โLa polรญtica puede ser descorazonadoraโ, dijo este lunes Hillary Clinton en un discurso dirigido a votantes milenials en Filadelfia. โEn especial esta elecciรณn, a veces puede resultar realmente deprimenteโ.
Sin duda que sรญ. Y para muchos de los votantes milenial, no es solo que Donald Trump forme parte de la contienda.
Hillary Clinton estรก en campaรฑa con la plataforma programรกtica mรกs progresista en la historia del Partido Demรณcrata. Y aรบn asรญ, los jรณvenes liberales y los partidarios de Bernie Sanders estรกn muy lejos de darle su apoyo. En las encuestas con votantes milenial sobre los cuatro candidatos, Clinton va pareja con el candidato libertario Gary Johnson y pierde a muchos votantes potenciales a favor de la candidata del partido verde, Jill Stein. Esto la sitรบa varias decenas de puntos porcentuales detrรกs del paso que Obama estableciรณ entre votantes jรณvenes en sus dos victorias electorales.
โAรบn si estรกs completamente en contra de Donald Trumpโ, reconociรณ Hillary hace unos dรญas, โquizรก sigas con algunas dudas acerca de mi. Entiendo esoโ.
Al inicio del verano, cuando la prioridad mรกxima era la reconciliaciรณn al interior del partido, la campaรฑa de Hillary Clinton se enfocรณ en hacer toda un gran espectรกculo al cacarear su plataforma y sus propuestas acerca de cambio climรกtico, universidad sin deuda estudiantil, reforma al sistema de salud, sueldos igualitarios y otros. Pero una vez que tenรญa asegurada la nominaciรณn, el objetivo posterior a la convenciรณn se volvieron los votantes moderados, suburbanos y con inclinaciones republicanas, y entonces las propuestas volvieron a empolvarse en el archivero. Asรญ que es difรญcil reclamarle a estos jรณvenes partidarios de Sanders por no alinearse. El discurso del lunes, ademรกs de un artรญculo en Mic, son parte de un esfuerzo para decirle justamente a estos votantes: โSรญ, todavรญa me importan esas propuestas, y sรญ, mรกs o menos se asemejan al tipo de polรญticas por las que he luchado durante toda mi carreraโ.
Pero mencionar toda la lista de pendientes que le importan a este demogrรกfico no es suficiente. No llega al fondo del problema, a saber: un asunto de carรกcter, y el hecho de que Clinton personifica a la polรญtica de carrera. Es en el fundamental tema de la confiabilidad que Clinton enfrenta la pendiente mรกs pronunciada por remontar entre votantes jรณvenes. Pero ella y su equipo fueron suficientemente inteligentes como para entender eso e integrarlo al discurso.
Una encuesta nacional de Quinnipiac publicada la semana pasada le preguntaba a votantes potenciales si creรญan que Clinton era honesta. En general, 32 por ciento pensaban que sรญ, comparado con el 65 por ciento que opinaba que no. Ese horrible panorama era consistente en todos los grupos e edad, pero especialmente horrible entre votantes jรณvenes: solo 21 por ciento de las personas entre 18 y 34 creen que es honesta, comparado con 77 por ciento que creen que no lo es. En contraste, 27 por ciento de esas mismas personas de 18 a 34 que creen que Donald Trump es honesto. (Esto no quiere decir que crean que eso es algo bueno en su caso.) Otra de las preguntas era si Clinton, โbasa sus polรญticas en una serie de valores fundamentalesโ o si โhace lo que es polรญticamente convenienteโ. El 39 por ciento de votantes potenciales mencionaron los โvalores fundamentalesโ, pero solo 25 por ciento de los jรณvenes 18 y 34 lo hicieron. Los nรบmeros de Clinton sugieren que estรก yรฉndole mejor de lo que le permitirรญan las cifras con relaciรณn a su percibida falla de carรกcter entre estos demogrรกficos โen otras palabras, estรก llevรกndose los votos de muchos jรณvenes que creen que es totalmente deshonesta. Es menester, sin embargo, reparar su imagen si quiere llegar mรกs lejos y solo tiene cincuenta dรญas para hacerlo.
A Clinton no le funcionarรญa salir y prometerle a los milenials ser algo que no es. Ella no es una fundamentalista de la transparencia autรฉntica y el buen gobierno que promete limpiar de corrupciรณn a la capital de la naciรณn o transformar al sistema. No estรก vendiendo una revoluciรณn. Lo que ella sรญ es, es una demรณcrata tradicional, una liberal con ciertas acotaciones, y no alberga ninguna ilusiรณn de transformar a Washington. En cambio, lo que su discurso buscaba hacer en sus momentos, digรกmoslo, mรกs autรฉnticos fue intentar convencer a los jรณvenes (y a cualquiera que comparta sus preocupaciones) de su visiรณn: que la polรญtica es una pesadez y siempre serรก, y una que requiere trabajo tanto de los polรญticos de carrera y de personas desde fuera trabajando en conjunto, a lo largo de toda una vida, para lograr cambiar algo.
โHe aprendido que en una democraciaโ, dijo, โsi quieres ayudar a la mayor cantidad de personas, tienes que impulsar las reformas tanto desde el exterior como desde el interior. Necesitamos activistas y promotores, emprendedores e innovadores, maestros y mentores, personas que cambien vidas cada dรญa en un millรณn de maneras distintas y silenciosasโ.
โTambiรฉn necesitamos lรญderes con principios sรณlidosโ, continuรณ, โque puedan ganar votos, redactar leyes, asignar recursos, y realizar el lento y difรญcil asunto de gobernarโ.
Este es el reconocimiento honesto de una persona de cรณmo funciona la polรญtica estadounidense, exceptuando la creaciรณn de una nueva constituciรณn. Los activistas se organizan en coaliciones para impulsar a los polรญticos bien conectados y que se alinean con ellos en general a actuar, y es algo que no sucede de la noche a la maรฑana. Votas por el candidato que mรกs se acerque a tus posturas personales y que tenga la opciรณn de ganar, y mรกs tarde se le presiona para que tome acciรณn. Esa persona hace lo mejor que puede dentro de los limitaciones y las posibilidades que le permite el sistema, y claro, un polรญtico de carrera podrรญa traicionarte si la energรญa o la necesidad polรญtica o la prioridad de emergencia estรก en otro lado.
Es asรญ como Donald Trump, Gary Johnson, Jill Stein o Hillary Clinton operarรกn si รฉl o ella se convierte en ese polรญtico, porque ese es el sino del puesto. De los cuatro, a Clinton se le percibe como la menos autรฉntica entre a los votantes a quienes la autenticidad les parece una caracterรญstica crรญtica, pero ella, por mucho, es la candidata mรกs honesta en cuanto al modo en el que el cambio puede ocurrir. Su discurso del lunes fue un esfuerzo patente por mostrarle a estos votantes indecisos que comparten las mismas posturas polรญticas โy para modificar su concepciรณn de la autenticidad, para que entonces Clinton pueda argumentar que ella es en realidad una de las polรญticas mรกs autรฉnticas que hay.