Quizรกs una de las facetas menos atendidas de la obra de Franz Kafka es su labor como autor de aforismos: tras su muerte, se encontraron entre sus cuadernos una serie numerosa de ellos, que ha sido agrupada bajo el tรญtulo de Consideraciones acerca del pecado, el dolor, la esperanza y el camino verdadero. Estos fragmentos dan cabida tanto a disquisiciones de tono existencial como a enigmรกticas reflexiones sobre la situaciรณn del ser humano en el universo. Leyรฉndolos, uno recuerda el planteamiento de Maurice Blanchot sobre el carรกcter de la escritura de Nietzsche: โComo si el modo de pensar y de escribir de Nietzsche no hubiese sido, desde un principio, fragmentario […] La unidad muy suelta de todos estos pensamientos [a manera de pequeรฑos organismos] era la secreta intenciรณn de conjunto que quedaba siempre presente, con una presencia oculta y amenazadora.โ Esa misma unidad de lo mรบltiple puede asociarse con los aforismos de Kafka.
Pienso lo anterior a propรณsito deย El zigzag de la gacela, el libro mรกs reciente de Carmen Leรฑero (Ciudad de Mรฉxico, 1959). La obra nos presenta un conjunto de versos pareados que corresponden a โuna antigua forma poรฉtica conocida como gacela, gazal oย ghazal, de origen persa (s.ย VII)โ, tal como lo seรฑala la propia autora en su nota final. Estos dรญsticos se reรบnen en composiciones donde el principio de laย unidad de lo mรบltiple, con que Blanchot caracteriza la escritura de Nietzsche, encuentra un espacio de aplicaciรณn, por cuanto cada poema no apunta hacia un sentido รบnico, sino que integra en su desarrollo una variedad de significados e intuiciones muy diversas, que van surgiendo a la interpretaciรณn en la medida que seguimos la lectura de los versos. Se podrรญa decir, utilizando una metรกfora nรกutica, que estas composiciones no tienen un destino definido, sino que son un trรกnsito, una navegaciรณn que tiene por objeto el placer de sondear las aguas de la lengua mรกs que el de arribar a cualquier puerto.
Ejemplo de esto es โGacelaโ, un texto muy bello de la primera parte del libro, que ilustra bien de quรฉ manera funciona el concepto de la unidad de lo mรบltiple: โEl cuello de la gacela / se yergue como un acento. / Lamiendo la cal del templo / dormitan viejos poemas. / La lanza que la persigue / silba tambiรฉn su huida. / Los tenues pasos de un verso / bastaron para alertarla. / Abreva en su blando exilio / un mundo bajo el estanque. / A medio salto se esfumรณ, / y le dieron un nombre alado. / Bebiendo entre los papiros / ยกcรณmo hace cantar al agua! / Incluso antes de nacer / el alma se nos escapa. / Lirios y lotos danzan / con su perfume en concierto.โ
A este respecto, creo que la deriva que se exhibe en composiciones como esta y otras de El zigzag de la gacela obedece tanto al gรฉnero al que pertenecen los textos (el gazal ya nombrado, que se singulariza por โsu esencial desapego al transcurrir lรณgico, consecutivo e incluso sutilmente narrativo de cualquier otra forma poรฉticaโ, en palabras de Leรฑero) como a una voluntad de la autora de entregarse a la imaginaciรณn y dejarse llevar por el ritmo y la sonoridad; tal como nos lo dice en โLetra o ramaโ: โpor las ramas deambula, / como ensayo de Montaigne. Cada libro, su estrategia / de luchar por ser criaturaโ. Es decir, existe una decisiรณn consciente, a mi modo de ver, de liberar las facultades poรฉticas y permitirse la exploraciรณn en los dรญsticos, exploraciรณn que, de alguna forma, extiende su arco entre la muerte y la maravilla; incluso en un texto como โPandemiaโ, cuya referencia obvia harรญa pensar en una temรกtica de planteamiento muy claro respecto a la situaciรณn vivida hace unos aรฑos โcon una exposiciรณn lineal de los acontecimientosโ, nos encontramos mรกs bien con una diversidad de escenas que saltan de una imagen a otra y donde hallamos versos del tipo: โHay quien emigra hacia la luz / en una balsa desairada.โ o โTengo un alma enfurecida / que a menudo no lo sabeโ, cuyo lenguaje se acerca a un tono oracular, sibilino, que es otro de los elementos distintivos del libro.
Este recurso, que sobresale en la obra (y tambiรฉn, por supuesto, en los aforismos de Kafka), atraviesa El zigzag de la gacela de parte a parte: muchos de los versos pareados que lo integran responden a una suerte de arte adivinatoria en que la poeta, situada en los mรกrgenes de un mundo cambiante y pleno de incertidumbre, el de la modernidad lรญquida segรบn ha dicho Zygmunt Bauman, se convierte en una intรฉrprete de sucesos imprecisos, de los que nos habla en el idioma crรญptico de lo profรฉtico, como se si tratara de alguna de las respuestas a los hexagramas del I Ching; asรญ en โRรบbricaโ donde se indica: โAgua y fuego, para amarse / se traicionan a sรญ mismosโ, hermosa imagen en que parece reverberar el concepto nรกhuatl del atl-tlachinolli, โagua que se quemaโ, โagua preciosaโ; o en โDiosโ, donde se nos expresa: โLa piel oscura de las cosas / sostiene Su luz oblicuaโ; o en un texto como โGรฉneros moribundosโ โcuyas ideas recuerdan al Walter Benjamin de Calle de direcciรณn รบnicaโ en que se afirma: โCaligrafรญa y tesitura / han perdido su vigencia.โ Las muestras, en ese sentido, son mรบltiples.
El marcado tono oracular del texto harรญa pensar que El zigzag de la gacela es un libro oscuro, pero eso es un error; la habilidad de Leรฑero para mezclar la ligereza, la โtravesuraโ como se indica en la contraportada, con la reflexiรณn logra que la lectura se vuelva placentera, en tanto hacemos un recorrido pasmoso por las realidades del mundo, que se manifiestan como una piedra tornasol ante nuestros sentidos. Para iluminar este punto, valga la cita de algunos versos de โAdivinanzaโ, donde, a travรฉs de aliteraciones y juegos de palabras, queda expuesto el sentido del humor de la autora: โHipo de Edipo / este pie roto. / Sal de tu pasmo, / hija de Lot. Sal de la duda, / muรฉrete un tanto. / Sal de la vida: retrospectiva.โ O la fineza con que pone en cuestiรณn el tema de la identidad en โPreparativosโ que comienza con este dรญstico juguetรณn: โVivo olvidando el nombre / que pondrรกn en mi epitafio.โ Esta levedad presente en El zigzag de la gacela otorga al libro esa cualidad heterogรฉnea, proteica, a la que Carmen Leรฑero alude en su nota final: โMultifacรฉtico por excelencia, un ghazal puede conjugar de manera espontรกnea y libre la imagen poรฉtica, el aforismo, el refrรกn popular, la โfrase hechaโ o el proverbio, el estribillo de una canciรณn, la sentencia, la mรกxima, la plegaria, y suele concertar diferentes tonos.โ ~
(Santiago de Chile, 1979)
es poeta y editor. Su libro mรกs reciente es
Cascajo (Bonilla Artigas, 2023