Escribo en el quinto dรญa del ataque a nuestro paรญs desde Gaza.
Los medios informan sin descanso y sin avisos comerciales, muestran a policรญas y soldados que buscan en todos los rincones de los kibutzim y aldeas a las รบltimas fuerzas militares del Hamรกs. Las sirenas aรบllan en las calles. Fuerzas de Hezbolรก en Lรญbano agreden las principales ciudades del norte.
En breves momentos, hijos y nietos nos obsequian una llamada telefรณnica desde lugares donde rojos choques tienen lugar. Cuando es necesario, mi esposa y yo descendemos al refugio, espacio obligado en todas las viviendas, instituciones y hoteles del paรญs.
Procuramos desalojar el miedo, hacer compras indispensables en multitudinarios centros comerciales, y esperamos alguna apariciรณn televisiva del primer ministro Benjamรญn Netanyahu, quien, segรบn versiones, en su momento fue debidamente advertido por los egipcios sobre un inminente ataque a Israel organizado por Teherรกn.
Desde el inicio de la reacciรณn civil y militar israelรญ, las interrogantes no cesan: ยฟpor quรฉ la invasiรณn no fue advertida y frenada en la maรฑana del sรกbado? ยฟFue atinado concentrar fuerzas militares en Cisjordania, con el consiguiente descuido de las poblaciones que habitan el sur del paรญs? ยฟCรณmo se explica el descuido de la inteligencia militar cuando las barreras elรฉctricas levantadas en la frontera con Gaza fueron derribadas? ยฟPor quรฉ las autoridades civiles y militares permitieron masivos festivales hasta las tempranas horas de la maรฑana del sรกbado? ยฟPodrรกn los hospitales โen Beer Sheva en particularโ atender a los heridos (mรกs de 2 mil) que se multiplican? ยฟCuรกndo y cรณmo se verificarรกn los entierros de casi trescientas vรญctimas de la agresiรณn que yacen en mรบltiples rincones del paรญs?
Se suman a este escenario los decaรญdos rostros de no pocos miembros del alto mando militar y la inquietud por el centenar o mรกs de mujeres y niรฑos secuestrados que estarรญan en algรบn lugar de Gaza.
En lรบcido contraste se multiplica la generosa actitud de ciudadanos que donan sangre, alimentos y ropas a las fuerzas movilizadas en todo el paรญs.
La adhesiรณn al gobierno de los lรญderes de la oposiciรณn que cuentan con amplia experiencia militar tranquiliza a amplios sectores pรบblicos. Al cabo de cinco dรญas en los que Benjamรญn Netanyahu compareciรณ solo algunos minutos, crece la confianza pรบblica.
En este difรญcil panorama llegรณ la voz del presidente Biden. Al asegurar su apoyo a nuestro paรญs en estas difรญciles horas recordรณ su temprano interรฉs en el devenir de Israel y el cercano vรญnculo con lรญderes israelรญes desde Golda Meir hasta Shimon Peres. El decisivo apoyo de paรญses de Europa occidental y de Amรฉrica Latina se reitera y multiplica.
Las difรญciles circunstancias obligan a preguntar quiรฉn anima y modela esta dolorosa agresiรณn.
Mi respuesta: Irรกn.
Su rรฉgimen inspira y organiza los movimientos de Hamรกs y Hezbolรก, con la ayuda indirecta de Siria y Jordania. Desde el ascenso de Homeini en Irรกn, se declara inexcusable la existencia de Israel en el Medio Oriente. Actitud que en estos dรญas se endurece por el ascenso de Arabia Saudita, paรญs rival de Teherรกn en tรฉrminos estratรฉgicos y religiosos. La posibilidad del brote de un amplio tejido de relaciones entre Israel y Riad โincluyendo entendimientos militares no convencionalesโ es inaceptable para este paรญs. Le urge deshacerlos.
En estas circunstancias cabe preguntar: ยฟhacia dรณnde marchamos en el Medio Oriente?
No tengo dudas que al fin Israel obtendrรก la victoria. Y de este hecho seguirรกn dramรกticos cambios en el liderazgo gubernamental y en las futuras orientaciones del Medio Oriente.
Ciertamente anticipo la apertura, en su momento, de un juicio pรบblico a los personajes que hoy nos gobiernan, empezando por Netanyahu.
Por otra parte, la conducta de los principales lรญderes de las fuerzas armadas y servicios de inteligencia de Israel serรก tambiรฉn debidamente evaluada por instancias jurรญdicas del paรญs.
En cualquier caso la fisonomรญa geopolรญtica e ideolรณgica del Medio Oriente conocerรก giros radicales que incluirรกn โen el marco regionalโ un firme entendimiento entre Israel y Arabia Saudita. La capacidad nuclear de Israel ya no es secreto, ni su inclinaciรณn a ayudar a Arabia Saudita en este asunto con el objeto de multiplicar en conjunto la resistencia a Irรกn. A mi parecer, esta tendencia ganarรก impulso en los prรณximos meses. ~
es acadรฉmico israelรญ. Su libro mรกs reciente es M.S. Wionczek y el petrรณleo mexicano (El Colegio de Mรฉxico, 2018).