La ciencia ha permitido el aumento espectacular de la esperanza de vida y la mejora de las condiciones vitales de millones de personas en todo el mundo. Pero, en parte porque ha alejado algunos peligros que antes nos rodeaban todo el tiempo, ha producido desconfianza, y vemos una extraña combinación de escepticismo en el método científico y de credulidad hacia terapias fraudulentas.
Pocos ejemplos del éxito de la ciencia han sido más claros que las vacunas. Gracias a ellas, enfermedades que durante mucho tiempo diezmaron a la población han sido controladas o incluso erradicadas. También, en ocasiones, las vacunas han generado dudas. Hablamos con Margarita Del Val, investigadora del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa en Madrid, España.
El ser humano siempre ha seleccionado y domesticado plantas y animales para su supervivencia. Desde el comienzo de la agricultura, hemos buscado maneras más eficientes de cultivar. A finales del siglo XX, con el descubrimiento de de la ingeniería genética y los transgénicos, la ciencia encontró maneras de alterar el ADN de plantas y animales para que sobrevivan a condiciones adversas, sean inmunes a pesticidas o incluso sean más nutritivos o sanos. Sin embargo, algunas organizaciones ecologistas, casi siempre sin evidencia científica, han cuestionado la seguridad de los transgénicos. Sobre esto temas conversamos con José Miguel Mulet, profesor de bioetcnología en la Universidad Politécnica de Valencia y autor de “Transgénicos sin miedo”.