Del Partido al oftalmólogo
Amanece con el rostro enemigo dentro del párpado
con el índice ligero por presurosos veredictos
y nos adaptamos al mundo como el polvo a las cosas
para aceptar –ya con el café tibio–
que los precipicios también
provocan cataratas.
Cartografías de la guerra
Impunes,
en la bolsa de un despiadado,
los dobleces del papel
deciden las fronteras
entre imperio e imperio. ~
(Toluca, 1989) ha publicado en Sopitas.