cras en cras, vase el triste a Satanรกs”. Curiosamente, esta novela picaresca, misรณgina y sermoneadora no trata de cuervos. Recibiรณ ese tรญtulo, que no le dio el autor, por cierto parecido con el Corbaccio (el cuervo) de Boccaccio.
Los cuervos tienen su leyenda negra, en primer lugar, por su negrรญsimo color (Ramรณn Gรณmez de la Serna dijo memorablemente que “Los cuervos se tiรฑen”); un color que los pinta como aves de mal agรผero. Porque, ademรกs, devoran todo, incluso la carroรฑa. Y porque son inteligentes, innovadores y oportunistas hasta parecer diabรณlicos. Son capaces de improvisar: valerse de una ramita en el pico para sacar algo de un tubo (vรฉase en YouTube, intelligent crow). Hay quienes dicen que los cรณrvidos igualan en inteligencia a los primates superiores. Tienen fama de ladrones, porque se llevan muchas cosas a sus nidos, especialmente vidrios y objetos brillantes (como la cuchara de plata en La urraca ladrona de Rossini). Tienen fama de sacar los ojos, especialmente de los muertos, quizรก atraรญdos porque son vidriosos. Tienen fama de gรกrrulos, y su mรญmica vocal es sorprendente: pueden imitar las voces de otros pรกjaros, el ruido de los รกrboles o cascadas, la voz humana, silbatos y otros ruidos. Pueden escucharse en YouTube (cuervo, urraca, raven, crow, magpie, corbeau, corvo, Rabe), aunque mezclados con videos sobre otras cosas; algunos de interรฉs, como algunas notables declamaciones del poema “The raven” de Edgar Allan Poe, con el estribillo “Nevermore”.
Del cuervo dice Sebastiรกn de Covarrubias (Tesoro de la lengua castellana o espaรฑola, 1611): “Compararon los egipcios, en sus jeroglรญficos, los aduladores a los cuervos; y dijeron ser mรกs perjudiciales aun que ellos, porque el cuervo saca los ojos corporales al hombre muerto que halla en la horca, y el lisonjero adulador saca los ojos del alma y del entendimiento al hombre vivo que estรก en el trono […] privรกndole de aquello que tanto le importaba para el gobierno de su persona y de los suyos.” Y tambiรฉn: “Cuenta Plinio la industria y agudeza de un cuervo que, estando cierta urna medio llena de agua pluvial, y no pudiendo alcanzar a beber de ella, le fue echando muchas pedrezuelas hasta que vino a subir el agua a lo alto, y satisfizo su sed (Historia natural, libro 10, capรญtulo 43).”
El Diccionario de los sรญmbolos de Jean Chevalier y Alain Gheerbrant recoge elementos de la leyenda negra en diversas culturas, pero tambiรฉn de la leyenda blanca: el cuervo como presencia del mรกs allรก, como mensajero de Dios y como sรญmbolo de la sabidurรญa, la gratitud y la generosidad (llevar pan en el pico a los ermitaรฑos y prisioneros). Tambiรฉn dice que su crascitar ha sido escuchado como esperanzador en latรญn (cras cras: maรฑana maรฑana) y como arrullo infantil en japonรฉs (kaa kaa: kawaii kawaii: querido querido).
Me escribe Aurelio Asiain (28 de octubre 2010): La palabra kawaii se usa todo el tiempo; es mรกs de mujeres que de hombres y significa ‘adorable’, ‘bonito’. Nunca la he escuchado como ‘querido’. Los cuervos tuvieron una consideraciรณn muy alta entre los poetas japoneses antiguos y los mรญsticos del Zen, pero hoy son vistos como una plaga en las ciudades. Su nombre es karasu, que suena a karรกs, y su crascitar se escucha como kaa kaa (que me parece mรกs exacto que kras kras). Se atribuye a los cuervos, no a los gallos, el anuncio del alba; y su graznido matutino tiene un nombre especial: akegarasu. Una famosa antologรญa de haiku recibiรณ este nombre, como llamando a los poetas extraviados a la senda de Basho.
Al parecer, tambiรฉn los checos escuchan el crascitar sin ere. La grajilla, un cรณrvido pequeรฑo parecido a la urraca, se llama en checo kavka, de donde viene el apellido Kafka (me escribe Ramรณn Cota Meza, 11 de noviembre 2010).
Lope de Vega (Rimas humanas y divinas, 1624) le dio otro giro a la sรกtira de Marcial. Se burla de su propia esperanza en conseguir el amor de una Juana que lo maltrata.
cรกnsase el poeta de la dilaciรณn
de su esperanza
¡Tanto maรฑana, y nunca ser maรฑana!
Amor se ha vuelto cuervo, o se me antoja.
¿En quรฉ regiรณn el sol su carro aloja
de esta imposible aurora tramontana?
Sรญgueme inรบtil la esperanza vana,
como nave zorrera o mula coja,
porque no me tratara Barbarroja
de la manera que me tratas, Juana.
Juntos Amor y yo buscando vamos
ese maรฑana. ¡Oh dulces desvarรญos!
Siempre maรฑana, y nunca maรฑanamos.
Pues si vencer no puedo tus desvรญos,
sรกquente cuervos de estos verdes ramos
los ojos. Pero no, ¡que son los mรญos!
Aunque Lope se burlaba de los rebuscados juegos gongorinos, juega aquรญ con tres conceptos: el maรฑana que nunca llega; la maรฑana del madrugar (el maรฑanar, que parece invento suyo, y recuerda los mexicanismos desmaรฑanarse, desmaรฑanada) y el cuervo transformado en mujer que despierta el deseo, da esperanzas, las frustra y merece que le saquen los ojos. En algunas transcripciones, el dรฉcimo verso empieza “esta maรฑana”, que es absurdo; en otras, “este maรฑana”, que sรญ concuerda en gรฉnero (se trata del maรฑana, no de la maรฑana). Para que estรฉ mรกs claro, preferรญ “ese maรฑana”, que lo pone en un futuro menos inmediato. Habrรญa que ver el original.
Hay una continuaciรณn de ese “maรฑana” de Lope en el son de “La negra”:
Negrita de mis pesares,
hoja de papel volando,
a todos diles que sรญ,
pero no les digas cuรกndo.
Asรญ me dijiste a mรญ,
por eso vivo penando.
La “hoja de papel volando” (que supongo) es una imagen del destino azaroso (“cual hoja al viento” dice la “Canciรณn mixteca” de Josรฉ Lรณpez Alavรฉs, 1912). Que los mariachis canten: “ojos de papel volando” no puede ser mรกs que tradiciรณn defectuosa. Segรบn parece, el son fue compuesto en 1926 en Tepic, por los hermanos Fidencio Lomelรญ Gutiรฉrrez (letra) y Alberto (mรบsica), que no se tomaron el trabajo de escribirlo ni registrarlo. Se refiere a una novia del primero, que no se llamaba Juana (como la musa de Lope), sino Albina Luna; y no era negra, aunque asรญ le dijeran por cariรฑo, contradictoriamente con su nombre y apellido. ¿Habrรก grabaciones de los hermanos Lomelรญ para verificar la letra original?
El Diccionario de la Real Academia Espaรฑola registra cras desde la primera ediciรณn (1729): “adverbio de tiempo. Lo mismo que maรฑana. Es voz anticuada y puramente latina: cras”. En cambio, procrastinar entrรณ tentativamente al Diccionario manual de 1989 y finalmente en el drae 21, 1992. Esto refleja la realidad: cras dejรณ de usarse y procrastinar estรก empezando a circular, todavรญa con temor. En las bases de datos de la Real Academia (7 de octubre 2010), hay un solo registro de procrastinar en 2003 (base crea) y ninguno en la base histรณrica (corde), donde hay 476 de cras, sobre todo del siglo XIII, y uno para crastinar de 1555, que no es el crastinando del refrรกn recogido por Correas.
Este verbo inusual (precursor de procrastinar)viene de procastinare y parece el primer intento de castellanizarlo, porque no hubo en latรญn un verbo crastinare. Segรบn Ernout y Meillet (Dictionnaire รฉtymologique de la langue latine), del adjetivo crastinus se pasรณ directamente al verbo procastinare.
Pero la definiciรณn de la Academia estรก mal: “Diferir, aplazar”. Peor aรบn, dice que procrastinar es un verbo transitivo, lo cual es vรกlido para diferir y aplazar (la acciรณn recae en lo que se difiere o aplaza: un viaje, por ejemplo); no para el uso actual de procrastinate en inglรฉs, origen del neologismo en espaรฑol. No hay que recomendar el uso transitivo (“Procrastinaron la reuniรณn para el prรณximo lunes”), porque no hace falta, teniendo aplazar y diferir; sino el intransitivo (“Haces mal en procrastinar”), porque sรญ hace falta: no hay otra palabra para decirlo.
Procrastinar es un hรกbito, y no solo de perezosos o dejados. Procrastinan tambiรฉn los hiperactivos que evitan las decisiones importantes refugiรกndose en despachar nimiedades.
Segรบn el Oxford English Dictionary, el registro mรกs antiguo de procrastination es de 1548. Del mismo aรฑo, hay un registro de procrastine como verbo transitivo que no prosperรณ. Desde 1588, hay registros de procrastinate como verbo transitivo que sustituyรณ al anterior. Pero seรฑala que el uso transitivo se volviรณ raro y desde 1638 apareciรณ el intransitivo, que predomina hoy.
En Google (9 de noviembre 2010) hay millones de pรกginas que contienen procrastination (2.4), procrastinate (1.1) o procrastinator (0.6), y muy pocas que contengan las palabras correspondientes en espaรฑol, francรฉs, italiano y portuguรฉs. Al parecer, hay en inglรฉs una obsesiรณn moral y ejecutiva que necesita vituperar o sacudirse este mal hรกbito. En Amazon hay en venta un centenar de libros cuyo tรญtulo incluye la palabra procrastination. En Google hay cuestionarios para medir hasta quรฉ punto uno ha caรญdo (procrastination test).
Francis Bacon (Essays or counsels, civil and moral,1597), en un ensayo titulado precisamente “Of dispatch” (traducido al latรญn como “De expediendis negotiis”) dice que los espaรฑoles son muy poco expeditos, y hasta inventa (o recuerda mal) una burla: “Mi venga la muerte de Spagna” (sic), porque tardarรก en llegar. Hay el mismo prejuicio en los Estados Unidos contra los mexicanos, diciendo burlonamente en espaรฑol: “Maรฑana, maรฑana”…
En todo caso, la obsesiรณn ejecutiva que hizo prosperar la palabra procrastinate y produjo infinitos libros de superaciรณn personal llegรณ en el siglo XX a la lengua espaรฑola, con el paradรณjico resultado de recuperar una palabra latina por medio del inglรฉs. Es perfectamente legรญtimo decir procrastinar,procrastinaciรณn y procrastinador, y no hay por quรฉ sustituir estas palabras con otras menos exactas.
(Letras Libres Mรฉxico, diciembre 2010)
(Monterrey, 1934) es poeta y ensayista.