El lunes 21 de febrero, en el octavo aniversario de la victoria del Euromaidรกn, el presidente ruso Vladimir Putin declarรณ efectivamente la guerra a Ucrania. Para justificar esta imprudencia, pronunciรณ un discurso pseudohistรณrico de una hora de duraciรณn en el que presentรณ a Ucrania como un Estado artificial que debe su existencia a Rusia. Tambiรฉn acusรณ al gobierno ucraniano de llevar a cabo un genocidio de la poblaciรณn de habla rusa, de producir armas nucleares y de patrocinar la actividad extremista en Crimea.
Presentando a Ucrania como una amenaza funesta para el Estado ruso, reconociรณ la independencia de dos territorios ucranianos, las autoproclamadas โrepรบblicas popularesโ de Donetsk y Luhansk, ocupadas de facto por Rusia desde 2014. Lo ocurrido el 22 fue una flagrante violaciรณn de la soberanรญa territorial de Ucrania, de todos los acuerdos internacionales y del derecho internacional.
La posibilidad de un conflicto con Rusia ha sido una realidad cotidiana para la mayorรญa de los ucranianos desde que el levantamiento del Euromaidรกn de 2013-14 logrรณ derrocar al gobierno prorruso de Vรญktor Yanukรณvich.
Desde entonces, Rusia ha invadido y ocupado la regiรณn ucraniana de Donbรกs, en el este, y tambiรฉn se ha anexionado la penรญnsula de Crimea, en el sur. Miles de ucranianos han muerto. Millones de personas han sido reubicadas como โdesplazados internosโ.
Anticipando mรกs problemas, el Ministerio de Cultura y Polรญtica de Informaciรณn de Ucrania publicรณ el aรฑo pasado el folleto En caso de emergencia o guerra, un documento de catorce pรกginas ilustrado y a todo color que actualmente circula entre los residentes del paรญs. El folleto ofrece consejos bรกsicos para la supervivencia: cรณmo protegerse de la desinformaciรณn; dรณnde esconderse en su edificio en caso de un ataque de misiles rusos; y cรณmo hacer un kit de supervivencia. Sobre todo, insta a los ucranianos a mantener la calma y no entrar en pรกnico.
Los ucranianos hemos aprendido que, cuando vives junto a un vecino abusivo y trastornado, la รบnica manera de protegerse es no hacerte ilusiones, ver al matรณn por lo que es, y estar preparado para resistir y luchar. Una encuesta reciente muestra que un tercio de los ucranianos estรก dispuesto a oponer resistencia armada y un 21,7% mรกs estรก dispuesto a resistir por otros medios.
Estos fragmentos de sabidurรญa convencional deberรญan aplicarse no solo a los ucranianos, sino tambiรฉn a nuestros socios occidentales, que actualmente se debaten en la delgada lรญnea que separa el hacer frente a la amenaza de la violencia del desencadenamiento de aรบn mรกs violencia. Tratar con un adversario inestable con un poderoso ejรฉrcito y armas nucleares es extremadamente delicado. Requiere finura diplomรกtica, preparaciรณn militar y cautela.
Percepciones errรณneas de la crisis
Los โrealistasโ, como Stephen Walt, sugieren que si no hubiera sido por el afรกn de Estados Unidos de ampliar sus garantรญas de seguridad a la โesfera de influencia tradicional de Rusiaโ no habrรญa ningรบn conflicto en estos momentos. Compartiendo esa impresiรณn, Thomas Graham y Rajan Menon proponen un compromiso, por el que Occidente y Rusia acordarรญan un periodo de moratoria en la expansiรณn de la OTAN. En otro lugar, Graham propone incluso validar la “dura verdad” de que Crimea es ahora parte de Rusia.
Esto, sin embargo, es una malinterpretaciรณn: la crisis actual no es sobre la OTAN. La crisis actual sucede porque Ucrania se ha convertido en el desafortunado rehรฉn de un autรณcrata paranoico.
Pero la ocupaciรณn de Ucrania no debe verse como un asunto local, ni el paรญs como un sacrificio estratรฉgico para apaciguar los temores de Putin sobre la seguridad nacional rusa. Por el contrario, deberรญa verse como una advertencia de hasta dรณnde puede llegar su poderรญo, si no se le frena adecuadamente.
Despuรฉs de todo, hemos visto a Rusia sembrar el caos y desestabilizar democracias en todo el mundo. Sรณlo el aรฑo pasado, Rusia lanzรณ 23.000 ciberataques contra mรกs de 600 organizaciones, incluidas agencias gubernamentales y grupos de reflexiรณn. Hace cinco aรฑos, Rusia intentรณ influir en el resultado de las elecciones estadounidenses robando y publicando los correos electrรณnicos del Comitรฉ Nacional Demรณcrata.
Desde entonces, Rusia ha desempeรฑado un gran papel en la instigaciรณn de conflictos, la polarizaciรณn de la sociedad estadounidense a travรฉs de sus granjas de trolls y la intromisiรณn en las primarias y las elecciones de 2020. Tambiรฉn en Europa las organizaciones de inteligencia rusas fueron sorprendidas interfiriendo en las elecciones francesas y alemanas de 2017, instigando movimientos separatistas, patrocinando partidos, activistas y medios de comunicaciรณn de extrema derecha. Tambiรฉn se sospecha que Rusia intentรณ influir en el referรฉndum de independencia de Escocia de 2014 y, de forma mรกs notoria, en el referรฉndum sobre el Brexit.
Si esto no es suficiente, pensemos en la la ocupaciรณn rusa de partes de Georgia -Osetia del Sur y Abjasia en 2008- y del territorio moldavo de Transnistria en 1992.
Si Putin no sufre considerablemente las consecuencias de su invasiรณn de Ucrania, no hay nada que le impida invadir los paรญses bรกlticos y librar una guerra cibernรฉtica contra las democracias a las que no puede llegar simplemente por razones geogrรกficas. La aceptaciรณn de la anexiรณn de Crimea por parte de Putin no ha calmado sus ansias de Occidente. Satisfacer sus demandas sobre la OTAN โparece que se ha dado cuenta la administraciรณn Bidenโ lo envalentonarรก, no lo apaciguarรก.
Es hora de que los lรญderes de Estados Unidos y la UE comprendan lo que los ucranianos ya han aprendido dolorosamente: que Putin es un matรณn y debe ser tratado como tal. Los matones responden a la fuerza. Esto significa no creerse su paranoia sobre la OTAN.
Ratificar tal percepciรณn errรณnea de las amenazas reales en esta regiรณn normaliza a Putin como un actor estratรฉgico, un maestro de la realpolitik, un lรญder que simplemente defiende sus intereses nacionales. Desplaza la responsabilidad de Rusia a Occidente y, en el contexto actual, sirve para alimentar las ambiciones imperialistas de Putin.
ยฟCรณmo de real es la amenaza de la OTAN?
Rusia lleva mucho tiempo construyendo el relato de que la OTAN amenaza su seguridad nacional, a pesar de que la OTAN y Rusia disfrutaron en su dรญa de un periodo de cooperaciรณn productiva. En el Memorando de Budapest de 1994 sobre garantรญas de seguridad, Ucrania renunciรณ a su arsenal nuclear a cambio de garantรญas de seguridad por parte de Rusia, Estados Unidos y el Reino Unido. En 1994 Rusia se convirtiรณ en el primer paรญs en incorporarse a la Asociaciรณn para la Paz de la OTAN, cuyos objetivos eran ampliar e intensificar โla cooperaciรณn polรญtica y militar en Europa, aumentando la estabilidad, disminuyendo las amenazas a la paz y construyendo relaciones de seguridad reforzadasโ.
En 1997, el Presidente Boris Yeltsin firmรณ un Acta Fundacional OTAN-Rusia, que establecรญa los objetivos de cooperaciรณn para construir juntos โuna paz duradera e inclusiva en el รกrea euroatlรกntica sobre los principios de la democracia y la seguridad cooperativaโ en รกreas de mantenimiento de la paz, control de armamentos y lucha contra el terrorismo, entre otras. Rusia estableciรณ su misiรณn diplomรกtica ante la OTAN en 1998, y la Alianza abriรณ su Oficina de Informaciรณn en Moscรบ para facilitar la comunicaciรณn. De hecho, a finales de los noventa, dentro del programa de la Asociaciรณn para la Paz, Rusia desplegรณ fuerzas de mantenimiento de la paz en apoyo de las operaciones dirigidas por la OTAN en los Balcanes Occidentales. Mientras Rusia parecรญa estar inmersa en un proceso de democratizaciรณn, en Occidente la veรญan como uno de los garantes de la paz en el continente.
Al principio, las relaciones con Occidente siguieron siendo cordiales bajo el mandato de Putin. En 2002, Rusia firmรณ una declaraciรณn con la OTAN titulada โRelaciones OTAN-Rusia: Una nueva calidadโ, que establecรญa un รณrgano de consenso para cooperar en operaciones como los conflictos en Afganistรกn y el entrenamiento en la lucha antinarcรณticos en Asia Central y Pakistรกn. Ese mismo aรฑo el Consejo Conjunto Permanente OTAN-Rusia โque habรญa sustituido a la Asociaciรณn para la Paz en 1997โ fue sustituido por el Consejo OTAN-Rusia para proporcionar otro espacio de consulta sobre cuestiones de seguridad y cooperaciรณn prรกctica.
Todo empezรณ a cambiar despuรฉs de que Rusia invadiera Georgia en 2008. Sin embargo, ya entonces la OTAN estaba abierta a cooperar con Rusia en las รกreas de operaciones conjuntas contra la piraterรญa y en Afganistรกn. Solo despuรฉs de la invasiรณn rusa de Ucrania y la anexiรณn de Crimea en 2014 la OTAN suspendiรณ toda cooperaciรณn cรญvica y militar con Rusia.
Hasta entonces, la OTAN habรญa seguido un camino similar en sus relaciones tanto con Rusia como con Ucrania. La OTAN invitรณ a Ucrania a unirse al programa de la Asociaciรณn para la Paz en 1994 y estableciรณ la Comisiรณn OTAN-Ucrania en 1997. Aunque la OTAN seรฑalรณ su polรญtica de puertas abiertas a las aspiraciones euroatlรกnticas de Ucrania durante la Cumbre de Bucarest de 2008, todo el mundo tenรญa claro que pasarรญan aรฑos, si no dรฉcadas, antes de que Ucrania estuviera preparada para solicitar su ingreso en la OTAN.
Los propios ucranianos se mostraban profundamente ambivalentes ante la perspectiva de entrar en la OTAN: en 2013, solo el 18% estaba a favor de la adhesiรณn, y el 67% en contra. Solo despuรฉs de que Rusia invadiera Ucrania en 2014, la mayorรญa de la poblaciรณn -el 64%- cambiรณ de opiniรณn.
El hecho de que Putin considere a la OTAN como una “amenaza para la seguridad” de Rusia es propaganda y no una evaluaciรณn realista de la situaciรณn geopolรญtica. Ni la retรณrica ni las acciones de la OTAN han dado a Rusia ninguna razรณn para temer sus posibles excursiones militares. Por el contrario, Rusia ha invadido Ucrania -asรญ como otros paรญses- y es actualmente el รบnico Estado que representa una amenaza importante para los Estados de la UE.
Las sanciones no son suficientes
Las sanciones econรณmicas son necesarias y oportunas, pero solo si las aplican todos los Estados occidentales juntos. La UE estรก planeando sanciones contra los diputados rusos que votaron a favor del reconocimiento de los territorios ocupados. El canciller alemรกn ha anunciado la suspensiรณn del gasoducto Nord Stream 2. El Reino Unido ha declarado sanciones econรณmicas contra cinco grandes bancos rusos y destacados oligarcas. Estados Unidos estรก deliberando sobre la prรณxima serie de sanciones tras adoptar una versiรณn mรกs suave dirigida a las empresas de los territorios ocupados.
Sin embargo, como hemos visto, las sanciones por sรญ solas son insuficientes para disuadir a Putin. Es necesario emprender una importante acciรณn colectiva para frenar los ciberataques y la desinformaciรณn de Rusia. Rusia debe ser expulsada de todas las organizaciones internacionales, que utiliza como plataforma para llevar a cabo su agenda imperialista, como mรญnimo del Consejo de Seguridad de la ONU, donde ocupa una presidencia rotativa.
Mientras tanto, las encuestas que muestran la disposiciรณn de los ucranianos a resistir la invasiรณn desmienten la convicciรณn de Putin de que rusos y ucranianos son el mismo pueblo. Los vรญdeos de ciudadanos ucranianos de a pie con rifles de madera sugieren que el ejรฉrcito ruso se enfrentarรก a una resistencia popular.
Mientras los ucranianos actรบan como escudo contra la agresiรณn rusa, Occidente, por su parte, debe seguir proyectando poderรญo militar, unidad y apoyo. Ya se han dado algunos pasos: Dinamarca ha enviado aviones de combate y una fragata al Mar Bรกltico para ayudar a proteger a Lituania, Espaรฑa ha enviado sus barcos para unirse a las fuerzas navales de la OTAN en el Mar Negro, Francia se ha mostrado dispuesta a enviar soldados a Rumanรญa, los Paรญses Bajos han enviado aviones de combate a Bulgaria y Estados Unidos ya ha enviado 500 toneladas de municiรณn de defensa a Ucrania.
Los ucranianos de a pie que se preparan para el combate saben que Ucrania estรก en el centro de un nuevo conflicto armado. Como les recuerda el folleto del Ministerio de Cultura e Informaciรณn โSi quieres la paz, prepรกrate para la guerraโ.
Publicado el 23 de febrero de 2022
Traducciรณn del inglรฉs de Daniel Gascรณn.
Publicado por primera vez por Public Seminar; Eurozine (versiรณn actualizada).
Mariia Shynkarenko estรก haciendo un doctorado de polรญtica en The New School for Social Research y es profesora visitante en el Centro de estudios europeos, rusos y euroasiรกticos de la Universidad de Toronto y en el Jordan Center for the Advanced Study of Russia de NYU.