Istmo
A fines de junio, unos 100 migrantes fueron secuestrados en los lรญmites de Veracruz y Oaxaca.
“El sacerdote Alejandro Solalinde Guerra, director del albergue “Hermanos del Camino”, ubicado en Ciudad Ixtepec, denunciรณ que el pasado 24 de junio 250 migrantes que se dirigรญan a Veracruz en el tren de carga conocido como “La Bestia” fueron interceptados por un comando armado, antes de llegar a la estaciรณn de Medias Aguas, perteneciente a esa entidad vecina […]Las cifras de los posibles secuestrados varรญan. Mientras que el Sacerdote de la Iglesia catรณlica indica que el nรบmero es indeterminado, algunos medios manejan que podrรญan ser mรกs de 150 personas, incluidos niรฑos y mujeres”.
Theroux despierta en el lado del Pacรญfico del Istmo de Tehuantepec: “En 1894 se construyรณ el tren que cruzaba el Istmo. Una de las vรญas fรฉrreas mรกs transitadas que el mundo haya conocido, en la cรบspide de sus operaciones habรญa sesenta trenes al dรญa. Es un dato sorprendente, porque muy poco de ese ajetreo y esa eficiencia sobrevive, una pequeรฑรญsima porciรณn del trabajo de los constructores y los especuladores”. Poco despuรฉs entra a Chiapas.
Chiapas
“En el pueblo de Arriaga le preguntรฉ al revisor cuรกndo podรญamos esperar llegar a Tapachula. Contรณ con los dedos, luego riรณ porque tenรญamos mรกs de diez horas de retraso. “Tal vez esta noche”, dijo. “No se preocupe”.
De Arriaga sale el tren Chiapas-Mayab de la Costa, que llega a Ixtepec. “El huracรกn Stan destruyรณ [en 2005] los puentes del ferrocarril que conectan a Tapachula con Arriaga, y el gobierno mexicano no los ha reconstruido buscando con ello frenar la migraciรณn. Esa es la razรณn por la que el tren Chiapas-Mayab inicia ahora su camino desde Arriaga. Esto ha ocasionado que los centroamericanos, que antes de Stan se subรญan al ferrocarril en Tapachula, inmediatamente despuรฉs de cruzar por Ciudad Hidalgo, ahora tengan que caminar para llegar a Arriaga”.
Que la primera etapa del viaje sea una caminata de 250 kilรณmetros ilustra muy bien la magnitud de la empresa. Segรบn el documental La bestia, de Pedro Ultreras, Chiapas es la parte mรกs difรญcil del viaje, pues antes de que el viaje comience, los migrantes ya han soportado grandes esfuerzos fรญsicos, ademรกs de asaltos y extorsiones. Josรฉ Francisco, hondureรฑo de 21 aรฑos: “los policรญas lo agarran a uno y lo tratan como perro, como animal lo golpean”. ¿Piden dinero? “No lo piden, sino que lo bolsean a uno”, dice Alex, nicaragรผense de 28 aรฑos. “Si lo pidieran, serรญa otra cosa”.
Volvemos a Theroux: “Si habรญa una virtud en el desorden de este tren tan descuidadamente administrado, era que le otorgaba al pasajero la libertad de sus coches viejos. No habรญa reglas, y si las habรญa, nadie las seguรญa”.
El autor llega a Tapachula, y una familia guatemalteca que viajaba en el tren le propone al escritor compartir un taxi para cruzar la frontera. “Dije que sรญ, y media hora mรกs tarde, en la oscuridad, estaba cruzando el puente sobre el rรญo Suchiate. Detrรกs de mรญ estaban las colinas y los plantรญos de plรกtano de Mรฉxico; adelante, una cima de roca, y en sus paredes y salientes, una jungla azul pรกlido con blancas lianas y enredaderas, que brillaban a la luz de la luna; cuando el rรญo dejรณ de sonar, pude escuchar el chillido de murciรฉlagos”.
El mismo rรญo Suchiate donde empieza la jornada del sur al norte, previo pago de una cuota de diez pesos para el balsero. Nuevamente, “Las primeras horas del viaje de casi 5 mil kilรณmetros que les espera parecen todavรญa una aventura juvenil. El sueรฑo aรบn no comienza”.
es editor digital de Letras Libres.
