La lámpara de queroseno. El sol mandelstamiano.
Las lámparas de queroseno no alumbran hace tiempo.
Hay poco pan y agua, poco juego y sal.
Todo es muy aburrido, solitario, opaco y oscuro.
El sol mandelstamiano inspiró y recompensó
con su luz brillante señalando el camino hacia el cielo.
En la miseria acrecienta la fortaleza y el fuego.
A su lado no temo al hambre, al frío, al bochorno ni al tifo.
Las lámparas de queroseno comenzaron a crujir bajo las piernas.
Nuestro tiempo pasó, destelló, se marchitó.
El viejo pianista se entristece por las canciones idas.
Todo fue alegre y deslumbrante, ruidoso y calido… –
Arseni Zamostiánov (1977): Publica desde los trece años en revistas y periódicos. Con la cabeza en la arena es su primer libro.
— Traducción y notas de Jorge Bustamante García
Brasil: protesta y desencanto en el país del futbol
El país que parecía ser el ejemplo a seguir en América Latina se ve obligado a replantearse su modelo político.
Los libros, esos subversivos
Transcribo solamente lo que hoy he encontrado en el blog que Yoani Sánchez escribe desde Cuba (y de paso, para quien quiera leer ese excelente blog: basta ir a Google y escribir el nombre y el…
Informe desde La Habana
Escribir para el público mexicano sobre la situación que se vive en nuestro país comporta un gran reto, y también un riesgo grande, por la tradicional…
Otro plagio
Este año de festejos patrios es el mejor para denunciar el misérrimo plagio que cometió el violinista y compositor austriaco Fritz Kreisler (1875-1962) al pastichear, en su Marche Miniature…
RELACIONADAS
NOTAS AL PIE
AUTORES