Saludos desde Kiev. He pasado los รบltimos dรญas en Ucrania, en la capital y en las regiones meridionales de Odesa, Mykolaรฏv y Kherson, intentando hacerme una idea del estado de la guerra. Escribirรฉ mรกs sobre esa experiencia, pero pensรฉ que serรญa un buen momento para compartir mi sensaciรณn mรกs general.ย
Es un momento crucial, en parte por lo que estรก ocurriendo, y en parte por nuestro propio sentido del tiempo. Un aรฑo y medio es un periodo incรณmodo para nosotros. Nos gustarรญa pensar que puede concluir rรกpidamente, con esta o aquella ofensiva o arma. Cuando la guerra no termina rรกpidamente, saltamos a la idea de que se trata de un โpunto muertoโ, que es una situaciรณn que dura para siempre. Eso es falso, y sirve como una especie de excusa para no averiguar quรฉ estรก pasando. Esta es una guerra que se puede ganar, pero solo si tenemos la paciencia suficiente para ver sus contornos y oportunidades.
Los avances de Rusia en esta invasiรณn se produjeron casi en su totalidad durante sus primeras semanas, en febrero y marzo de 2022. Esos avances fueron posibles en gran medida gracias a que Rusia se habรญa apoderado de la penรญnsula de Crimea en su anterior invasiรณn de Ucrania en 2014. A lo largo de 2022, Ucrania ganรณ las batallas de Kiev, Jarkiv y Jersรณn, y recuperรณ aproximadamente la mitad del territorio ganado por Rusia.
En la primera mitad de 2023, Rusia emprendiรณ una ofensiva en la que no ganรณ casi nada, salvo la ciudad de Bajmut. En la segunda mitad de este aรฑo, Ucrania ha emprendido una contraofensiva que ha tomado mucho mรกs territorio que la ofensiva rusa, pero que (todavรญa) no ha cambiado la posiciรณn estratรฉgica general (aunque podrรญa hacerlo). En Rusia, Yevgeny Prigozhin, el lรญder del grupo mercenario que tomรณ Bajmut, intentรณ dar un golpe militar. รl y Putin llegaron a un acuerdo, y despuรฉs Putin lo matรณ. En un acontecimiento relacionado, Sergei Surovikin, probablemente el general ruso mรกs capaz, ha sido relevado de su mando. Rusia no tiene ahora ningรบn potencial ofensivo importante. Su estrategia consiste en seguir sembrando el terror entre la poblaciรณn civil hasta que los ucranianos no puedan aguantar mรกs. Eso, al menos a juzgar por mi experiencia, no es un enfoque sostenible. Por otro lado, Rusia ha tenido tiempo de fortificar ampliamente una larga defensa en el este y el sur, y de prepararse para las ofensivas ucranianas. Eso dificulta mucho las ofensivas ucranianas.
Ucrania quiso avanzar el aรฑo pasado, antes de que se construyeran las fortificaciones. Carecรญa de las armas necesarias, y Elon Musk optรณ por cortar las comunicaciones con Ucrania. Esa medida probablemente prolongรณ la guerra. Como la decisiรณn de Musk se basรณ en la interiorizaciรณn de la propaganda rusa sobre la guerra nuclear, y acompaรฑada de la repeticiรณn de dicha propaganda, hizo mรกs probable una guerra nuclear. Si hombres poderosos transmiten el mensaje de que basta con hablar de guerra nuclear para ganar guerras convencionales, entonces tendremos mรกs paรญses con armas nucleares y mรกs guerras convencionales que pueden escalar hasta convertirse en nucleares. Ucrania se ha resistido a esta lรญnea de alarmismo ruso, afortunadamente para todos nosotros.
Ucrania no tuvo las armas que necesitaba el aรฑo pasado en parte por la misma razรณn: los estadounidenses permitieron que la propaganda rusa desplazara al cรกlculo estratรฉgico. Sin embargo, a estas alturas, la parte norteamericana ha comprendido en general que la amenaza nuclear rusa era una operaciรณn psicolรณgica destinada a ralentizar la entrega de armas. Estados Unidos y sus socios europeos han dado armas a Ucrania, lo que ha sido absolutamente indispensable. Sin embargo, el ritmo es lento. Los aviones de combate estรกn llegando, pero con un aรฑo de retraso para la ofensiva actual. Asรญ que los ucranianos intentan ahora una ofensiva en condiciones que los oficiales de Estado Mayor estadounidenses encontrarรญan desafiantes. Los estadounidenses dan por sentada la superioridad econรณmica, la destrucciรณn previa de la logรญstica y la supremacรญa aรฉrea, pero nada de eso describe la posiciรณn ucraniana. Los ucranianos ni siquiera tienen superioridad numรฉrica, y mucho menos del tipo 3-1 o 5-1 que serรญa la recomendaciรณn estรกndar para una ofensiva.
Los combates de este verano han sido muy duros y muy costosos para Ucrania, mรกs duros y costosos, creo, de lo que tenรญan que ser. Hoy mismo he visitado a soldados heridos en un centro de rehabilitaciรณn; entre los muchos sentimientos que esto me ha despertado habรญa algo de culpa por el hecho de que mi pueblo podrรญa haber hecho mรกs para proteger a estas personas. (Si quieres protegerlos, considera hacer un donativo a Come Back Alive, United24 o United with Ukraine).
Dicho esto, los avances territoriales ucranianos de este verano han bastado para desencadenar un aluviรณn de llamamientos al alto el fuego por parte de voces afines al Kremlin. Si tenemos en cuenta la forma en que parecen funcionar los medios de comunicaciรณn, estos llamamientos (en lugar de los acontecimientos sobre el terreno) a veces parecen ser la noticia. Los artรญculos de opiniรณn favorables al Kremlin dan por sentado que Ucrania no avanza, cuando en realidad sรญ lo hace. Los aliados del Kremlin exponen sus argumentos apelando al sufrimiento ucraniano, pero nunca citan a los ucranianos, ni los datos de las encuestas que muestran un apoyo abrumador a la guerra.
No hay ninguna razรณn para creer que el Kremlin se sentirรญa limitado por un acuerdo de este tipo en ningรบn lugar; ni siquiera empezรณ a atenerse a los tรฉrminos del acuerdo tras su รบltima invasiรณn, y al invadir de nuevo Moscรบ ha violado todos sus acuerdos con Ucrania (al tiempo que ha dejado claro que no considera que Ucrania sea un Estado). Los propagandistas rusos que se dirigen al pรบblico ruso no ocultan que el objetivo es la destrucciรณn de la naciรณn ucraniana, y que un alto el fuego solo servirรญa para ganar tiempo. Ahora que el farol nuclear se ha agotado en gran medida, Moscรบ ha cambiado su enfoque, y trata de hacer creer a la gente que no estรก pasando nada en el campo de batalla. La esperanza de Moscรบ es motivar a los aliados de Ucrania para que la contengan el tiempo suficiente a fin de que Rusia cambie el equilibrio de fuerzas a su favor.
Ucrania estรก desplegando su capacidad de ataque de largo alcance para destruir aviones y logรญstica en territorio ruso, condiciรณn necesaria para ganar la guerra. Se trata de un fenรณmeno incรณmodo, ya que los socios occidentales no siempre piensan concienzudamente en cรณmo se puede poner fin a una guerra como esta. Termina cuando una de las partes gana. La cuestiรณn es quiรฉn gana y en quรฉ condiciones.
Los aliados estadounidenses opinan, con razรณn, que, para ganar, Ucrania debe romper las lรญneas rusas. Pero no hay tantas tropas que enviar al frente en oleadas, y desde una perspectiva ucraniana esas vidas deberรญan ponerse en riesgo cuando el campo de batalla se haya conformado. La nociรณn de avance es tambiรฉn demasiado limitada. Incluso dejando a un lado el valor de la vida, que es de lo que trata esta guerra, la historia militar demuestra que las victorias en el campo de batalla son la etapa final de un proceso mรกs amplio que comienza con la logรญstica.
Esta guerra ha aportado una teorรญa totalmente nueva de lo que significa una guerra defensiva: luchar solo en el propio territorio. Eso no se corresponde con el derecho internacional y nunca ha tenido ningรบn sentido. Es un poco como animar a un equipo de baloncesto pero creer que debe jugar sin pasar nunca del medio campo, o animar a un boxeador pero afirmar que no puede dar un puรฑetazo despuรฉs de que lo dรฉ su oponente. Si en guerras pasadas se hubiera tenido esa idea, ninguno de los socios de Ucrania habrรญa ganado ninguna de las guerras que se enorgullecen de haber ganado.
La preocupaciรณn explรญcita es que Rusia podrรญa โescalarโ. Este argumento es un triunfo de la propaganda rusa. Ninguno de los ataques transfronterizos de Ucrania ha hecho otra cosa que reducir la capacidad rusa. Ninguno ha llevado a Rusia a hacer cosas que no estuviera haciendo ya. La nociรณn de โescaladaโ en este contexto es un malentendido. Al tratar de destruir la logรญstica rusa, Ucrania trata de poner fin a la guerra. Ucrania no harรก en Rusia la mayorรญa de las cosas que Rusia ha hecho en Ucrania. No ocuparรก ni se apoderarรก de territorio, no ejecutarรก a civiles, no construirรก campos de concentraciรณn ni cรกmaras de tortura. Lo que se le debe permitir, para tener alguna posibilidad de detener esas prรกcticas rusas en Ucrania, es que tenga la capacidad de ganar la guerra. Con cada pueblo que Ucrania recupera, vemos la desescalada mรกs importante: lejos de los crรญmenes de guerra y el genocidio, hacia algo mรกs parecido a una vida normal.
La victoria serรก difรญcil, pero es el concepto relevante. En este momento no conozco a ningรบn ucraniano que no haya perdido a un amigo o a un familiar en esta guerra. Mis amigos de ahora suelen tener un cierto cรญrculo oscuro alrededor de los ojos y una tendencia a mirar a media distancia. Y, sin embargo, el nivel de determinaciรณn es muy alto. En los pocos dรญas que llevo aquรญ ha habido ataques con misiles en las dos ciudades en las que he pasado la noche o cerca de ellas, un ataque asesino ruso contra un mercado y un intento ruso de cortar las exportaciones ucranianas de grano con misiles y aviones no tripulados. Es la vida cotidiana, pero es la vida cotidiana ucraniana, no la nuestra. Los ucranianos luchan; nosotros financiamos una parte. Sin embargo, lo que la resistencia ucraniana protege va mucho mรกs allรก de Ucrania.
Los ucranianos defienden el orden jurรญdico establecido tras la Segunda Guerra Mundial. Han llevado a cabo toda la misiรณn de la OTAN de absorber y revertir un ataque de Rusia con un porcentaje รญnfimo de los presupuestos militares de la OTAN y cero pรฉrdidas de los miembros de la OTAN. Han hecho mucho menos probable una guerra en el Pacรญfico demostrando a China que las operaciones ofensivas son mรกs difรญciles de lo que parecen. Han hecho que la guerra nuclear sea menos probable al demostrar que el chantaje nuclear no tiene por quรฉ funcionar. Ucrania tambiรฉn lucha por restablecer sus exportaciones de grano a รfrica y Asia, donde millones de personas se han visto amenazadas por el ataque de Rusia a la economรญa ucraniana. Por รบltimo, pero no por ello menos importante, los ucranianos estรกn demostrando que una democracia puede defenderse.
Los ucranianos nos estรกn proporcionando un tipo de seguridad que no podrรญamos alcanzar por nosotros mismos. Me temo que estamos dando por sentados estos logros en materia de seguridad. (En mis momentos mรกs cรญnicos, temo que algunos de nosotros, quizรก incluso algunos candidatos presidenciales, estemos molestos con los ucranianos precisamente por lo mucho que nos han ayudado).
Esta guerra no terminarรก por un acontecimiento repentino, pero tampoco se prolongarรก indefinidamente. Cuรกndo y cรณmo termine depende en gran medida de nosotros, de lo que hagamos, de cuรกnto ayudemos. Aunque no nos importaran en absoluto los ucranianos (y deberรญan importarnos), conseguir que esta guerra termine con una victoria ucraniana serรญa, con diferencia, lo mejor que los estadounidenses podrรญan hacer por sรญ mismos. De hecho, no creo que, en la historia de las relaciones exteriores de Estados Unidos, haya habido nunca una oportunidad de lograr tanto para los estadounidenses con tan poco esfuerzo por su parte. Espero que aprovechemos esa oportunidad.
TS Kiev 7 de septiembre
Publicado originalmente en el Substack del autor.
Traducciรณn del inglรฉs de Daniel Gascรณn.
Timothy Snyder (1969) es un historiador estadounidense, profesor en la Universidad de Yale, especializado en la historia de Europa Central y del Este y en el Holocausto. Su libro mรกs reciente en espaรฑol es 'Nuestra enfermedad. Lecciones de libertad en un diario de hospital' (Galaxia Gutenberg, 2020).