-Cate Blanchett
Cuando el año pasado, publiqué en este mi Correo Fantasma la siguiente foto de Cate Blanchett bajo el título de “Esbozo de descripción de C. B.”:
uno de los comentaristas de mi blog, digamos un amistoso “desilusionador”, me reprochó mi ignorancia de los trucos glamourizadores acostumbrados por los “diseñadores gráficos” en las fotos ofrecidas por Google. ¡Cate no sería así! ¡Cate habría sido truqueramente embellecida!
Encajé el golpe admitiendo que, ay, acaso Cate, portentosa actriz, no era tan, tan, tan bella como aparecía en ese icono o como se quiera llamarlo (algunos lo acentúan: ícono). Pero, gracias a los dioses del azar, hace unos días encontré en la revista Black & White, dedicada a asuntos de fotografía, la foto que ahora encabeza este texto, en la que Ella está más al natural, menos glamourizada, y sigue siendo bellísima, acaso todavía más bella y más viva y más querible que en el icono (o ícono) impugnado por un sin duda bien intencionado aunque “desilusionador” lector de mi blog.
Y… aquí, una vez más por puro gusto, y ahora más “al natural”, el rostro que prefiero de todos los del cine actual:
Es escritor, cinéfilo y periodista. Fue secretario de redacción de la revista Vuelta.