Después de 90 días de spots, debates, ataques, descalificaciones y algunas propuestas, las campañas electorales han llegado a su final. En eventos masivos o a través de sus redes sociales, los candidatos terminaron sus campañas y llamaron por última vez a votar por ellos.
José Antonio Meade fue el primero. Por la tarde se reunió con sus simpatizantes en la Arena Monterrey y por la noche concluyó sus actividades proselitistas en el Parque de las Maravillas en Coahuila, uno de los bastiones del PRI. Ante miles de seguidores provenientes de todo el estado enfatizó la importancia de la elección del domingo: “está en juego nuestra visión, nuestra seguridad y nuestra tranquilidad”. También acusó a quienes han apoyado a López Obrador porque “conociendo el riesgo de la alternancia autoritaria y antidemocrática de Andrés Manuel, lo han habilitado”. Durante su mensaje recordó al candidato a diputado federal del PRI y exalcalde de Coahuila, Fernando Purón, asesinado el 8 de junio, y mencionó que la seguridad será el principal reto para quien llegue a la presidencia. Sobre el lugar que le otorgan las encuestas, dijo que en lo últimos días su campaña remontó y se mostró seguro de que ganará la presidencia: “Hicimos la tarea en esta elección, la hicimos con propuestas. Está lista la estructura, el activismo y estamos listos para ganar en este jale”. En el evento lo acompañaron Aurelio Nuño, Vanessa Rubio, René Juárez Cisneros y Miguel Riquelme, gobernador de Coahuila; entre los asistentes se encontraron las estructuras más tradicionales del PRI, miembros de sindicatos, integrantes de la Confederación de Trabajadores Mexicanos y de la Fundación Colosio.
Frente a 10 mil personas, el candidato de la coalición Por México al Frente realizó su cierre de campaña en la Velaria de la Feria de León junto con Diego Sinhué, candidato a gobernador del estado de Guanajuato. En su discurso agradeció el apoyo a sus simpatizantes, se defendió de los ataques de sus contrincantes, lanzó retos a Enrique Peña Nieto e hizo un llamado al voto útil: “Frente a todos los ataques, las mentiras y calumnias aquí estamos, de pie. No nos pudieron doblar y no nos podrán doblar nunca”. Entre papeles de colores naranjas, azules, amarillos y blancos, Anaya le recordó a sus simpatizantes que “[e]sta no es una elección más, este domingo estará en juego el futuro de nuestro país y de toda una generación”. Acompañado de su familia, líderes panistas y figuras clave de su campaña, como Diego Fernández de Cevallos y Damián Zepeda, su mitin terminó al son de “Caminos de Guanajuato” de José Alfredo Jiménez. Días antes Anaya realizó diversos cierres regionales. El domingo estuvo con Alejandra Barrales en el Ángel de la Independencia, donde pudo reunir, según sus propias cifras, a 150 mil simpatizantes del PAN, PRD y MC.
En algo que parecía más una entrevista de un programa de variedades que un acto político, Jaime Rodríguez Calderón dio cierre a su campaña. A diferencia de los eventos de sus contrincantes, no hubo aplausos ni porras, solamente el Bronco y los actores Lola Cortés y David Zepeda sentados en una sala en un foro de televisión en Monterrey. El cierre se transmitió en vivo en su Facebook y en su momento de mayor concurrencia registró más de 3 millones de espectadores. Mientras el candidato respondía a las preguntas de los actores, su equipo contestaba en tiempo real los mensajes en Facebook, Twitter y Whatsapp. Su cierre digital contó con intervenciones del público, números musicales y momentos emotivos, como cuando recordó que el asesinato de su hijo lo motivó a cambiar al país. Horas antes tuvo un evento en el auditorio de su natal Galeana, Nuevo León, junto con otros candidatos independientes del estado. Ahí invitó a sus paisanos a votar por él: “Soy el único de los cuatro candidatos que conoce los problemas del campo, soy el único que ha vencido la pobreza y la violencia, y aquí estoy tratando de que ustedes logren tener la satisfacción de poder hacer lo mismo”. No obstante, aceptó que de perder las elecciones regresará a gobernar Nuevo León.
Entre cumbia, jarana, música pop, mariachi y trova, Andrés Manuel López Obrador realizó su último cierre de campaña en el Estadio Azteca. 95 mil personas se reunieron para escuchar el último mensaje público del tabasqueño. El candidato presidencial de la alianza Juntos Haremos Historia llegó alrededor de las 8:30 de la noche y atravesó la cancha del estadio de camino al escenario, saludando a su paso a algunos de los asistentes. En el estrado lo esperaban su esposa y sus hijos, Claudia Sheinbaum, Yeidckol Polevnsky, Belinda, Margarita la Diosa de la Cumbia y los candidatos a gobernadores por Morena.
Durante su discurso de casi una hora, trató los temas recurrentes de su campaña: el combate a la corrupción, la honestidad, la transformación del país, los cambios a las reformas, la austeridad y la eliminación de los privilegios a la clase política. En referencia a sus candidaturas anteriores, el candidato mencionó que todo “ha sido posible por la perseverancia, la terquedad, la necedad”. Sobre las acciones que tomará contra sus detractores aseguró que no habrá represalias, que permitirá la crítica y que su gobierno no será una dictadura. Comparó a su movimiento con la Independencia y la Revolución, pero mencionó que no habrá armas ni derramamiento de sangre. Antes de concluir, incitó a sus seguidores a no confiar en los resultados en las encuestas y a salir a votar para “lograr un triunfo contundente”. Después de que Eugenia León cantara una canción en alusión a la cuarta transformación del país y de que los asistentes entonaran el himno nacional, López Obrador concluyó la campaña que empezó hace doce años.
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Mientras se realizaba el #AMLOFEST, se dio a conocer la noticia de que la Unidad Técnica de Fiscalización del INE investiga irregularidades en el Fideicomiso Por Los Demás, creado por Morena para apoyar a damnificados del 19 de septiembre. Según el consejero Ciro Murayama, la queja presentada por el PRI será resuelta en agosto, una vez concluida la fiscalización del proceso.
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Este domingo se disputarán 3,400 cargos públicos y se espera que participen 89 millones de mexicanos. El INE dará a conocer los resultados de la elección mediante el conteo rápido, un ejercicio estadístico que estima las tendencias de la elección, a partir de las 23:00 horas. Por su parte, los resultados oficiales los dará a conocer el Programa de Resultados Electorales Preliminares después de capturar las actas de cada casilla. El sistema avanza conforme se recibe acta por acta a partir de las 20:00 horas y concluirá 24 horas después.
