Durante el siguiente año propongo completar el proyecto de beca que a continuación se detalla:
Primer trimestre. Hacer una lista de autores cuya obra me parece mediocre pero de sobresaliente protagonismo en el mundo literario. Adquirir sus libros. Ordenarlos en los estantes por orden de jerarquía: rector de universidad, director de canal de televisión, comentarista en radio, columnista de periódico, bloguero furibundo. O por premios recibidos. Fotografiarme frente al librero. Tomar notas.
Segundo trimestre. Conseguir las señas domiciliares y laborales de cuanto escritor sea posible. Incluir en mi rutina diaria una parada en cada una de las localidades para fungir como paparazzi y devoto lector. En caso de toparlos de frente: pedir que me firmen ejemplares; preguntar por el bienestar de los personajes; recitar de memoria un verso. Hacer mapas de mis trayectos. Documentar las acciones. Tomar notas.
Tercer trimestre. Fundar un grupo literario. Limitar la admisión sólo a personajes que hayan publicado textos en los que se “clame” y se “fecunden” muchas cosas; personajes que manejen la mitología griega con más soltura que conocimiento; y traductores a idiomas que no dominan pero que conocen gracias a los diccionarios en línea. Fomentar discusiones sobre el futuro de la literatura. Fomentar la disensión. Romper con el grupo. Tomar notas.
Cuarto trimestre. Publicar mis notas en forma de novela fragmentaria. Titularla Biblioteca. ~
(ciudad de México, 1980) es ensayista y traductor.
