รltimamente parece que Martin Scorsese estรก copiando a Steven Spielberg.
No, en la mรกs reciente pelรญcula de Scorsese no aparecen naves espaciales, ni extraterrestres, ni arqueรณlogos con sombrero y lรกtigo. Las similitudes entre ambos directores ataรฑen, mรกs bien, a la manera en la que escogen sus รบltimos proyectos. Decisiones que โviendo su filmografรญa completaโ dejan mucho que desear.
Desde finales de los noventa, Spielberg comenzรณ a dirigir cada vez menos proyectos personales que รฉl mismo habรญa visto nacer. Su proceso de selecciรณn cambiรณ dramรกticamente: despuรฉs de Saving Private Ryan, contratรณ a un grupo de agentes para perseguir y encontrar guiones que pudieran interesarle. El resultado de esta estrategia han sido pelรญculas de impecable manufactura pero menor potencia y, sospecho, menor longevidad. Tomemos el ejemplo de Minority Report y Catch Me If You Can, ambas entretenidas y, sin duda, bien hechas. Sin embargo, carecen de un cierto toque spielbergiano: la capacidad de suscitar una fascinaciรณn en el espectador. Basta volver a ver clรกsicos como Close Encounters of the Third Kind o las primeras tres de Indiana Jones para entender de lo que hablo.
Shutter Island โla mรกs reciente colaboraciรณn de Scorsese y Leonardo DiCaprioโ parece sugerir que, en los รบltimos escalonoes de su brillante carrera, este otro director estรก enfilรกndose por una ruta similar a la de Spielberg. Shutter Island es virtuosa desde un punto de vista meramente tรฉcnico, innegablemente tรฉtrica, y rica en temas. Y, sin embargo, no da la impresiรณn de ser una cinta esencial dentro de la filmografรญa de Scorsese precisamente porque se siente como una pelรญcula impersonal: una historia que podrรญa haber filmado cualquier otro director. Y eso jamรกs podrรญa decirse de Taxi Driver o Goodfellas.
(Lo anterior queda de manifiesto con el siguiente dato: Shutter Island estรก basada en una novela de Dennis Lehane y originalmente fue escogida como el siguiente proyecto de David Fincher. Scorsese apareciรณ en escena cuando Fincher decidiรณ no dirigirla.)
La cinta cuenta la historia de Teddy Daniels (interpretado con fuerza por DiCaprio), un detective que, junto con su compaรฑero (Mark Ruffalo), intenta resolver el misterio detrรกs de la desapariciรณn de Rachel Solando, una rea que parece haber escapado de la prisiรณn que, cual hermana de Alcatraz, ocupa una isla entera. Al principio, la cinta se adhiere a los dogmas del cine de misterio. La acciรณn incrementa y paulatinamente se transforma en una narrativa plagada de intriga y suspenso; un autรฉntico thriller. Conforme avanza, las vueltas de tuerca de la historia comienzan a multiplicarse y la trama se vuelve densa, repleta de flashbacks y temรกticas tan variadas como el espionaje soviรฉtico y los traumas de los sobrevivientes del holocausto.
Aquรญ y allรก, Scorsese da atisbos de su genialidad: momentos cuya tensiรณn sube como la espuma entrecortados por la obsesiรณn scorsesiana por la violencia. Sobra decir que Shutter Island es una cinta hermosa: los personajes languidecen entre elaborados juegos de sombras y luz; la isla es una amenaza palpable, rodeada de un mar voraz e insondable; cada cuadro es una composiciรณn perfecta. Ademรกs, Thelma Schoonmaker, la gran editora, vuelve a poner su talento en las manos de Scorsese, otorgรกndole a la cinta un carรกcter apropiadamente confuso, casi paranoide. Inclusive hay secuencias en las que la cรกmara salta su eje abruptamente, creando la sensaciรณn de que el espectador estรก dislocado โpeligrosamente libreโ dentro de la escena. Todos estos destellos de ineludible genialidad ayudan a que la pelรญcula sea un entretenimiento superior a la mayorรญa de las cintas hollywoodenses.
Sin embargo, Shutter Island le impide al espectador involucrarse en su juego. Hay momentos en los que da la impresiรณn de ser mรกs un ejercicio que una historia: el intento de Scorsese por hacer un thriller que Hitchcock podrรญa haber admirado. Es โcomo en Gangs of New York y The Aviatorโ el producto de un Scorsese que no parece enteramente cรณmodo con el tema o la narrativa de su cinta. Casi, me atrevo a decir, como si jugara a ser otro director. El guiรณn de Shutter Island es en sรญ una desviaciรณn marcada de los mejores guiones que ha dirigido. Esta es una partitura meticulosa y calculada โun filme de laboratorioโ, mientras que las grandes cintas de Scorsese lucen por su flexibilidad, encontrando su ritmo a travรฉs de momentos memorables (โYou talkinยด to me?โ, โFunny? Funny how?โ). Aquรญ cabe preguntarnos si Fincher no hubiese sido un mejor candidato para este proyecto. Su estilo, siempre impersonal y frรญo, quizรกs hubiera encajado mejor con este guiรณn.
Finalmente, Shutter Island teje un tapiz prรกcticamente impenetrable: vuelta de tuerca sobre vuelta de tuerca y circunstancias inverosรญmiles sobre circunstancias inverosรญmiles. Desde los primeros minutos, esta cinta da la impresiรณn de ser la obra de alguien que entiende โdominaโ el arte del cine, pero que le importa poco la relaciรณn entre sus personajes.
ยฟDรณnde ha quedado el Scorsese de Mean Streets: aquel que filmรณ su primera gran cinta tras haberla escrito con un compaรฑero de su universidad, basรกndose en sus propias experiencias en la ciudad de Nueva York?, ยฟdรณnde ha quedado el Scorsese de Raging Bull: aquel que tuvo que filmar la historia del pugilista Jake LaMotta porque era la รบnica manera de sobreponerse a una dรฉcada entera de adicciones? En suma, ยฟdรณnde quedรณ el Scorsese que filmaba cada cinta como si fuera su รบltima?
Ciertamente no lo encontraremos aquรญ. Dudo que algunos de los elementos de la historia โcontrolar a un individuo a travรฉs de fรกrmacosโ siquiera le interesen demasiado. En general, la temรกtica de Shutter Island parece lejos del gusto del director. A diferencia de, digamos, la reflexiรณn acerca del catolicismo como elemento redentor, tema que Scorsese tocรณ con รฉxito hace dos aรฑos con The Departed.
Shutter Island es un viaje que no carece enteramente de satisfacciones para el espectador. Pero estรก lejos de ser un clรกsico. Esperemos que en los prรณximos aรฑos, a pesar de que ha ganado todos los premios del orbe, Scorsese vuelva a tomar las riendas de un proyecto personal que examine la conexiรณn entre la fragilidad humana y la violencia como sรณlo รฉl โuno de los grandes directores del mundoโ sabe hacerlo.
โ Tom Campana