En su toma de protesta como candidato del Partido Encuentro Social (PES) el 20 de febrero, López Obrador propuso la creación de una constitución moral para cuidar los valores de los mexicanos y reparar el tejido social. A un mes de haber ganado las elecciones, declaró que su equipo está trabajando en un anteproyecto porque “no solo debemos buscar el bienestar material, sino también el bienestar del alma”.
Su propuesta de un marco legal para lograr una convivencia basada en el amor no ha sido aceptada por varios miembros de la opinión pública. Para el economista Isaac Katz, una constitución moral “es permitir que el gobierno se entrometa en actos de la esfera privada que no le competen”. De la misma línea es el exprocurador general de la República Ignacio Morales Lechuga, quien señala que: “El Estado no tiene, hasta ahora, facultades para legislar en materia moral, de entrada porque ello afectaría gravemente la libertad de pensar y de actuar”. La propuesta de López Obrador no es nueva. En 2011 ya había sugerido la redacción de un documento que ordenara la moral, a propósito de un texto de Alfonso Reyes, como escribió en aquel entonces Guillermo Sheridan.
Este martes tuvo lugar en Ciudad Juárez el primer Foro de Escucha para la Ruta de Pacificación y Reconciliación Nacional. El foro se dividió en una conferencia inaugural y cinco mesas de trabajo donde se escucharon a algunas víctimas, miembros de organizaciones civiles, representantes de grupos religiosos y expertos en el tema.
Durante la inauguración, el próximo presidente invitó a las víctimas a perdonar: “Si aplicamos el ojo por ojo, diente por diente, nos vamos a quedar chimuelos todos, o muertos”. Y anticipó que su plan de seguridad estará listo en noviembre, una vez que terminen los 18 foros.
Sobre las dudas que ha generado la propuesta de otorgar amnistía a los delincuentes, Alfonso Durazo, propuesto como titular de la Secretaría de Seguridad Pública, aclaró que esta solo beneficiará a quienes no hayan cometido delitos graves ni hayan atentado contra los derechos humanos: “Proponemos un proceso de pacificación y reconciliación nacional, no un pacto con el crimen, convencidos que, sin una solución, no habrá punto de inflexión”.
Por su parte, la futura secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, está consciente de que la violencia no parará con comisiones de la verdad ni con amnistías: “lograr la pacificación de un país como México, requiere de un sistema complejo y que nos haga caminar juntos a la paz”.
En su columna en El Universal, Francisco Rivas, Director del Observatorio Nacional Ciudadano, recordó que hace seis años el equipo de transición de Enrique Peña Nieto solicitó a varios expertos compartir sus propuestas en materia de seguridad con análisis de costos, tiempos de implementación, fortalezas y desafíos. Sin embargo, teme que los foros que han iniciado este mes se conviertan en “un ejercicio meramente testimonial” por la falta de claridad en los objetivos y propuestas: “Para que un proyecto funcione se requiere un mínimo de conocimiento del marco normativo, de los recursos efectivos con los que cuenta el Estado y de un diagnóstico de qué ha impedido que se cristalice el combate al delito y la violencia en dicha región o en todo el país”.
Las conclusiones de ese primer foro no arrojan un plan de acción claro, solamente algunos puntos de coincidencia, como la defensa de los derechos humanos y la necesidad de la prevención.
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Una vez que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) resolvió las 288 impugnaciones a la elección presidencial, en su mayoría presentadas por el PES, declaró, por unanimidad, como presidente electo a López Obrador. La presidenta del Tribunal, Janine Otálora Malassis, entregó la constancia de mayoría a López Obrador.
En su discurso de aceptación, el presidente electo destacó la vocación democrática de la sociedad mexicana y afirmó que actuará con rectitud y respeto a la soberanía de los demás poderes. Antes de concluir, reiteró su voluntad de atender las exigencias del país: “Voy a cumplir todos los compromisos de campaña, no le voy a fallar a los ciudadanos”.
A partir de este momento, los equipos de transición podrán reunirse con el gobierno saliente para alistar la alternancia.
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Con la entrega de la constancia de mayoría a López Obrador llegan a su fin el proceso electoral y esta bitácora. Desde las precampañas hasta la declaratoria de validez de la elección expusimos, contrastamos y comentamos las polémicas más relevantes. En este sitio seguiremos, en pluma de nuestros bitacoristas y colaboradores, los pasos del presidente electo.