Los recientes escรกndalos de Duarte, Padrรฉs y Borge han evidenciado, una vez mรกs, el desmesurado poder que tienen los mandatarios estatales y la opacidad con la que manejan los recursos pรบblicos. Un combate cabal de la corrupciรณn tendrรญa que sancionar esas faltas, sin depender de la voluntad de los actores polรญticos de las entidades. Este nรบmero examina cuรกles son las dinรกmicas locales que protegen la discrecionalidad y describe los retos prรกcticos a los que se enfrentan quienes encabezan las instancias anticorrupciรณn.