La saga del brexit lleva produciรฉndose ya tanto tiempo que, a pesar de sus giros y vueltas, empieza a parecer que nada cambia. Como dijo hace poco un experto, en 2192 el primer ministro britรกnico tendrรก que hacer su visita anual a Bruselas โpara pedir una extensiรณn de la fecha lรญmite del brexit. Nadie recuerda de dรณnde proviene esta tradiciรณn, pero cada aรฑo atrae a turistas de todo el mundo.โ
Y, sin embargo, parece que el paรญs se dirige al fin hacia una decisiรณn. Boris Johnson ha amedrentado y persuadido a un parlamento reticente para que acepte unas nuevas elecciones, que tendrรกn lugar el 12 de diciembre. A lo largo de los รบltimos meses, ha conseguido unir al partido conservador en torno a su idea de lo que debe ser el brexit. Si consigue vencer en las elecciones, como parece probable, quizรก logre tener รฉxito tanto en sacar al paรญs de Europa como en dominar la polรญtica britรกnica en la prรณxima dรฉcada.
Sus posibilidades de รฉxito se deben a dos factores: Johnson ha convertido el partido polรญtico mรกs antiguo del mundo en una orgullosa encarnaciรณn del populismo. Pero el tipo de populismo que defiende es mucho mรกs moderado que su variedad de ultraderecha que crece desde Italia a Estados Unidos.
El seรฑuelo de las รฉlites
Cada vez que tiene la oportunidad, Boris Johnson afirma que la polรญtica britรกnica se define por un choque entre dos fuerzas bรกsicas: por una parte, estรก una รฉlite alejada del pueblo que estรก tan comprometida a sus valores liberales de izquierda que es capaz de ignorar la voluntad de los votantes britรกnicos. Por otra parte, estรก el pueblo puro, que votรณ por el brexit en un intento heroico de acabar con la dominaciรณn elitista del paรญs. La promesa central de Johnson es ayudar al pueblo puro a vencer a la รฉlite corrupta.
Desde que llegรณ al poder, Johnson ha usado este relato bรกsico para deslegitimar cualquier instituciรณn independiente que se enfrente a รฉl. Ha convertido a los conservadores en el โpartido del puebloโ y ha atacado la legitimidad de los tribunales, los medios e incluso el propio parlamento. Como dijo entre risas y aplausos ante la conferencia del partido conservador, โlos votantes tienen mรกs voz y voto en el reality show britรกnico โIโm a Celebrityโ que en la Cรกmara de los Comunesโ.
Esto ayuda a explicar algo que de otra manera serรญa incomprensible: ยฟPor quรฉ Boris Johnson ha demostrado ser capaz de unir a (casi) todo el Partido Conservador en torno a su idea del brexit a pesar de que el acuerdo que propuso al parlamento es muy similar al que presentรณ hace unos pocos meses Theresa May?
El acuerdo de May no consiguiรณ dar a cada lado del debate una razรณn verdadera para apoyarlo. Los que querรญan preservar una relaciรณn cercana con la UE creรญan que May estaba daรฑando el futuro econรณmico del paรญs porque proponรญa abandonar el mercado รบnico. Los que querรญan un corte limpio con Europa consideraban que Reino Unido estarรญa demasiado atada a las reglas hechas en Bruselas. Ambos temรญan con razรณn que el acuerdo de May harรญa perder mรกs influencia al paรญs que si se hubiera quedado en la uniรณn, pero tampoco le daba la libertad de establecer su propio camino con una ruptura radical.
El acuerdo con el que Johnson ha obtenido una mayorรญa tiene esas mismas limitaciones. Proporciona mรกs detalles sobre cรณmo Irlanda del Norte podrรก disfrutar de un comercio sin fricciones con la Repรบblica de Irlanda sin desconectarse del resto del Reino Unido. Pero tambiรฉn plantea un futuro en el que Reino Unido tendrรก que seguir las regulaciones europeas clave o sufrir unos aranceles que daรฑarรญan considerablemente su economรญa. Desde una perspectiva de polรญticas pรบblicas, resulta muy sorprendente que un nรบmero significativo de parlamentarios que se opusieron al acuerdo de May le diera luz verde en un voto importante hace dos semanas.
La รบnica explicaciรณn plausible es que el brexit nunca tuvo que ver con las polรญticas pรบblicas en primer lugar. Lo que los partidarios del brexit quieren mรกs que nada es que el brexit sea una herramienta con la que cargarse al establishment. Al ocultar su actitud mรกs o menos conciliadora hacia Europa con un lenguaje populista, Johnson ha sido capaz de asegurar a los brexiteers que el proyecto de arremeter contra las รฉlites sobrevivirรก al acuerdo.
Hoy, Johnson no es mรกs que el producto de un establishment britรกnico que ha perdido popularidad. Pero como otras personalidades del establishment, de Jaroslaw Kaczynski en Polonia a Donald Trump en Estados Unidos, se ha labrado un nombre en polรญtica atacando las piedades de la ortodoxia liberal de izquierdas. Y aunque el acuerdo que ha presentado al parlamento no era muy diferente al paquete de May con mucho maquillaje, la retรณrica que ha usado desde que llegรณ al poder ha sido radicalmente diferente: al inclinarse descaradamente por el lenguaje populista y criticar sonoramente instituciones tradicionales como el parlamento o el Tribunal Supremo, Johnson ha demostrado que considera que el brexit es el principio, y no el final, de la Revoluciรณn cultural britรกnica.
Mรกs allรก del brexit
Cuando el brexit deje de ser el tema que acapara toda la polรญtica britรกnica, Johnson probablemente se enfrentarรก a otras cuestiones del mismo modo: en tono, seguirรก siendo un populista estridente. En sustancia, es probable que defienda polรญticas relativamente moderadas.
Ha tomado un par de decisiones clave que seรฑalan hacia esa direcciรณn. Despuรฉs de aรฑos de gasto pรบblico restringido, ha aumentado sustancialmente la inversiรณn en รกreas como la policรญa o la educaciรณn. Y aunque a menudo usa un lenguaje despectivo contra comunidades minoritarias, estรก dando pasos para atraer mรกs inmigrantes cualificados: ha anulado una ley de su predecesora, por ejemplo, y estรก dando visas de trabajo de dos aรฑos a estudiantes que completan una carrera en el paรญs. ยฟPuede funcionar esta combinaciรณn inusual?
Adivinar el resultado de las elecciones es siempre un esfuerzo inรบtil. En Reino Unido, donde el sistema electoral mayoritario puede dar a los partidos que ganen un 30% o 35% del voto una mayorรญa muy amplia en el parlamento, es aรบn mรกs peligroso. Pero parece muy probable que Johnson gane con margen este diciembre, e incluso que domine la polรญtica britรกnica en los prรณximos aรฑos.
Esto es en parte una cuestiรณn de suerte: la oposiciรณn es un desastre sin soluciรณn. El Partido Laborista estรก liderado por el lรญder de la oposiciรณn mรกs impopular de la historia reciente. Tres aรฑos despuรฉs del referรฉndum, el partido todavรญa no tiene una posiciรณn clara sobre el brexit. Como consecuencia, los Liberales Demรณcratas, que en las รบltimas elecciones sufrieron una considerable derrota, ahora parece que se ganarรกn la confianza de muchos remainers convencidos. Con la izquierda dividida, es mรกs fรกcil para los tories sumar votos.
Pero si Johnson gana en diciembre, es tambiรฉn porque ha encontrado una manera de explotar la ira populista sin asustar a segmentos clave de la poblaciรณn. Su estilo populista le estรก permitiendo arrinconar al Brexit Party y consolidar apoyo en la derecha britรกnica. Al mismo tiempo, sus polรญticas relativamente moderadas, y su pasado como alcalde popular en un Londres muy diverso, le asegura no provocar tanto miedo y desconfianza en las minorรญas รฉtnicas y religiosas como Trump y otros populistas de ultraderecha.
En un sistema polรญtico fragmentado, esta receta quizรก dรฉ a Johnson una posiciรณn dominante para la prรณxima dรฉcada.
El camaleรณn del populismo
En los รบltimos tres aรฑos, ha habido populistas de ultraderecha que han obtenido victorias sorprendentes. Polรญticos como Trump o Jair Bolsonaro estรกn muy a la derecha del centro en absolutamente todos los temas: usan un lenguaje extremo para hablar de minorรญas รฉtnicas y religiosas; son muy hostiles al Estado de bienestar; y hablan de sus aliados de manera muy despectiva.
Pero el populismo es una manera de pensar en la polรญtica que puede ser mรกs ideolรณgicamente flexible que lo que nos sugieren personalidades como Trump o Bolsonaro. Algunos populistas, como Kaczynski en Polonia, han tenido รฉxito combinando una postura de ultraderecha en cuestiones culturales como los derechos de los homosexuales con polรญticas de centroizquierda en cuestiones econรณmicas, como los subsidios. Otros populistas, como Hugo Chรกvez en Venezuela o Evo Morales en Bolivia, han combinado un relato populista con una actitud mรกs radicalmente anticapitalista.
Johnson demuestra hoy que los emprendedores polรญticos pueden, incluso en un paรญs muy diverso como Reino Unido, tener รฉxito combinando populismo con una moderaciรณn relativa en las dimensiones econรณmica y cultural. Esto sirve como un recordatorio de que el populismo puede sobrevivir mรกs de lo que muchos de sus observadores suelen pensar: lejos de estar pegado a una ideologรญa concreta que atrae a votantes mayores que no son inmigrantes, la idea de que un hombre fuerte tiene que defender a un pueblo desposeรญdo contra una รฉlite corrupta puede tomar diversas formas.
El camaleรณn del populismo sobrevive. Y la Era de Boris puede durar mรกs de lo que todos pensamos.
Traducciรณn del inglรฉs de Ricardo Dudda.
Yascha Mounk es director de Persuasion.