Resultan interminables y al mismo tiempo imprescindibles los debates y las discusiones sobre la escritura y la era digital. Ahora, en Granta, el audio de una conversación entre cuatro jóvenes escritores y editores.
Y sobre el tema de lo digital y su intromisión en la cultura de la escritura, en el New Yorker, Nicholson Baker se pregunta sobre las bondades del Kindle. Además, en Slate, un ensayo sobre la posibilidad de la censura que entraña un sistema de libros electrónicos como ése. También, en una mirada un poco más nostálgica, Peter Conrad, en una reseña en el periódico inglés The Guardian, habla de la importancia de las portadas.
Nancy Sinatra escribe un editorial en el New York Times sobre las regalías que los músicos no reciben porque las canciones en las que participaron se toquen en la radio. Y su opinión es comentada en uno de los blogs de la revista The Atlantic.
Iggy Pop, pionero de la música punk y rockero inagotable, da un giro inesperado a su carrera con su nuevo disco: Préliminaires, inspirado por una novela de Michel Houellebecq y que incorpora elementos de la chanson française y del jazz de Nueva Orleans. En El País entrevistan al cantante a propósito de este proyecto.
Como ya es costumbre, el verano se llena de ediciones especiales que interrumpen el vértigo de lo coyuntural para darle cabida a ensayos más distendidos, sosegados. The Atlantic, en su edición de ficción, además de cuentos originales, publica un interesante ensayo firmado por Alice Sebold sobre los premios literarios.
La administración Bush utilizó todo tipo de argucias legales para ampliar los límites de lo admisible al momento de interrogar a sus detenidos. Los documentos, por mucho tiempo retenidos fuera del escrutinio público, han sido liberados poco a poco. Aún es mucho lo que no se sabe ni se sabrá. Este hombre, retratado en The New Republic, parece que será el encargado de investigar los archivos y deslindar responsabilidades.
También una entrevista con el fundador de una de las casas editoriales más interesantes de Estados Unidos. John O’Brien dirige Dalkey Archive, un proyecto que ha apostado no sólo por autores locales con cierto grado de riesgo sino también por la traducción de obras extranjeras, una labor no necesariamente primordial en los catálogos estadounidenses.
Poco antes de venir a nuestro país, el depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, hizo unas equívocas declaraciones en torno a un posible boicot de Nike, la empresa de calzado y ropa deportiva, al gobierno de Micheletti. La cuestión es algo más enredada y poco tiene que ver con la visión de Zelaya. En Foreign Policy desgranan el affaire.
Cada libro de Thomas Pynchon levanta ronchas o entusiasmos fanáticos entre la crítica literaria. Porque vale la pena ponerle atención a un autor que no invoca a las medias tintas, sugerimos la lectura de estas dos reseñas sobre su última novela, Inherent Vice: en la primera, de la New York Magazine, el autor expone desde el inicio, con franqueza absoluta, su odio visceral a Pynchon. La segunda, de The Guardian, ofrece una lectura mucho más favorable.
El suplemento dominical de El País presenta un reportaje interesante sobre las comunidades menonitas en Bolivia. Según parece, los menonitas más radicales emigran allí, paradójicamente, en busca de condiciones de pobreza lo suficientemente duras como para mantener alejados los vicios y las novedades de las sociedades modernas.
Dadas las condiciones de totalitarismo que imperan en Corea del Norte, la literatura de ese país es poco conocida. Más aún en el caso de las mujeres escritoras. En The Rumpus entrevistan a Hyejin Kim, novelista norcoreana, quien habla sobre las dificultades políticas de su país y opina sobre el sonado caso de las dos periodistas detenidas (y recientemente liberadas).
Por último un video de la conferencia que dictó Alain de Botton en la serie TED, en el que expone su propuesta para reentender nuestra relación con el logro y el éxito; y otro video, de Paul Auster, en el que el autor enlista los tres –predecibles– libros que se llevaría a una isla desierta.
– La redacción
Iggy Pop