El empeรฑo de fundar una empresa cultural de Mรฉxico en Espaรฑa tiene, en mi caso, raรญces personales que querrรญa esbozar en este quinto aniversario. Esas raรญces tienen un nombre comรบn: generosidad. En el fondo de mi tiempo familiar, un grupo de empresarios asturianos (Rodrรญguez, Pando, Llaneza) ayudaron al despegue de la pequeรฑa litografรญa que mi padre estableciรณ en su juventud. En el fondo de mi tiempo รญntimo, el poeta Leรณn Felipe bendijo, con su amistad y sus versos, mi noviazgo y matrimonio. En el fondo de mi tiempo acadรฉmico, como estudiante de historia, tuve el honor inmenso de ser el รบltimo y fugaz discรญpulo del maestro Josรฉ Gaos en El Colegio de Mรฉxico. En el fondo de mi tiempo intelectual, leรญ con devociรณn a Ortega y Gasset en la colecciรณn โEl Arqueroโ, los ensayos de Unamuno, la obra poรฉtica y ensayรญstica de Antonio Machado. En el fondo de mi tiempo editorial, escribรญ la biografรญa de Daniel Cosรญo Villegas, a cuya visionaria intuiciรณn como empresario cultural se debe la emigraciรณn de artistas intelectuales y cientรญficos republicanos a Mรฉxico. En el fondo de mi tiempo de formaciรณn histรณrica, mis maestros (Luis Gonzรกlez, Moisรฉs Gonzรกlez Navarro) me introdujeron a la obra de historiadores y sociรณlogos espaรฑoles que me han acompaรฑado toda la vida: Josรฉ Medina Echavarrรญa, Ramรณn Iglesia, Josรฉ Miranda, Josรฉ Marรญa Gallegos Rocafull. En el fondo de mi tiempo literario, la convivencia con Octavio Paz me enseรฑรณ que la revista Vuelta era una rama del tronco antiguo en el cual eran visibles las huellas de revistas espaรฑolas como Revista de Occidente y Cruz y Raya, o revistas de antologรญa que el propio Paz hizo con sus amigos espaรฑoles: Taller, El hijo prรณdigo. Todos los hombres de la cultura en Mรฉxico somos hijos, nietos o bisnietos de la Espaรฑa cultural, la Espaรฑa del 98, la del 27, la Espaรฑa de la guerra y la Espaรฑa peregrina. Yo, para mi inmensa fortuna, no fui la excepciรณn. Y en homenaje a ese pasado, como una mรญnima retribuciรณn, fundamos en Espaรฑa Letras Libres, que ya existรญa en Mรฉxico.
Pero no era sรณlo la gratitud al pasado lo que nos moviรณ. Tambiรฉn la convicciรณn de que, en esta turbulenta y confusa aldea global en la que ahora se vive, quienes hablamos, escribimos, creamos, pensamos y soรฑamos en espaรฑol debemos estar mรกs unidos. Hacia el aรฑo 2000, el panorama parecรญa distinto. Cuando comenzamos a sondear las primeras posibilidades de patrocinio en Espaรฑa, el nuevo siglo presagiaba la realizaciรณn del sueรฑo kantiano de โla paz perpetuaโ. En esos dรญas, que ahora parecen tan extraรฑos como remotos, e ingenuos, nuestro proyecto era mรกs literario que combativo e intelectual. El mundo parecรญa armรณnico y hasta un poco aburrido, quizรก. Pero meses antes de la apariciรณn de nuestra revista (el 1o de octubre de 2001) fraguamos nuestro primer nรบmero con un tema que nos pareciรณ prioritario: โFanatismos de la identidad.โ El 1o de septiembre de aquel aรฑo cerramos la ediciรณn y enviamos el nรบmero a prensa. Diez dรญas mรกs tarde, el ataque a las Torres Gemelas cambiรณ la historia y confirmรณ, desdichadamente, la profecรญa implรญcita en aquella primera portada.
Aquel primer nรบmero sellรณ nuestro destino. Asรญ como Vuelta fue, en lo intelectual, un baluarte de la libertad y la democracia frente a los autoritarismos y totalitarismos de todo signo ideolรณgico, asรญ Letras Libres ha querido ser una voz liberal y democrรกtica en un mundo plagado por fanatismos mucho mรกs insidiosos y letales que los ideolรณgicos, fanatismos de la raza, la religiรณn, la naciรณn, la clase.
Cuando fundamos Letras Libres en Espaรฑa dijimos que en el universo literario no hay linajes ni dinastรญas. Por eso insistimos en que nuestra revista no era la heredera automรกtica de Vuelta, la gran revista de Octavio Paz. Con el paso del tiempo, al cabo de muchos aรฑos, porfiando en ofrecer al pรบblico un contenido mejor nรบmero tras nรบmero, llegarรญamos tal vez a conquistar aquel legado, a sentirnos dignos herederos de esa revista. No lo hemos logrado aรบn, pero querrรญa creer que estamos en el buen camino. Sรณlo el tiempo y el pรบblico emitirรกn alguna vez su veredicto. Entre tanto, seguiremos esforzรกndonos mes con mes en llevar al kiosco y a la pantalla de internet textos plurales, pรกginas claras, palabras que reafirmen la vigencia permanente de la literatura, el pensamiento y la crรญtica en espaรฑol. ~
Historiador, ensayista y editor mexicano, director de Letras Libres y de Editorial Clรญo.
