Señor director:
A propósito de la crónica “El sí de los niños”, de Martín Caparrós [Letras Libres 84], tengo que decirle que en Acapulco, en algunos lugares de Oaxaca, Chiapas y Veracruz, también se ven cosas como ésas. Desafortunadamente, las autoridades se hacen de la vista gorda. –
Pushkin o el rayo que no cesa
El duelo fue en la tarde. Hacía quince grados bajo cero y soplaba un viento ártico. El capitán Georges D'Anthés disparó primero. Aleksandr Pushkin se…
Oaxaca: escritores sin plumas
Según Evelyn Waugh, que algo sabía de ello, no hay que tomar en serio lo que diga un escritor de un viaje pagado por otros. Así pues, mi testimonio del I Encuentro Internacional de Escritores…
Fragmentario
De las expresiones populares con ecos militares a los aprietos en que Hegel metió a sus traductores, de los usos de la palabra predicamento que no registra el diccionario a los consejos de…
Remedios infinitivos
Rociar lo que brotó de tuberías en la cañada de un aerosol aletargado. Inducir que cristalicen los zancudos sobre antenas y varillas oxidadas. Usar de látigo el…
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