âNunca en la historia de MĂ©xico la adopciĂłn ha estado prohibida por razones de orientaciĂłn sexualâ
David RazĂș Aznar (Ciudad del Carmen, Campeche, 1974) maneja a la perfecciĂłn las maneras polĂticas âaliteraciones pertinentes, Ă©nfasis en las ideas, uso del vocativo con el interlocutorâ y fomenta el uso de las plataformas sociales en internet (pueden seguirlo en Twitter en @drazua) para comunicarse con el ciudadano. Su partido, el SocialdemĂłcrata, perdiĂł el registro nacional por insuficiencia de votos en las Ășltimas elecciones, pero sĂ logrĂł colarse en el congreso del DF. Como presidente de la ComisiĂłn de Derechos Humanos de la Asamblea Legislativa capitalina y asociĂĄndose al PRD, RazĂș ha conseguido que el pleno aprobara la ley sobre el matrimonio homosexual, que junto a la aprobaciĂłn del aborto libre durante las doce primeras semanas de embarazo hace del Distrito Federal un modelo en el mundo en materia de derechos sociales.
ÂżCĂłmo fue el camino de la propuesta de ley del matrimonio homosexual hasta que se convirtiĂł en ley?
La iniciativa era parte fundamental de mi propuesta de campaña para el Partido SocialdemĂłcrata y fue impulsada por una creciente red de organizaciones sociales que comenzaron a ejercer cada vez mayor presiĂłn. (Es importante decir que la pĂ©rdida del registro del partido vino de la votaciĂłn nacional, no de la local: en la local sĂ obtuvimos los votos necesarios.) Lo que hice fue acercarme a aquel grupo parlamentario que tuviera la igualdad como bandera y como motor fundamental, y eso es desde luego el PRD. La ruta lĂłgica era hacer un acuerdo con ellos. Desde antes de que comenzara la legislatura, hicimos pĂșblico un acuerdo que se llamĂł âAlianza de Izquierdasâ, por medio del cual me adherĂa al grupo parlamentario âno al partidoâ, y el PRD se comprometĂa a impulsar la agenda socialdemĂłcrata, en particular este tema de los matrimonios entre personas del mismo sexo. Ya entrada la legislatura hubo mucho diĂĄlogo con los otros grupos parlamentarios, y muy buena respuesta del PT, de Nueva Alianza⊠En fin, fue posible irla avanzando. TambiĂ©n tenĂamos un creciente apoyo social. Se fundĂł alrededor de estas reformas la red social Sociedad Unida por Nuestros Derechos, que cuando subimos la iniciativa al pleno, el 24 de noviembre de 2009, tenĂa mĂĄs de doscientas organizaciones. Para cuando se aprobĂł la iniciativa, eran casi seiscientas organizaciones en la red.
Hay dos MĂ©xicos muy distintos: estĂĄ el DF y luego el resto de la RepĂșblica, algunos de cuyos estados presentaron impugnaciones a esta ley. ÂżDe veras crees que hay apoyo social mayoritario en MĂ©xico, o que es mĂĄs bien la capital contra una provincia todavĂa conservadora?
El otro dĂa leĂa en Twitter que lo increĂble no era que hubiera matrimonio entre personas del mismo sexo y despenalizaciĂłn del aborto en MĂ©xico: que lo increĂble era que en MĂ©xico existiera el DF. A mĂ me parece que lo que estĂĄ pasando es un reflejo de la sociedad capitalina, y no lo veĂas antes de la democracia porque estĂĄbamos limitados; nada mĂĄs hacĂa falta abrirle la puerta a la sociedad, una sociedad avanzada, una sociedad cosmopolita y que cree mĂĄs en los derechos humanos. Eso por lo que corresponde al DF. En cuanto a los estados que presentaron las controversias, ya viste que las seis fueron desechadas por la Suprema Corte de Justicia. Ahora, si hay o no un apoyo mayoritario es algo que en el debate de los derechos humanos no debe ser el centro de la atenciĂłn. De hecho, histĂłricamente, la lucha por los derechos humanos se da en un ĂĄmbito y en un ambiente contramayoritario. Lo mismo ocurriĂł en su momento cuando se dio la existencia del matrimonio civil, que fue un escĂĄndalo. Nadie se querĂa casar. Y despuĂ©s, cuando se le dio el voto a la mujer. Son hitos en el avance social que no deben valorarse con respecto a la posiciĂłn que las mayorĂas tengan. Si vivimos en democracia es precisamente para garantizar que no sean pisoteados los derechos de las minorĂas. Por eso, todos esos planteamientos de llevar esta reforma a referĂ©ndum y cosas por el estilo son absurdos. Desde luego, estoy convencido de que las reformas van a permanecer, y que la Suprema Corte de Justicia va a fallar en contra de la inconstitucionalidad ominosa promovida por el Gobierno Federal. Creo que el Gobierno Federal con esa acciĂłn no discrimina exclusivamente a las parejas del mismo sexo, discrimina a todo el mundo: todos aquellos que no vivan en una familia biparental heterosexual, segĂșn el procurador y el presidente de la RepĂșblica, no son sujetos de la protecciĂłn de la ley.
EstĂĄs familiarizado con los casos de España o Gran Bretaña. ÂżCuĂĄl serĂa tu modelo de sociedad ideal, que exista ya?
Esa es una pregunta difĂcil de contestar, porque no puedes hacer una extrapolaciĂłn de ninguna legislaciĂłn de otro paĂs. La diversidad y la historia mexicanas son tan particulares⊠SĂ me imagino un modelo de ciudad, un modelo de sociedad y un modelo de paĂs, pero no lo podrĂa vincular con alguno que ya conozca, independientemente de que haya muchas sociedades que yo admire, que me parezcan proclives al desarrollo y a la felicidad de su poblaciĂłn. Ahora, si bien es cierto que en España la aceptaciĂłn era mayor âque no mucho mayor en tĂ©rminos estadĂsticos, comparando 2005 de España con 2009 de MĂ©xicoâ, tambiĂ©n la resistencia fue brutal. Yo me acuerdo de una marcha con obispos al frente con quinientas mil personas en la calle, en contra de las reformas. Avanzar en las libertades siempre tiene enemigos irreductibles.
Algo revolucionario en esta ley es que las parejas pueden adoptar niños. Es el punto donde los crĂticos a la ley son mĂĄs duros. ÂżCĂłmo lo defiendes?
Primero, yo no lo tengo que defender. MĂĄs bien tendrĂan que defender su posiciĂłn los que se oponen, que no han sido capaces de producir un solo argumento vĂĄlido, solamente descalificaciones y opiniones. Segundo, la estrategia que ha tomado la derecha con respecto al tema del matrimonio entre personas del mismo sexo ha sido la de la desinformaciĂłn permanente y la mentira. Nunca en la historia de MĂ©xico la adopciĂłn ha estado prohibida por razones de orientaciĂłn sexual. Nunca. En esta reforma no tocamos un solo artĂculo referente a la adopciĂłn. Ni uno. AquĂ se hicieron reformas para el matrimonio exclusivamente. Por quĂ©, si estĂĄn tan preocupados por el tema, no impugnaron esto hace cincuenta años, o hace treinta, o hace veinte, ÂĄsi siempre se ha podido adoptar! Por quĂ© resulta que de pronto es lo que les preocupa. Porque estĂĄn conscientes de que, como decĂa Einstein a mediados del siglo pasado, es mĂĄs fĂĄcil romper un ĂĄtomo que un prejuicio, y como se han dado cuenta de que en el Distrito Federal con toda claridad hay una mayorĂa de personas que estĂĄ a favor del tema de matrimonio, se han ido al tema de la adopciĂłn, para golpear donde la gente tiene menos informaciĂłn. Han engañado abiertamente a la sociedad diciĂ©ndole que legislamos para adoptar, pero lo peor y mĂĄs grave: que la adopciĂłn estĂĄ mal, o que les genera algĂșn tipo de problema a los niños. No dicen cuĂĄles son esos problemas, cuĂĄl es el sustento que tienen, de dĂłnde lo sacan, por quĂ© lo dicen. PrĂĄcticamente todas las academias serias del mundo que se han metido a estudiar esto ây tenemos los estudios en www.sociedadunida.orgâ, han demostrado con estudios empĂricos que la orientaciĂłn sexual de los padres no tiene ninguna relaciĂłn con el desarrollo de los menores. Pero no se dan cuenta de que al hacer lo que hacen estĂĄn atacando a niños, a los cuales les estĂĄn diciendo âtĂș no tienes derecho a que se reconozca tu familiaâ. Porque las familias homoparentales con niños existen; no estaban esperando a que viniera un legislador o un grupo legislador a darles permiso. Lo Ășnico que estamos haciendo es darles el reconocimiento.
ÂżCuĂĄl ha sido el argumento mĂĄs cavernĂcola que te has encontrado en los debates del pleno?
Bueno, rayan hasta en lo divertido. En particular, el de un jerarca religioso de LeĂłn, que dijo que el terremoto de Chile habĂa sido por culpa de las reformas del matrimonio. De ahĂ, para abajo. El que mĂĄs me ha preocupado es el que ha venido por parte del PAN, diciendo que iban a proteger a nuestros niños de deseos perversos y antinaturales que atentan contra sus derechos. Hacer una campaña como esta por parte de un partido polĂtico, financiado con recursos que provienen de nuestros impuestos, me parece una falta absoluta de Ă©tica polĂtica. AcciĂłn Nacional ha dejado mucho que desear como partido polĂtico y como instituciĂłn.
Antes te preguntaba por esos dos MĂ©xicos que se ven, el DF y el resto del paĂs. TambiĂ©n creo que dentro de esa izquierda a la que te asociaste dentro del DF hay muchas diferencias. Me acuerdo, por ejemplo, en los plantones de 2006 organizados por LĂłpez Obrador, cĂłmo habĂa carteles claramente homĂłfobos referidos a miembros del PAN. ÂżQuĂ© opinas?
El PRD es un partido de masas, en fin, tiene un electorado muy amplio si se compara con los partidos emergentes. Pero me parece que cada vez hay un mayor esfuerzo en el PRD por desarrollar de manera efectiva su plataforma programĂĄtica, en donde estos temas sĂ estĂĄn. Una de las cosas que yo señalĂ© pĂșblicamente en varias ocasiones es que para el PRD fue fĂĄcil adoptar estas reformas en el DF porque es congruente con su programa. Desde luego siempre hay cuadros y siempre hay representantes populares que pueden ir en contra de estos lineamientos. Y no sĂłlo en el PRD; en el propio Partido Convergencia, que se postula socialdemĂłcrata, por ejemplo, acaba de salir un diputado de apellido Tonalzin en Tlaxcala con una iniciativa para penalizar el aborto. De nuevo, me parece que el tema tiene que ver tambiĂ©n con el DF/resto del paĂs. Lo que quiero decir con todo esto es que la izquierda en su conjunto, si bien no estĂĄ perfectamente alineada con las reformas liberales, poco a poco va acercĂĄndose cada vez mĂĄs a la defensa de las libertades, al menos muchĂsimo mĂĄs que el PRI o que el PAN. Es un proceso en el que quienes podamos tenemos que abonar, pero tambiĂ©n es del espacio ciudadano, en el que yo creo mucho. El segmento mĂĄs liberal de la poblaciĂłn, que mĂĄs cree en las libertades y en los derechos humanos, estĂĄ en el espacio ciudadano.
Y sin embargo, un partido como el SocialdemĂłcrata, que presentaba todas esas propuestas modernas, perdiĂł el registro a nivel nacional.
Es tambiĂ©n muy difĂcil hacer una valoraciĂłn precisa de esto. Por una parte, hubo un impacto importante por parte del movimiento anulista, y habrĂa que revisar tambiĂ©n cuĂĄles son las estrategias y los planteamientos que hicieron estado por estado y a nivel nacional, porque en el DF sacamos incluso mĂĄs votos que Convergencia. Pero es materia de otro debate. A mĂ no me parece que la sociedad no estĂ© preparada para una propuesta socialdemĂłcrata; me parece mĂĄs bien que no la supimos comunicar.
â Yaiza Santos
(Huelva, España, 1978) es periodista y editora afincada en México. Imparte clases de periodismo en la Universidad Iberoamericana.