Reconocido por sus estudios acerca de la melancolรญa o por sus anรกlisis de las relaciones sociopolรญticas en su Mรฉxico natal, el ensayista y antropรณlogo Roger Bartra (Ciudad de Mรฉxico, 1942) recupera otro de los temas principales de su obra, la mitologรญa, en El mito del hombre lobo. El antropรณlogo elabora una historia de la licantropรญa y, ademรกs, procura definir el sentido รบltimo de un mito โquizรก sea este el aspecto mรกs interesante del ensayo-.
Abundante suma de textos, autores, narraciones, leyendas, que tienen como protagonista al hombre lobo, criatura que proviene de la imaginaciรณn pero que, como seรฑala el investigador mexicano, provoca efectos tangibles, pues en su relato se encarna todo lo indeseable, aquello que como sociedad rechazamos o debemos rechazar. Para Roger Bartra, la construcciรณn de lo mitolรณgico โal igual que la parรกbolaโ nos sirve para orientarnos acerca de la nociรณn del bien y del mal โcivilizaciรณn y barbarieโ de la forma mรกs sencilla posible. El mito, por supuesto, no explica cuรกl es el origen de la crueldad o de los actos censurables, pero sรญ representa un perรญmetro nรญtido de cada categorรญa moral.
El ensayo sitรบa el origen de la leyenda del hombre lobo en la Epopeya de Gilgamesh. En concreto, en el instante del poema en el que Ishtar, โdiosa babilรณnica del amor, el sexo y la guerraโ condena a un hombre โa vivir como un loboโ, escribe Bartra.
Y de la literatura sumeria a los filรณsofos e historiadores griegos, con Platรณn y con Herรณdoto. El segundo relata la historia de los neuros, pueblo hechicero del norte de Europa cuyos integrantes, se decรญa, tenรญan la capacidad de transformarse en lobos. La metamorfosis, nos cuenta Roger Bartra, estuvo muy presente en la cultura grecolatina, a travรฉs de diversas obras. Una de ellas fue Las metamorfosis, de Ovidio, donde el poeta romano narra la historia del rey arcadio Licaรณn, transformado en lobo por Zeus, al comprobar el dios las atrocidades perpetradas por el monarca โeste le ofreciรณ la carne de sus descendientes como ofrendaโ.
Pasan los siglos, y en la Edad Media โque por otra parte tanto bebe de la Antigรผedadโ, el relato del hombre lobo sigue vigente en la cultura occidental. Con una leve variaciรณn: la criatura es sรญmbolo del dolor del alma humana. Los relatos sobre licรกntropos son una especie de alegorรญa de aquello que nos causa desazรณn o tristeza, como los celos, los desencantos, las traiciones. El hombre lobo serรญa el reflejo de un alma atormentada, de un alma que sufre. La persona, de este modo, se transformarรญa en el animal, simbolizando asรญ el estado de desolaciรณn de nuestras emociones.
Expone Bartra que el cristianismo del Medievo, a travรฉs de san Agustรญn de Hipona y de santo Tomรกs de Aquino, atribuye al hombre lobo un origen demonรญaco. El demonio es el causante de que los hombres muten en una imagen monstruosa y horripilante. Una mutaciรณn con la que enloquecen, pierden el juicio, asesinan, devoran niรฑos, etc. Bartra detalla cรณmo se usรณ esta nueva idea para perseguir o torturar a inocentes, principalmente a campesinos. Una situaciรณn similar a la que vivieron las mujeres acusadas de brujerรญa en los siglos XVI y XVII. En cuรกntas ocasiones se camuflaban odios personales bajo la acusaciรณn de licantropรญa. Para asรญ ejecutar con impunidad, con arreglo a la ley de Dios.
Ya en la modernidad, un relato sobre los hombres lobo destaca a finales del XIX. Se trata del cuento de Caperucita Roja, del escritor francรฉs Charles Perrault. La historia pertenece a la cultura popular y, aunque su contenido es conocido por todos, su propรณsito no lo es tanto. Roger Bartra sostiene que el cuento encierra una moraleja cuyas destinatarias eran niรฑas jรณvenes o adolescentes. El cuento de Caperucita advierte, en primer lugar, de que no se debe hablar con extraรฑos y, en segundo lugar, alerta โsobre los posibles acosos sexualesโ, en palabras del ensayista, quien nos descubre diferentes versiones a la redactada por Perrault. Leyendas orales que aรฑaden mรกs crudeza al cuento.
De la literatura โa travรฉs de la ficciรณn o la no ficciรณnโ a una nueva forma de expresiรณn cultural, el cine, ya en los siglos XX y XXI. Si bien es cierto que el hombre lobo no ha dado para memorables pelรญculas, sรญ se mencionan algunas que quizรก despierten el interรฉs de los lectores. El mito del hombre lobo vive, en estos aรฑos, un nuevo auge, cercano al de las narraciones de los autores grecolatinos โOvidio, Virgilio, Petronioโ, y su figura estรก presente en la cultura actual.
El terror, es decir, el miedo a lo desconocido, siempre ha generado respuestas, por supuesto desde la imaginaciรณn y no desde el raciocinio. En El mito del hombre lobo, Roger Bartra estudia un fenรณmeno que nos ayuda a entender cรณmo funciona nuestra mente, y por tanto nuestra historia, y por tanto nuestra cultura. El autor, a lo largo del ensayo, logra armar todo un discurso sobre la naturaleza humana. Un discurso con el que nos comprendemos, aunque su protagonista, el hombre lobo, sea una creaciรณn originada en los mรกrgenes de lo irracional, en el รกmbito de lo incomprensible.
Gonzalo Gragera es poeta y colabora en The Objective, Clarรญn y el Diario de Sevilla.