En estos dรญas, un seรฑor evidentemente leal a las instituciones ha cometido su espectacular debut en la fama fugaz de las redes sociales.
Este seรฑor se llama Raรบl Libiรฉn, pero mejor haremos en llamarle Licenciado, cosa que prefiere, si es indicio que asรญ lo llaman sus fieles guaruras.
Resulta que Licenciado, propenso –como su nombre lo indica– a desdeรฑar leyes y a mandar golpear a quien se lo reclame, protagoniza un video que mรกs bien es audio, pues sรณlo figura en รฉl su decidida voz de mando.
El reclamo obedeciรณ a que Licenciado ordenรณ a su guaruraje estacionar su caravana de automรณviles en una banqueta que, como lo sabe la gente (mas no asรญ los licenciados), es para uso exclusivo de los peatones.
Un funcionario del gobierno delegacional llamado Arne aus den Ruthen procediรณ a cuestionar esa conducta. Los guaruras trataron de coaccionarlo pero, al ver que no procedรญa, llamaron a su patrรณn por un telรฉfono estilo celular.
Por ese medio, Licenciado procediรณ entonces a hacerle saber al funcionario lo que a continuaciรณn se anota y que es, a fe mรญa, una transcripciรณn fiel:
Me pelas la verga
Unos segundos despuรฉs, dice lo mismo pero distinto, pues aumenta el volumen y enfatiza virilmente las sรญlabas:
ME PE LAS LA VER GA
Como el funcionario calla ante esta solicitud de amistad sincera, Licenciado lo conmina a reconsiderar agregando informaciรณn pertinente:
Me pelas la verga parada
Al percatarse de que no hay reacciรณn satisfactoria, algo que le resulta incomprensible, haciendo acopio de paciencia y con encomiable รกnimo propedรฉutico, Licenciado opta entonces por la dialรฉctica:
¿Sabes lo que es la verga bien parada?
De nuevo el funcionario no responde. Es una lรกstima. Hubiera dicho que no para que Licenciado aportase una respuesta que, obviamente, tenรญa en la punta de la lengua.
Es un escritor, editorialista y acadรฉmico, especialista en poesรญa mexicana moderna.