Muchas de las acertadas observaciones de Zaid en “Inteligencia sin palabras” (Letras Libres, 111) son evidentes en personas que han sufrido derrames cerebrales. Yo he experimentado de primera mano cómo mi esposa y yo hemos desarrollado patrones de comunicación alternativos después de que ella sufrió un derrame cerebral que le afectó severamente el área del temporal izquierdo, donde se aloja el centro del habla. Ella, al no poder expresarse con palabras, desarrolló un sinnúmero de alternativas de comunicación. Lo difícil es cuando tiene que explicarme algo por teléfono y no puedo verla. Confío que con los avances recientes de los videoteléfonos resolvamos esto. ~
¿En qué momento se jodió El País?
Los seguidores de la buena prensa nos preguntamos cómo, cuándo y por qué el diario El País ha tocado fondo, se ha hundido no solo económica sino periodísticamente.
Aviso a nuestros lectores
Letras Libres comienza este 2001 con un nuevo precio de cuarenta y cinco pesos por ejemplar. La revista se ve obligada a este incremento por diversos factores del mercado y pide la…
La fascinación por lo mórbido
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