El Sr. Lula da Silva, fue a La Habana a despedirse de su amigo, el Sr. Mito Viviente Comandante Fidel Castro, antes de dejar la presidencia de Brasil.
El comandante recibió al Sr. Lula en una casita revolucionaria y anti-imperialista bastante mona, como se ve en la fotografía, que coincide con las fotos que han hecho circular los agentes del imperialismo yanqui, por ejemplo aquí.
La discusión sobre la fortuna del Sr. Castro es tan antigua como el control que ejerce sobre la isla.
El año de 2005, la revista Forbes dijo que el Sr. Castro tenía amasada una fortuna de 550 millones de dólares.
Por medio del diario Granma, el Sr. Castro convocó entonces a Forbes y al gobierno de Estados Unidos a demostrarlo exigiendo que se publicase la existencia de siquiera una cuenta de ahorros que mostrase que tiene “siquiera un dólar”.
“Si lo demuestran –escribió el caudillo– renunciaré a mis responsabilidades y a mis obligaciones”.
De lo que se deduce que esa casa no es una casa, ni esa piscina es una piscina, ni el agua es agua, ni la terraza es terraza, ni los jardines son jardines, ni el malecón es malecón ni, para el caso, el Sr. Castro es el Sr. Castro ni el Sr. Lula da Silva es el Sr. Lula da Silva.
La casa que no es la casa vista desde el aire que no es el aire
O bien que todo es un fotoshó, caballero.
O bien, que la casa costó solamente 99 centavos de dólar.
O…
Es un escritor, editorialista y académico, especialista en poesía mexicana moderna.