La foto debe ser de finales de los años 60. Estamos ante el ventanal de “El Charleston”, un restaurant por el rumbo de Insurgentes Sur, México DF, de de don Tino (el más bajito de todos), que era como una sucursal (pese al nombre) de El Correo Español y también en él se servían sesos de cabrito asados en el cráneo. He aquí los fotografiados: en línea y de izquierda a derecha: Arturo Garmendia (mexicano, crítico de cine; hoy no sé si aún vivo), Tomás Pérez Turrent (veracruzano, crítico de cine, guionista, coautor con J. de la C. del libro de entrevistas Luis Buñuel/Prohibido asomarse al interior; fallecido), Emilio García Riera (ibicense, refugacho, autor de la importante Historia documental del cine mexicano,¡en ¡dieciocho tomos!; fallecido), don Luis (¿es necesario “documentarlo”?; dicen que fallecido), don Tino (colaborador con nosotros y tres meseros, de la broma de los diez mil autógrafos pedidos a Buñuel para canjearlos por uno de María Félix… o de Cantinflas, no recuerdo; fallecido), Alberto Isaac (colimense, nadador, campeón en unos lejanos juegos olímpicos, caricaturista, periodista, cineasta y uno de esos amigos que deberían darle a uno rabia por lo buen mozo fascinador de las chicas que le hacían tilín a uno, digamos nuestro Gary Cooper; fallecido) y al frente (inevitablemente) José de la Colina (santanderino/mexicano, escritor, fallido Pedrito de Los Olvidados; tal vez no fallecido) que tomó la foto con un disparador y con apenas tiempo para presentarse delante del grupo, y de acuclillarse para no tapar a Buñuel (postura algo indecente, ¿no?).
OCIOSO COMENTARIO AL MARGEN: En las fotos de grupo don Luis solía aparecer como un solitario entre una muchedumbre. ¿Pose? ¿Odio a las cámaras? ¿Timidez ante la leve “inmortalidad” que otorga la fotografía?… ¿O quizá no le había hecho tanta gracia la broma de los autógrafos?A saber.
Es escritor, cinéfilo y periodista. Fue secretario de redacción de la revista Vuelta.