Hay dos rutas posibles: la neozelandesa y la sueca. La primera, muy superior, conlleva eliminar el coronavirus. Asรญ como aquรญ estamos recluidos en nuestras casas, en Nueva Zelanda se van a recluir en su isla, quizรกs junto con su vecino, Australia. Otra isla, Taiwรกn, y los tres paรญses bรกlticos tambiรฉn siguen esta ruta. Quien venga de afuera de la burbuja deberรก someterse a una rigurosa cuarentena. Sacrificarรกn el turismo externo, pero tendrรกn una vida normal sin coronavirus.
Tras su fracaso inicial en contener el coronavirus, China quiere ahora seguir esta ruta. En un paรญs que tiene fronteras con 14 paรญses, altos volรบmenes de comercio internacional y mucha poblaciรณn, se requiere rastrear todos los movimientos e imponer todas las restricciones necesarias para el cumplimiento de este objetivo. No serรก nada fรกcil. Veremos brotes nuevos, aunque tienen la informaciรณn y las capacidades para encerrar a quien sea necesario para tratar de contenerlos.
Poder seguir la ruta de Nueva Zelanda serรญa lo ideal. Mรฉxico, sin embargo, no es una isla ni tiene capacidades estatales para monitorear contagios ni confinar a la poblaciรณn cuando sea necesario. Nos queda intentar emular la ruta sueca, pero serรก un viaje tortuoso y empinado.
En Suecia el confinamiento ha sido voluntario, aunque la gente se ha cuidado. De acuerdo con el รญndice de movilidad de Citymapper, el trรกfico en Estocolmo cayรณ 65 por ciento. Si bien las universidades y las preparatorias cerraron, la educaciรณn bรกsica se ha mantenido abierta, junto con el grueso de la actividad econรณmica.
No es una ruta fรกcil. En tรฉrminos per cรกpita, Suecia ha tenido muchos mรกs enfermos y muertos que sus vecinos escandinavos, quienes ya prรกcticamente dejaron de acumular casos. En tรฉrminos del promedio mรณvil de 7 dรญas de fallecidos por cada millรณn de habitantes, hoy tiene el mayor รญndice de muertos por cada millรณn de habitantes de los paรญses de la Uniรณn Europea. La curva ya se aplanรณ. La curva de Mรฉxico sigue ascendiendo, aunque su nivel de muertos per cรกpita es aรบn mรกs bajo que el sueco. Acรก se pueden consultar los datos.
La ruta sueca parte de la idea de permitir el contagio mientras no se desborde el sistema de salud. Eso lo han logrado.
En el camino quizรก se consiga la llamada inmunidad de rebaรฑo, aunque ese no es el objetivo explรญcito, es polรญticamente costoso, y en cualquier caso toma mucho tiempo. Se ha calculado que en Espaรฑa, cuando habรญa poco mรกs de 27 mil muertos, sรณlo el 5 por ciento de la poblaciรณn se habรญa contagiado. La inmunidad de rebaรฑo requiere que por lo menos el 60 por ciento de la poblaciรณn genere anticuerpos. Esto se lograrรก en Estocolmo โen algรบn momento de mayoโ, segรบn Anders Tegnell, artรญfice de la estrategia sueca.
Con inmunidad de rebaรฑo, el coronavirus puede desaparecer de la poblaciรณn. Se acepta que en un principio habrรก mรกs muertos que en otros paรญses (como efectivamente estรก sucediendo), pero se espera que para finales de este aรฑo, pasado el rebote invernal, los muertos totales sean menos respecto a sus vecinos, los cuales siguieron otra ruta. Tambiรฉn se espera que el costo econรณmico sea menor, al no requerir paralizar la actividad econรณmica.
Mรฉxico tampoco es Suecia, un paรญs con poca poblaciรณn en un territorio grande, con una ciudadanรญa disciplinada, sana, que vive sola en una gran proporciรณn de los hogares, y con instituciones de salud eficaces. El gobierno mexicano pasa los dรญas prometiendo que ya llegamos al pico, o que no falta mucho para llegar, pero esto no es cierto. La curva sigue empinada. Con los pocos datos que tienen debe ser muy difรญcil hacer proyecciones certeras. Tampoco se irรก la pandemia, como por momentos parece sugerir la autoridad.
Hoy hay mรกs enfermos con posibilidad de contagiar a terceros que cuando nos recluimos. Pensar que ya pasรณ lo peor y que simplemente se puede abrir la economรญa y vivir como suecos es una ilusiรณn. El coronavirus no se ha ido. Mientras no haya un tratamiento eficaz y accesible viviremos en riesgo.
Si abrimos la economรญa de forma apresurada, el rebote puede llevarnos a una situaciรณn mucho peor que la actual. En ese escenario habrรญa que cerrar de forma abrupta, con todo el daรฑo econรณmico aparejado.
Hay un complicado balance entre proteger la vida y la economรญa. No seamos puristas. El gobierno siempre ha estado dispuesto a aceptar ciertas muertes a cambio de algunos beneficios econรณmicos. Permitir que circulen los automรณviles es uno de ellos. El gobierno de AMLO ha optado por bloquear las fuentes limpias de electricidad y producir a partir de fuentes muy contaminantes como el combustรณleo. Esto le darรก ingresos a la CFE y a Pemex, aunque haya por ello mรกs muertes por enfermedades respiratorias.
El reto es ponderar quรฉ se debe hacer y cรณmo. Para ello se requieren sรณlidas capacidades tรฉcnicas y operativas. Informaciรณn veraz amplia y de calidad. Un sistema hospitalario robusto, bien equipado y que proteja a su personal. Nada de esto tenemos en Mรฉxico. No podemos ni proteger a quienes trabajan en los centros de salud. Es escandaloso que casi la cuarta parte de contagios de covid-19 sea de personal mรฉdico.
Esta semana Mรฉxico ocupa el dรฉcimo primer lugar mundial en decesos confirmados por covid-19; cuarto lugar en Amรฉrica. Y eso que los contamos mal, como recientemente mostrรณ un reportaje de Mexicanos Contra la Corrupciรณn y la Impunidad para el caso de la Ciudad de Mรฉxico.
Esto es raro. El presidente afirmรณ el 26 de abril que โvamos bien, porque se ha podido domar la epidemiaโ.
AMLO es muy bueno para contar cuentos. Lo malo es que mientras realmente domamos la epidemia, sin poder ser ni Nueva Zelandia ni Suecia, iremos dando trompicones y pagando un alto costo en vidas y en crecimiento econรณmico. Ojalรก que en el camino muchos aprendan a ser felices; ya dijo AMLO que esto del crecimiento econรณmico no importa.