El bufón de Francisco I de Francia, Triboulet, sabiéndose amenazado de muerte por un cortesano al que había ofendido con una de sus rudas bromas, acudió al rey a implorar protección.
—No te preocupes —le dijo el rey—, si alguien osara ponerte una mano encima, será ahorcado una hora después.
Y Triboulet respondió:
—Sire, yo os agradecería que lo hiciérais ahorcar una hora antes.
Es escritor, cinéfilo y periodista. Fue secretario de redacción de la revista Vuelta.