Los comentarios que hizo el nuevo presidente del jurado del Premio Nobel de Literatura, Peter Englund, acerca del eurocentrismo mostrado por los jueces de ediciones pasadas dan pie a pensar que quizá habrá que poner el dinero en los autores norteamericanos. El pequeño escándalo del año pasado contribuye a pensar que la Academia se siente obligada a compensar a los estadounidenses por los señalamientos de insularidad que el presidente del jurado anterior lanzó a la prensa unos días antes del fallo.
Por otro lado, algunos han hecho una suerte de retrato hablado del posible Nobel a partir de las (supuestas) inclinaciones políticas de la Academia Sueca.
Amoz Oz va a la cabeza en algunos sitios de apuestas. Mario Vargas Llosa es el latinoamericano mejor posicionado en estas especulaciones y Bob Dylan insiste en aparecer entre los mencionados.
– La redacción
Amos Oz