Aunque enero es tradicionalmente una época de sequía discográfica, este año han habido más lanzamientos de lo común. Parece predominar un sonido experimental dentro de los géneros del rock y la electrónica, quizás como consecuencia del auge de las disqueras independientes que le han ganado buena parte del mercado a las grandes disqueras trasnacionales. He aquí entonces, mi lista discriminatoria y subjetiva de las veinte rolas más destacadas de enero, disponibles en plataformas gratuitas digitales.
1. “Amsterdam”
Walter Martin (Atenas, Alabama)
El bajista y tecladista de The Walkmen lanza su segundo álbum como solista, en el mantiene la fuerte influencia del folk rock estadounidense y algo de blues. En esta canción parece esconder cierto sarcasmo detrás de una letra y ritmo alegres.
Chet Faker (Melbourne)
Este músico que emergió en 2012 como un fenómeno de redes sociales en Australia, ha afinado para este nuevo trabajo un sonido que él mismo define como resultado del Motown que escuchaba su madre y el techno trance estilo Ibiza que escuchaba su padre. Aquí se unió al DJ electrónico inglés Marcus Marr, quien le da un ambiente más oscuro al estilo de Chet Faker.
3. “One of Us”
Rick Ross (Carol City, Florida)
En un álbum enclavado en el mainstream del hip-hop y pop estadounidense destaca esta pieza por el guiño que hace al estilo neoyorquino del hip-hop, con más elementos de jazz y rock, algo que se enfatiza con la participación del ya consolidado rapero de Brooklyn, Nas.
4. “Mambo en Sax (feat. Dámaso Pérez Prado)”
Los Músicos de José (ciudad de México)
La banda de jazz funk fusión que se formó hace más de una década en el sur de la ciudad de México publicará este año su quinto disco, que será un tributo al pionero del mambo. Este primer sencillo logra una muy buena fusión entre mambo y free jazz.
5. “Psalms”
Adrian Younge (Los Ángeles)
Younge es un productor, multi-instrumentista y profesor de leyes obsesionado con la música de películas italianas, pero inserto en el mundo del hip-hop y la electrónica, lo cual da como resultado esta pieza en la que reúne todo ello.
Tortoise (Chicago)
En medio de la marea de grunge, happy punk y rock alternativo de la década de 1990, Tortoise siempre fue contra la corriente, presentando piezas instrumentales que se nutría de la música minimalista, el ambient inglés, el jazz fusión y el krautrock. A un cuarto de siglo de haberse formado y en su noveno álbum, el grupo mantiene la frescura y calidad de esta fusión.
7. “Playtime”
Pillar Point (Seattle)
Este es el proyecto synth-pop y solista del músico Scott Reitherman; producido por Kevin Barnes, líder de la banda Of Monteral (cuyo trabajo ya ha aparecido en estas listas), el sonido de Pillar Point adquiere mayor cadencia funk y disco.
8. “Filaments”
Shearwater (Austin)
Lo más interesante de esta pieza del noveno álbum de la banda formada hace quince años, es la evolución rítmica de la batería, que va desde un funk hasta el drum and bass, mientras el bajo mantiene una cadencia fija y el sonido del arpa y el piano generan un amasijo armónico muy original.
Baaba Maal (Podor, Senegal)
En el nombre de la canción, el afamado cantante y guitarrista senegalés lo dice todo: una pieza de rock con una base vocal de la música del pueblo nómada fulani. En esta pieza y el disco en general –en contraste con su trabajos anteriores– Maal experimenta más con los ritmos electrónicos.
10. “Roach Eggs”
Saul Williams (Neva York)
Poeta, músico y actor, Saul Williams se caracteriza por realizar piezas de rap y spoken word muy experimentales desde el punto de vista literario y musical. En este caso, la pieza destaca por crear una suerte de ritmo tribal con sonidos electrónicos, aunado a una letra que funge como retrato y sátira de la realidad actual interconectada a través de la red.
11. “Woodland Rock”
Ty Segall (Laguna Beach, California)
Esta pieza es un rock and roll al puro estilo de la década de los cincuenta, pero con una suerte de efectos de baja fidelidad (lo-fi), que son característicos en la música de Segall, quien a sus 28 años es uno de los principales revivalists del sonido de los pioneros del rock.
Daughter (Londres)
Una letra sobre la soledad, y la manera en que una persona se relaciona consigo misma en esos momentos, hace de esta una interesante pieza por parte del trío inglés comandado por la vocalista Elena Tonra. La melodía y el ritmo son suaves, pero adquieren cierta intensidad conforme la letra retrata cómo aumenta el conflicto interno de la cantante.
13. “Lazarus”
David Bowie (Londres)
Un escalofrío recorre la piel al escuchar esta pieza y ver el video, pues resulta una despedida directa por parte del legendario músico británico, quien ya sabía que la muerte lo alcanzaría poco después de publicar su álbum Black Star (2016).
Tom Jones (País de Gales)
El multifacético artista galés se adentra en los terrenos del blues con este disco que, a sus 75 años, es la última parte de una trilogía que trabajó con el productor Ethan Johns, precisamente para explorar el sonido del folk y rock estadounidenses. Es un deleite escuchar a un cantante de su talla reimaginar la música popular.
15. “Right on Time”
Tedeschi Trucks Band (Jacksonville, Florida)
Esta es una de las bandas relativamente nuevas más interesantes dentro del rhythm and blues convencional estadounidense, pero, además de la calidad instrumental de la pieza, destaca que la voz principal la lleva Mike Mattison, quien ha sido halagado por la crítica especializada, y aquí demuestra por qué.
16. “Garden”
Hinds (Madrid)
La novel banda femenil española destaca con esta interesante pieza de indie rock que parece fusionar el sonido de la guitarra folk rock de Angel Olsen con el estilo vocal setentero de Sixto Rodríguez.
Lord RAJA (Nueva York)
En su segundo álbum, el proyecto del músico electrónico Chester Raj Anand mantiene una fusión entre ambient, down tempo y drum and bass, haciendo buen uso del sampleo de ruidos ambientales. Sin ser nada novedoso en su género, resulta una pieza disfrutable.
Mystery Jets (Londres)
Esta interesante propuesta británica abreva de la música de Pink Floyd, principalmente de la época en que el cantante y guitarrista Syd Barret perteneció a dicha banda. Esta pieza también adopta elementos en la voz y en el ritmo del indie pop más reciente, lo que le da la originalidad que la hace destacable.
Chairlift (Boulder, Colordo)
Esta pieza de synth pop destaca por el ritmo electrónico sincopado regido por algunos efectos experimentales electrónicos, junto con una voz que da interesantes saltos melódicos hacia las notas más altas, al tiempo que es ligeramente distorsionada por medios electrónicos.
20. “Born to Boogie”
Hank Williams, Jr. (Shreveport, Luisiana)
En su nuevo disco, el rocanrolero estadounidense regrabó varias piezas clásicas de su repertorio, entre las cuales destaca esta.
Aquí pueden escucharse las 20 canciones en Spotify.
Sociólogo, etnomusicólogo, periodista y DJ.