Cuando se piensa en resolver el problema del tráfico, las soluciones siempre parecen enfocarse en cómo incrementar el espacio para que los autos circulen; cómo mejorar, para y por los automóviles, las avenidas existentes; cómo y dónde edificar pasos a desnivel, segundos pisos, nuevas calles y vías rápidas. Pero estas “soluciones”, pensadas en función del coche, no resuelven el problema del tráfico solo lo inducen.
Se llama tráfico inducido al nuevo y creciente tránsito de vehículos que las nuevas vialidades generan. Litman,señala que el tráfico, al igual que los gases, tiene una demanda creciente de espacio (entre más espacio se le procura más se expande), por ello al aumentar la oferta de las vialidades, el tráfico no hace sino aumentar.
La aparición de tráfico inducido puede ser resultado de cuatro causas1:
a) Una determinada vía resulta una ruta más conveniente, en tiempo y dinero, para los automovilistas.
b) Esa vía permite o facilita la conexión directa entre dos poblaciones con incentivos para mantenerse comunicadas constantemente (relaciones sociales, económicas o de esparcimiento.
c) Esa vía hace más atractivo el uso del automóvil, al abaratar sus costos (tiempo y dinero).
d) Al mejorar la accesibilidad, la nueva vía estimula en el mediano y largo plazo, desarrollos habitacionales y comerciales en el área conectada. Las propiedades elevan su valor, crece la demanda y con ello se incentiva un cambio de patrones en el uso del suelo orientados hacia el automóvil. Esto aumenta la población residente y flotante y con ello el número de autos necesario para su traslado.
Todas estas causas resultaría controlables para un parque vehicular moderado, pero cuando las “bondades” de la nueva vía resultan atractivas para 4.2 millones de autos, como es el caso de la Ciudad de México, estas nuevas infraestructuras se convierten en nuevas vialidades congestionadas, comolo que pasó con el mejoramiento de Avenida Constituyentes y como lo que acabará sucediendo eventualmente con la construcción de la supervía poniente y los segundos pisos de periférico en la Ciudad de México.
Galindo y Heres (2006) han verificado la existencia de tráfico inducido en la Ciudad de México. Sus resultados muestran que cuando una vialidad permite reducir 6 minutos a un viaje que solía tomarnos 60, se genera un aumento del 3.8% del volumen del tráfico2.Si el viaje solía durar 120 minutos la reducción de 12 crece en 7.6% el volumen de tráfico y en 11.3% para viajes de 180 minutos. Estos resultados indican que la construcción de nuevas vialidades en la Ciudad de México tiene beneficios limitados en el tiempo3 y que la estrategia de construir más calles para reducir el tráfico resultará, en el mediano y largo plazo, un fracaso.
Una propuesta para reducir los costos individuales y sociales (tiempo, dinero, estrés, ruido, contaminación, etc.) que genera el tráfico, es la implementación de incentivos económicos que indiquen que el uso del automóvil, en ciertas zonas y horas, tiene un costo social que debe ser pagado por quién lo genere. Al establecer una internalización de los costos sociales y una obligación/sanción económica para compensarlos se reducen los alicientes para usar el automóvil. Londres es un buen ejemplo en el uso de estos incentivos. Desde 2003 ha aplicado un cargo por congestionamiento (actualmente 9 a 12 libras esterlinas – aprox. 170 a 227 pesos)a quienescirculan por el centro de la ciudad entre las 7 a.m. y 6 p.m. Los ingresos netos recabados durante los primeros tres años fueron de 189 millones de libras (3.5 mil millones de pesos) y fueron usados para financiar el transporte público.
Durante los primeros meses de la implementación de este programa, Londres logró reducir el tránsito de 20,000 automóviles diarios. Muchos automovilistas evitaron circular por la zona, decidieron viajar en horarios de no congestionamiento u optaron por medios de transporte como el autobús, el metro o la bicicleta (Litman, 2006).
Considerar más espacio para los autos como solución primaria a los problemas de transporte y congestionamiento es inocente y contraproducente. El tema relevante es cómo transportar personas de manera eficiente y segura y no cómo pueden circular los automóviles. Para ello hay diversidad de soluciones como construir y mejorar la infraestructura de transporte público (no solo como alternativa al auto, también para crear su propia demanda inducida), implementar cargos por congestionamiento, eliminar el estacionamiento gratuito, dejar de subsidiar la gasolina y promover la creación yutilización de infraestructura multimodal de transporte no dependiente del automóvil.
1] Litman, 2011 da una explicación detallada de las razones detrás de este fenómeno.
[2] Volumen de tráfico es la cantidad de vehículos que pasan por una calle o avenida en un momento determinado
[3] Es importante mencionar que la generación de tráfico de una mejorada o nueva vialidad en la Ciudad de México dependerá de su contexto particular, como localización, tamaño, niveles previos de congestionamiento y costos de transporte.
Economista. Actualmente labora en el Instituto de Políticas para el Transporte y Desarrollo. En proceso de obtener el grado de maestría en urbanismo por la UNAM.