A juzgar por las recientes nominaciones a Los Globos de Oro y el premio de la Asociación de Críticos de Los Ángeles, The Hurt Locker, de la directora Kathryn Bigelow, se perfila como una de las dos contendientes más fuertes para el Óscar a mejor película (junto con Up in the Air, de Jason Reitman).
El éxito de la cinta de Bigelow sorprende por su contenido: es, probablemente, la primera gran cinta sobre el conflicto en Irak. Lo verdaderamente curioso es que The Hurt Locker retrata la guerra como una droga potentísima, una inyección de adrenalina incomparable. Es, por lo tanto, una elección atípica en Hollywood, tierra demócrata.
Aquí una reseña.
-La redacción