El mundo siempre ha tenido un gran elenco de gente que se sienta y siente tan a gusto en una silla grande, que luego no quiere bajarse. Bien lo sabรญa Cervantes; por eso cuando a Sancho se le nombra gobernador de la รญnsula Barataria, don Quijote le advierte: โHas de poner los ojos en quien eres, procurando conocerte a ti mismo, que es el mรกs difรญcil conocimiento que puede imaginarse. Del conocerte saldrรก el no hincharte como la rana que quiso igualarse al bueyโ.
Sancho tenรญa cierto conocimiento de sรญ mismo, pero se trata precisamente del conocimiento que justifica el defecto: โYo soy del linaje de los Panzas, que todos son testarudos, y si una vez dicen nones, nones han de ser, aunque sean pares, a pesar de todo el mundoโ. Expresa sus ganas de gobernar: โYo imagino que es bueno mandar, aunque sea a un hato de ganadoโ. Donde tal hato de ganado sirve de metรกfora para pueblo, plebe o populacho. Y se cree que gobernar es cosa de la buena voluntad. โLetras pocas tengo, porque aรบn no sรฉ el abecรฉ, pero bรกstame tener el Christus en la memoria para ser buen gobernadorโ.
En cambio, mal se conoce a sรญ mismo cuando dice โal buen callar llaman Sanchoโ. Mejor lo conoce don Quijote, que le responde: โNo solo no eres buen callar, sino mal hablar y mal porfiarโ. Y asรญ comienza el escudero su gobierno imaginario.
Calderรณn de la Barca pone la fantasรญa de gobernar en los famosos versos de Segismundo:
Sueรฑa el rey que es rey, y vive
con este engaรฑo mandando,
disponiendo y gobernando,
y este aplauso, que recibe
prestado, en el viento escribe,
y en cenizas le convierte
la muerte (ยกdesdicha fuerte!):
ยกque hay quien intente reinar,
viendo que ha de despertar
en el sueรฑo de la muerte!
La historia de La vida es sueรฑo ocurre en Polonia, pues los dramaturgos debรญan buscarse escenarios lejos de casa para que ni por asomo se pensara que el rey de la comedia fuese el Rey. A pesar de eso, tanto Cervantes como Calderรณn escribieron con mayor libertad de la que tendrรญan los espaรฑoles doscientos aรฑos despuรฉs, ya que las libertades van y vienen segรบn van y vienen las ideas, las agallas y la voz.
Quizรก por eso, en una ediciรณn de las obras de Calderรณn, publicadas en รฉpoca del absolutista y represivo Fernando VII, el editor se vio impelido a agregar ciertas notas. En Gustos y disgustos no son mรกs que imaginaciรณn, uno de los personajes es Don Pedro, rey de Aragรณn. El tal rey no siempre actรบa con acierto y llega a aceptar sus errores. โYo lo errรฉโ, dice en uno de sus parlamentos. El editor anota: โEl confesar su propio error, lejos de degradar la majestad de un prรญncipe, realza mรกs y mรกs su dignidad, pues prueba que para รฉl la moral y la justicia no son palabras vanas. La obstinaciรณn en persistir en sus errores y caprichos, conociรฉndolos, denota la perversidad del corazรณn: y no puede nunca servir de excusa el dicho de Medea: Video meliora, proboque, deteriora sequor.โ
Las palabras de Medea vienen de las Metamorfosis, de Ovidio. โDistingo lo mejor y lo apruebo, pero practico lo peorโ o โNoto el mejor camino y lo apruebo, pero sigo el peorโ.
Sancho se acepta como testarudo, y esto es muy raro, pues la testarudez es algo que sobre uno aprecian los demรกs. El antiguo diccionario de la RAE define testarudo como: โPorfiado, terco y tenaz, que con empeรฑo disputa las cosas, manteniรฉndose en una aprehensiรณn, inflexible a la razรณnโ.
Mas al final, Sancho no lo fue tanto y reconoce su flaqueza. โYo no nacรญ para ser gobernadorโฆ Mejor se me entiende a mรญ de arar y cavar, podar y ensarmentar las viรฑas, que de dar leyes ni de defender provincias y reinosโฆ Mejor me estรก a mรญ una hoz en la mano que un cetro de gobernadorโ.
Entonces deja el gobierno, pero el sabio Cervantes nos dice: โSancho, aunque aborrecรญa el ser gobernador, como queda dicho, todavรญa deseaba volver a mandar y a ser obedecido; que esta mala ventura trae consigo el mandoโ.
โQuien lo probรณ, lo sabeโ, dirรญa Lope de Vega. โQuien lo sufriรณ, lo sabeโ, podrรญa decir mรกs de una patria, sรฌ bella e perduta.
(Monterrey, 1961) es escritor. Fue ganador del Premio Xavier Villaurrutia de Escritores para Escritores 2017 por su novela Olegaroy.