Cuando el doctor Josรฉ Gregorio Hernรกndez muriรณ tras ser atropellado por uno de los pocos coches que existรญan en Venezuela el 29 de junio de 1919, las calles de la capital se desbordaron de personas acompaรฑando el fรฉretro y hubo un momento en que ya no era la familia la que lo llevaba a cuestas. La gente gritaba โยกSanto, santo!โ y el ataรบd fue pasando de manos hasta llegar al Cementerio General del Sur, donde fue enterrado. Su imagen se mantiene presente en los altares de los hogares venezolanos, como el beato mรกs venerado del paรญs. Viaja en los bolsillos de los mรฉdicos, cuando visitan a los enfermos o cuando van a operar; en las billeteras de las personas que se suben y bajan del Metro; en las ventanas traseras de los โcarritos por puestoโ; en las bendiciones de las abuelas a sus nietos. Josรฉ Gregorio Hernรกndez, โel venerableโ, no entiende de clases. Estรก en todos, por todos y para todos, en ese espacio donde la ciencia y la fe se juntan para hacer posible lo imposible: el milagro.
Este relato refleja una realidad compartida en Amรฉrica Latina: el realismo mรกgico no es simplemente un gรฉnero literario, sino una forma de leer la vida y sus acontecimientos. En esa manera de mirar, que hace que la gente recurra a la creencia politeรญsta ante la incapacidad del Estado de garantizar el acceso a derechos, como la atenciรณn sanitaria, tambiรฉn hay una riqueza imaginaria que le quita aridez a la existencia.
En la pelรญcula La estrella azul, escrita y dirigida por Javier Macipe, esa manera de percibir la vida โy la mรบsicaโ de algunos rincones de Amรฉrica Latina, en este caso especรญficamente de Santiago del Estero (Argentina), florece y se deja ver. Allรญ viaja el cantante Mauricio Aznar, interpretado por Pepe Lorente, en crisis con su vocaciรณn y atravesado por una vida de excesos. El territorio al que llega, donde faltan recursos pero no imรกgenes, ni creencias, ni mitos, ni mรบsica, contrasta con la vida de su natal Zaragoza; asรญ como el ritmo y las letras de su grupo de rock and roll Mรกs birras contrastan con las chacareras. Dos espacios emocionales que se tejen con hilos de la vida real en la experiencia fantรกstica de Aznar, quien pone el oรญdo en lo mรกs profundo de una mรบsica olvidada, desconocida en Espaรฑa.
La historia narra un momento de la vida de este rockero en la que se encuentra con la sabidurรญa del folclore argentino de la mano del mรบsico y compositor Carlos Carabajal conocido como โel padre de la Chacareraโ. โYa cogรฉs la guitarra como un guitarrero y no como un guitarristaโ; โEl ritmo se te tiene que meter dentro; no imitarloโ; โEres un buen llegadorโ… son algunas de las frases que nos va dejando este personaje que nos muestra cรณmo, muchas veces, la diferencia estรก en las sutilezas. A su vez, Aznar nos enseรฑa cรณmo, para notarlas, hay que estar abierto a verlas โo escucharlasโ; igual que ante la magia, los milagros o las estrellas.
Anna Carolina Maier es periodista.ย