Tanto equipaje inútil que hemos abandonado
Y todavía hoy no se desdice el tiempo
La infancia es fría y limpia y en sus horas extáticas
Relucía en lo alto
Glacial y deslumbrante la promesa
Hoy sigue viva y fría
Y no entregada nunca mas nunca desmentida
Y hoy sigue siendo mi cordial tarea
No querer descansar en el reproche
Nunca llamarme a engaño
Saber que en la promesa es siempre
La verdad misma la que habla
Y afirmar que no es nunca la promesa quien miente. ~