Ilustraciรณnes: Israel Garcรญa Corona

Ejercicios Extremos

Una lista de maromas gastronรณmicas de alto riesgo.ย 
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Vasito de tegogolos tibios en Catemaco (para visitar a los brujos).

Cueritos de la Plaza Mรฉxico luego de haber llovido (en ellos).

Bolsa de Pescuezos de Pollo Azul con Salsa Valentina en el Metro Rosario (con hambre).

Torta de col y jamรณn translรบcido de $5 pesos en el bosque de Chapultepec (sin hambre).

Terminar metafรณricamente con un “Vuelve a la vida” debajo del puente de la avenida Ignacio Zaragoza.

Degustar, en cualquier esquina de la federaciรณn, un platito de frutas salpicadas de agua salmonelosa, empanizadas por el polvo citadino.

Por cierto, haber aceptado uno de los pastelitos de masa cruda de la prima al inaugurar su hornito de foco Lili-ledy.

Sincronizada del Metro Hidalgo con chiles en escabeche (aderezada con cola de lagartija aventada por un malhora que huye camuflado entre uniformes de secundaria pรบblica).

Polla en ayunas la cruda de un martes.

Bufet barato de hotel de quinta estrellas.

El clรกsico spaghetti blanco de comida corrida (con crema humectante y queso de cera).

Caldo de gallina musculosa (que huele mรกs bien a cordero del mercado de Marruecos, en el mercado de la esquina de la casa).

Pida sus ricos y deliciosos tamales oaxaqueรฑos, ricos tamales oaxaqueรฑos calientitos.

Tacos de esos trozos que dicen que son de cabeza de res cuando justo lo que ya no hay es cabeza de res en el perol de los tacos (con sueรฑo).

Torta gigante de salchicha enlamada en puesto blanco con hoyo en el vidrio manoseado justo en esa esquina de Insurgentes Norte (borracho).

Bufete de mariscos en lunes o en martes o en miรฉrcoles, (luego de que en el mismo establecimiento se anunciara con bombo un bufete de mariscos en viernes, sรกbado y domingo).

Tacos de pastor al 2×1 (pregonados estoicamente en manta agujerada atada al poste del alumbrado pรบblico).

Los 225 mililitros de juguito que quedan luego haber finiquitado unos pepinos con chile piquรญn, limรณn y sal.

Cafรฉ requemado en resistencia de cafetera en dependencia pรบblica (en junta de presupuesto con jefe burรณcrata de tres generaciones).

Marina de mole en recreo en la primaria (a un lado de torta tamaรฑo emperador del compaรฑero hijo รบnico y mimado).

Micheladas tibias de litro y medio (escarchadas con polvito sabor Mora Azul, tuneadas en Gomichelas y rematadas con un tarugo en la feria de Texcoco en noche de concierto de Ana Bรกrbara).

Churro escurrido de “cajeta” en farmacia de Mixquic con uso de suelo de maquinitas y juegos mecรกnicos.

Empanadas de carne (sin saber quรฉ carne se hizo, ni quiรฉn, ni cรณmo, ni en dรณnde estรก esa carne si es que la hay, y en donde acaso es mejor que no la haya).

Tiritas de pescado “fresco” y frito (ahogado en aceite oscuro a las afueras del metro Peรฑรณn Viejo y muy lejos de la cuaresma).

Hot-dogs a 5 x 25 (y el 15 de septiembre en la tremenda congestiรณn humana de Azcapotzalco).

Bufanda de algodรณn de azรบcar (perseguida cien metros por un niรฑo de cuatro aรฑos por todos las la pisoteadas entre puestos ambulantes en ese mismo 15 pero en Coyoacรกn).

Ensalada de coditos (temperatura tupper cerrado en coche cerrado, servida en plato desechable, recogida del pasto de Chapultepec).

Carne con nervio (o al revรฉs), acompaรฑada por tortillas a medio hacer en comida corrida metropolitana.

Gaznate petrificado  (circa 1976), o “Alegrรญas” de semรกforo (con celofรกn quebrado por el tiempo), o huevos de pascua (regalados por  tรญa arrugada que huele a viejo por debajo de lociones dulces), o calaveras de azรบcar (con nombre propio despegรกndose entre las moscas del mercado de Naucalpan), o colaciรณn para posada de $3 el kilo.

Tacos de Chanfaina en tapa de tambo oxidada en esquina apretujada del tianguis de Tepito.

Carne tรกrtara de botana innecesaria al caer la noche en cantina-piquera-chelerรญa de ningรบn pelo.

Lasagna insabora y sobrecocida (por invitaciรณn de pareja de amigos reciรฉn casados y en su nueva sala con bancos altos).

Calimocho tibio (en bar pequeรฑo de nombre rimbombante en la colonia Roma, y platicando pamplonicamente, de la naturaleza del propio trago y de cรณmo correr los toros en Pamplona).

130 chicharrones de harina en teibol.

Cualquier carne asada (casi siempre arrachera marinada, en diminuto patio trasero del Estado de Mรฉxico, manipulada por cuรฑado gordo que le aplica con saรฑa Maggi y cerveza y pimienta y coca-cola segรบn receta de no sabemos quiรฉn), pasadas con refresco de cola al tiempo y sin gas.

¿Lociรณn en borrachera?

Tacos de adobada a medio cocer con baba de nopales y cebollita pasada, aliรฑado todo con salsa de puros chiles a las afueras del Estadio Azteca antes de un Amรฉrica-Pumas, ahรญ donde se vio que es mรกs que fรกcil llegar a un baรฑo abierto, limpio, motivante de todos los respetos.  

 

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Escritor, editor y promotor cultural. Ha publicado 8 libros, entre ellos Zopencos (2013), Yendo (2014) y Sayonara (2015). Es propietario de Hosterรญa La Bota.


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