Estimado señor director:
Para mí funcionaron los cambios, pues nunca llegué a coleccionar Vuelta pero sí Letras Libres.
A propósito del paro en la UNAM, personas tan distintas como Ezra Shabot, Pedro Ferriz de Con y Guillermo Sheridan, por separado y en distintos tonos, han coincidido en eso de que los alumnos y los maestros no son iguales y la universidad no es una democracia.
Discrepo de esa opinión. Pero lo extraordinario es que no sea el único. Hace algún tiempo (20-ii-98), buscando un manual de lexicografía para mi tesis, encontré en la Biblioteca José Revueltas de la Universidad Autónoma de Puebla un libro revelador: Una escuela para la democracia. Para mí fue muy importante leer su proclama: "En esta escuela los alumnos y los maestros tendrán los mismos derechos."
Los paristas no son peores que los antiparistas. Ambos grupos son hijos del monstruoso sistema educativo nacional. Por eso el pleito es tan fuerte: son hermanos. –
