La actriz, directora y activista Leticia Dolera, autora del manual feminista Morder la manzana โuno de los รบltimos grandes รฉxitos de la editorial Planetaโ, ha vuelto a explosionar las redes. Pero esta vez en sentido contrario. Sus defensores โy no pocos detractores que quizรก esperaban un traspiรฉsโ la han criticado por no contratar a la actriz Aina Clotet por estar embarazada poco antes de empezar el rodaje de Dรฉjate llevar, la serie que Dolera prepara para Movistar +.
La chispa ha saltado con el comunicado de Clotet en el que denuncia este hecho despuรฉs de que la directora afirmara que conociรณ el embarazo, pero que el rodaje se prolongaba hasta finales de noviembre y eso โimposibilitaba que una actriz embarazada de cinco o seis meses interpretara a este personaje en concreto, uno que redescubre su sexualidad y tiene muchas secuencias de sexo”. Dolera tambiรฉn se escudรณ en el alto coste de la pรณliza de seguro y en lo complicado de cambiar el plan de rodaje.
El problema รฉtico que se plantea es que la directora ha sido en los รบltimos aรฑos una de las grandes defensoras de los derechos de las mujeres. Como, por ejemplo, que una actriz no pierda su trabajo por estar embarazada. Son conocidas sus crรญticas a la menor presencia de la mujer en la industria del cine que la del hombre. Aรบn se recuerda su famoso โcampo de nabosโ que esgrimiรณ โde forma pactadaโ en la pasada gala de los Goya, expresiรณn de la que despuรฉs se retractรณ tras las crรญticas de las personas transgรฉnero.
El comunicado de Clotet y sus consecuencias en la red vuelven a demostrar esa esquizofrenia de utilizar argumentos que van a favor de la corriente pero sin pararse a pensar siquiera en lo que una estรก diciendo. Porque, por su รบltima trayectoria como feminista, la Dolera que no fuera directora de Dรฉjate llevar tenรญa todas las papeletas para salir en defensa de Clotet, pero hete ahรญ que se topรณ con una realidad, pese a que esta merezca ser revisable, ya que un embarazo no merece rescindir un contrato que ya estaba pactado.
A la directora le ha estallado Twitter, esa herramienta tan esponjosa para la demagogia, el mensaje chillรณn y el escupitajo rรกpido. Y le ha explosionado por echar mano de la lรณgica empresarial que tenรญa entre manos: no poder cambiar un rodaje, no poder pagar una pรณliza de seguros. Es decir, por tener razรณn esta vez.
Sin embargo, la red social no tiene amigos y te puede devolver tus comentarios como un bรบmeran. Es el gran problema de querer agradar continuamente, como bien dice Arcadi Espada. Los miles de retuits que Dolera alcanzรณ en la red, que la posicionรณ en esta nueva ola feminista, que la llevรณ a escribir un libro โy venderlo casi por los mismos miles que sus RTโ son ahora la cรกrcel de sus palabras.
Hay quien comenta que la directora podrรญa haber luchado contra la tiranรญa de que una embarazada no pueda actuar en una serie que exige desnudos โy cuyo personaje por otra parte toma la pรญldora para no quedarse embarazada, lo cual no es un detalle menorโ, pero quizรก nos encontramos, una vez mรกs, ante el deseo de agradar, y quizรก, no poder hacer otra cosa. Exigencias del guion.
es periodista freelance en El Paรญs, El Confidencial y Jotdown.
