La última muestra de arte de la Fundación Banco Santander es un laberinto que acaba de abrirse al público en la Sala de Arte de la Ciudad Grupo Santander (Boadilla del Monte, Madrid). La Colección del portugués Teixeira de Freitas está pensada para perderse entre las 350 obras de 193 artistas de distintos países. Es un tesoro desconocido en la que figuran firmas como Damián Ortega, Jonathan Monk, Nina Canell, Thomas Ruff o Jonathas de Andrade.
La sala de arte de la Fundación Banco Santander está abierta al público de modo gratuito. La impresionante “ciudad financiera” del banco no es óbice para que los amantes del arte acudan a esta cita. En estos días está presentando por primera vez al público obras procedentes de una de las colecciones privadas de arte contemporáneo internacional más importantes. Esta exposición, centrada en la arquitectura, la literatura y el arte conceptual, estará abierta hasta el 14 de junio.
“No habrá nunca una puerta. Estás adentro”. Estas palabras, tomadas del primer verso del poema Laberinto de Jorge Luis Borges, dan título a la exposición que acoge desde la pasada semana la sala de arte de Banco Santander. La muestra reúne una selección de instalaciones, dibujos, pinturas, esculturas, vídeos y libros de artistas pertenecientes a la colección de arte contemporáneo del abogado luso brasileño Luiz Augusto Teixeira de Freitas.
“Tenemos ante nosotros una de esas colecciones apenas vista. Es la primera vez que Luiz decide sacar de su casa sus mejores obras para ofrecérselas al público. Pocas veces he visto a un coleccionista tan unido a su Colección”, asegura Borja Baselga, director de la Fundación Banco Santander. La exposición cuenta con obras de autores internacionales como Cildo Meireles, Dahn Vo, Damián Ortega, Jonathan Monk, Jorge Macchi, Carlos Garaicoa, Nina Canell, Thomas Struth, Robert Kinmont, Sanja Ivekovice, Sofia Hultén, Thomas Ruff, Robert Breer, Bernd & Hilla Becher, Jonathas de Andrade, Armando Andrade Tudela, Walid Raad, Alighiero Boetti o Emily Jacir, entre otros.
Para la Fundación Banco Santander, organizadora de la exposición, “la muestra refleja la amplia variedad de significados que pude alcanzar una colección de arte. Se organiza como un laberinto, no tiene un comienzo ni un final, ningún tema específico, no está centrada en ningún territorio, época o creencia. Y, sin embargo, las opciones que se plantean son infinitas. Se establecen diálogos, se generan encuentros, se deconstruyen supuestos previos y se despliegan innumerables posibilidades”.
Durante la inauguración de la muestra, a la que asistió la presidenta del Banco, Ana Botín, el coleccionista portugués explicó: “Cuando empecé no sabía nada y no tenía tiempo de volver a la universidad para estudiar arte. Tenía muchas ganas de comprar y acumular. Esta obsesión me hizo poseer esta colección tan grande (más de 1.000 piezas) en tan poco tiempo. Aquí está sólo el 20%”. La colección fue creciendo con obras que tienen que ver con la arquitectura, la literatura y la política de artistas procedentes de Latinoamérica, Europa y Oriente Medio. “El arte de me ha enseñado a tener una vida mejor y más interesante. Te hace encontrar una razón para explicar la existencia y reflexionar sobre algo tan importante como la vida y la muerte”.
Teixeira de Freira, en agradecimiento a la institución organizadora, ha decidido donar al Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, del que es patrono, una de las obras expuestas. Se trata de “Materia en reposo”, del artista mexicano Damián Ortega, rey indiscutible de esta colección. Esta escultura, compuesta por 1.700 ladrillos, refleja la pobreza de los barrios marginales de México.
En la sala de arte de Banco Santander se podrá descubrir esta exposición de forma gratuita de la mano de educadores, con experiencias y talleres organizados por las compañías Pedagogías Invisibles y Mirarte.
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