Para la familia Kโฆ
โEsta aldea es propiedad del castillo. Quien en ella vive o duerme, en cierta forma v ive o duerme en el castillo. Nadie puede hacerlo sin permiso del condeโ.
Franz Kafka: El Castillo
Es casi la medianoche del 26 de noviembre. Frente a la Plaza de San Wenceslao, al pie del Museo Nacional que con la iluminaciรณn parece una obra de orfebrerรญa, una brigada de estudiantes detiene nuestro auto. Visten uniformes verde olivo y estรกn armados hasta los dientes con hojas mimeografiadas, panfletos y distintivos patriรณticos con los colores checoeslovacos: blanco, azul y rojo. Hace apenas unos dรญas, el atrevimiento de tener ideas y repartirlas en la vรญa pรบblica los hubiera llevado a la cรกrcel. Hoy sienten, por primera vez en sus vidas, el significado de la libertad cรญvica: pueden pensar, pueden expresarse, pueden reunirse y moverse a sus anchas sin que el seรฑor del Castillo siga sus pasos. Nos entregan sus escritos y nos despiden con la V de victoria. ยฟDรณnde he visto a estos jรณvenes antes? Las mismas caras, la misma esperanza. Quizรก en Mรฉxico, en 1968.
Pero este 1989 no es aquel 1968. Los jรณvenes de entonces nos entregรกbamos a un impulso mรกs emotivo que racional, mรกs libertario que liberal. Al margen de la justificaciรณn de nuestro movimiento, habรญa en รฉl algo invertebrado. Logramos poco o nada porque querรญamos cambiarlo todo, desde el jefe de la policรญa hasta el sistema capitalista mundial. No sabรญamos que para actuar y pensar con claridad es importante, ante todo, distinguir. Nosotros no distinguรญamos. Desde la perspectiva de 1989, el desenlace de 1968 parece casi natural. El sorprendente impulso libertario, poderoso pero falto de andamiaje polรญtico, se enfrentaba al mรกs autoritario de los presidentes contemporรกneos de Mรฉxico. Las noticias que llegaron de Praga una maรฑana de agosto de 1968 debieron seguramente alentarlo. Como su homรณlogo en el Kremlin, Dรญaz Ordaz era el heredero de los herederos de una revoluciรณn gloriosa en sus palabras y sus mitologรญas, pobre en sus resultados humanos. Brezhnev y Dรญaz Ordaz eran los cancerberos de un proceso histรณrico petrificado. La respuesta, en ambos casos, fue idรฉntica: los tanques en las dos plazas, San Wenceslao y Tlaltelolco.
Hoy el cuadro es distinto. A diferencia de nosotros, los jรณvenes checos de 1989 entienden que la libertad cรญvica no es un estallido puro, o una borrachera interminable, sino un fluido que a cada tramo construye y limita su cauce. En Praga son nuevamente los estudiantes quienes han puesto en marcha el reloj de la historia, pero esta vez han aprendido la lecciรณn. Nacieron con malicia. Saben que si cayeran en la menor provocaciรณn, el gobierno tendrรญa el pretexto perfecto pan reprimir y aplazar para otra generaciรณn โla suya propia, nada menosโ la inaplazable democratizaciรณn de la vida checoeslovaca. Por eso evitan a todo trance la violencia, tanto real corno simbรณlica. Sus huelgas ocurren sin abandono de las aulas: no castigan a sus instituciones ni se castigan a sรญ mismos. Por la maรฑana tapizan las tiendas de la ciudad con sus proclamas y por la noche las limpian. Ni balas, ni barricadas, ni adoquines. Ni siquiera puรฑos. En Praga, el 17 de noviembre, los estudiantes iniciaron una movilizaciรณn que en diez dรญas ha transformado quizรก para siempre la vida de esta naciรณn. Y lo han logrado sin romper un sรณlo vidrio. A golpes cรญvicos de convicciรณn y malicia.
Tambiรฉn los jerarcas son distintos. En el Kremlin gobierna el hombre que muchos checoeslovacos llaman โSan Mikhail Gorbachovโ. En 1968, horas antes de la invasiรณn, Brezhnev llamรณ a Alexander Dubcek para advertirle que no habรญa mรกs โSocialismo con cara humanaโ que el socialismo soviรฉtico. A mediados de noviembre Jan Fojtik, el ideรณlogo del Partido Comunista Checo de visita en Moscรบ, escuchรณ el mensaje inverso. Dรญas mรกs tarde, la plana mayor del partido, responsable casi toda del trabajo sucio del 1968, renunciaba a sus puestos. En Praga, la nueva primavera ha llegado en el invierno.
La Plaza de San Wenceslao es un inmenso rectรกngulo ascendente, bordeado en ambas aceras por hermosos edificios homogรฉneos que remata en el monumento ecuestre al Santo Patrono de Bohemia. Son las 9 de la maรฑana del dรญa 27 y hay ya miles de personas en el lugar. Las esculturas que custodian a San Wenceslao tienen asidas a la cintura, mediante cordones, unas inmensas banderas checas. Las brigadas prueban los altavoces y equipos de sonido. Preparan la huelga general que estallarรก a las 12 en punto. Unos pasos hacia abajo del monumento hay un gran bloque circular de granito que los jรณvenes han convenido en espacio votivo. Surcada en todos sus resquicios por ramos de flores, una extraรฑa cordillera de cera multicolor recorre la circunferencia. Cientos de veladoras y pequeรฑas velas permanecen prendidas. De rodillas, como frente a un pastel de cumpleaรฑos pero sin sonreรญr, en silencio, una chica toma la flama de una veladora exhausta y protegiรฉndola del viento helado la deposita suavemente en una veladora mรกs joven. La escena se repite en los pasajes de algunas calles aledaรฑas donde el 17 de noviembre la policรญa golpeรณ a los estudiantes. La gente se arremolina en estos altares cรญvicos. Algunos recuerdan quizรก a Jan Palach, aquel bonzo de la libertad que en enero de 1969 se prendiรณ fuego en San Wenceslao. Hoy el fuego tiene una significaciรณn vital distinta. El 24 de noviembre, frente a una concentraciรณn de 300 000 personas, Alexander Dubcek volviรณ a hablar a su โamado pueblo de Pragaโ. Al final de su discurso recordรณ las palabras de un sabio: โsi ya hemos ganado la luz, ยฟpor quรฉ habrรญa de volver la oscuridad?โ y aรฑadiรณ: โA pesar de que habรญamos alcanzado ya la aurora, hemos tenido que vivir en la oscuridad por demasiado tiempo. Actuemos ahora de forma que la luz sea real y definitiva.โ Por eso la chica en el cรญrculo votivo resguarda la flama con todo cuidado. Sabe que es frรกgil. Naciรณ en tiempos de oscuridad. La flama que trasmite es ella misma.
Praga es un periรณdico mural. Decenas de miles de comunicaciones escritas tapizan sus muros y vitrinas, sus puertas y columnas. Cada checo ha descubierto que vivรญa en la clandestinidad y que en su alma guardaba un zamisdat inรฉdito. Desde el 18 de noviembre la ciudad se ha llenado de escritores. Hay pocos graffiti en las paredes. Lo que abunda es la limpia expresiรณn personal de las opiniones. No son volantes ni propaganda: son ideas fijas, ideas a la luz. A veces una frase, a veces un programa polรญtico o una caricatura. Ningรบn texto se parece a otro, ni ninguna escritura. Mi amigo Denis Reynaud, en Praga desde hace 20 aรฑos, me traduce:
โFin al Gobierno de un solo partidoโ.
โHay que permanecer alertas para alcanzar la justiciaโ. T. Masaryk.
โTres etapas: la rusa (1948-1968) la policรญaca (1968-1989) la libertad (1989 en adelante)โ.
โDeseamos discusiรณn abierta en los medios de comunicaciรณnโ.
โ17 de noviembre no se olvidaโ.
โHay que limpiar el 68โ.
Una pequeรฑa escuela tรฉcnica decidiรณ reunirse en asamblea y proponer por su cuenta reformas que aseguren la libertad, el pluralismo, la transformaciรณn total del sistema polรญtico y una idea recurrente del momento actual: la revisiรณn histรณrica del 68. Los checos quieren saber lo que ocurriรณ verdaderamente en ese aรฑo y deslindar las responsabilidades. Estas resoluciones de la escuela no llegaron quizรก a Rude Pravo o a los medios de comunicaciรณn, pero vieron la luz pรบblica en la vitrina de un restaurante y fueron muy leรญdas. Mรกs adelante, en un pasaje comercial, predominan los posters con fotos de Masaryk hacia el fin de su vida y de Dubcek, sonriente, en 68, instantรกneas de la represiรณn policiaca del de noviembre (perros, macanas, gases, redes) y ridiculizaciones grรกficas del ancien regime: una mano mecรกnica empotrada en una tabla se levanta para aprobar y al hacerlo levanta consigo otra y otra, ligadas entre sรญ por un alambre transmisor fijo: todas idรฉnticas, todas simultรกneas, todas asintiendo. La cara de los hombres que poseen esas manos automรกticas no es una rara: es un rollo de papel en blanco.
La escritura de la libertad tiene otros medios. La Plaza de San Wenceslao a las 11:45 a. m. se llena por completo. Medio millรณn de personas ha llegado a manifestar. Abundan las parejas y los contingentes. No hay jรบbilo desbordado ni euforia en sus rostros โme comenta Roberto Fagoaga, otro mexicano fascinado en Pragaโ hay una alegrรญa mรกs profunda, la certeza de que esta vez los cambios serรกn irreversibles.
Muchos traen su pancarta personal: โMacanas al diabloโ, โSe acabaron los cuentos de hadasโ. Otros llegan a tรญtulo corporativo: perfumistas, jardineros, obreros de una fรกbrica electromecรกnica, โmineros del uranio, con los estudiantesโ. No faltan los redactores de una revista literaria con el lema perfecto: โPor una literatura sin censuraโ. Un oleaje de proclamas recorte la plaza de un extremo a otro: โYa estamos aquรญโ. โLa unidad es la fuerzaโ, โDimisiรณnโ, โYa nos colmaronโ. Algunos altavoces proclaman la necesidad de una economรญa libre o la renuncia total del gobierno. De los edificios penden grandes carteles evidentemente improvisados, de fabricaciรณn casera: โEl poder del puebloโ, โElecciones libresโ. Todos en la plaza desfilan con sus distintivos tricolores y muchos ondean la bandera. La huelga general, respetada en el paรญs, ha pasado a segundo tรฉrmino. Lo que ocurre es algo mรกs notable: la ocupaciรณn pacรญfica de la ciudad por sus habitantes, la primera votaciรณn real en la historia checoeslovaca desde los aรฑos treinta, un referรฉndum espontรกneo, no con boletas sino con pasos y palabras. A las doce en punto la multitud corea y canta. Un viejo alucinado zigzaguea con la sonrisa pegada a los labios: no puede creer lo que ve. Un joven agita su bandera con la mano izquierda y golpea insistentemente al cielo con la V de su victoria. En las esquinas o en el metro, ocurre lo increรญble: la televisiรณn โoficial, claroโ muestra escenas de la violencia โoficial, claroโ del 17 de noviembre. En Praga no hay, el dรญa de hoy, un sรณlo policรญa. No es difรญcil que, vestidos de civiles, algunos hayan llevado pancartas personales a San Wenceslao.
Lo que no cambiรณ en 21 aรฑos, ha cambiado en 10 dรญas. Praga es un laboratorio donde ocurre una precipitaciรณn de la quรญmica histรณrica. Todavรญa el 16 de noviembre, el sistema polรญtico parecรญa intocado e intocable, inmune a los cambios en Polonia o Hungrรญa, indiferente a la caรญda del Muro de Berlรญn. Un chiste autolesivo recorrรญa las calles: Somos Caesescueslovaquia. Aquรญ dar clases privadas de filosofรญa llegรณ a convertirse en un crimen contra la patria. Los micrรณfonos del Seรฑor del Castillo llegaban a las alcobas y grababan hasta las canciones en la regadera. Para muchos escritores o activistas, el arresto y la cรกrcel se volvieron experiencias cotidianas. El Proceso de Josef K… multiplicado una y otra vez por los grises agentes de la policรญa. El espionaje en el poder. Para el checo comรบn y corriente pretender viajar al extranjero implicaba no sรณlo un calvario burocrรกtico sino algo mucho peor: arrojar sobre sรญ la sospecha definitiva de ser un enemigo pรบblico.
De pronto, la marcha estudiantil del 17 de noviembre acelerรณ la historia. Los estudiantes escogieron ese dรญa por cumplirse el 50 aniversario de la represiรณn nazi contra los jรณvenes de Praga. El gobierno habรญa concedido graciosamente cierta liberalizaciรณn en el movimiento migratorio. Pacรญficamente, los jรณvenes piden mucho mรกs: elecciones libres y democracia La policรญa los reprime. Hay centenares de lesionados y detenidos. El 18, los autores y artistas de teatro protestan contra la brutalidad, cancelan sus representaciones y apoyan a los estudiantes que convocan a una huelga general para el dรญa 27. El 19 ocurre un acontecimiento crucial: se crea el Foro Cรญvico.
Lo integran profesionistas, intelectuales, estudiantes, maestros, obreros. El cรฉlebre dramaturgo Vaclav Havel es uno de los miembros mรกs activos. El Foro toma el Teatro โLinterna Mรกgicaโ como sede y se declara en sesiรณn permanente. Su primera decisiรณn es pedir la renuncia de los responsables de la represiรณn. De inmediato el Foro se conviene en vocero natural y legรญtimo de la sociedad civil. El 20, 200 000 personas se manifiestan en Praga y otras muchas en el interior del paรญs. El 21, el Primer Ministro Adamec se distancia repentinamente de la lรญnea dura de su partido y ofrece dialogar con el Foro. El 22, Dubcek habla en San Wenceslao. El 23 la manifestaciรณn asciende a 300 000 personas. El 24 renuncia Jakes, el Secretario General del Partido Comunista, hombre tan inarticulado que en sus discursos confundรญa democracia con demografรญa. (Los cรณmicos protestaban contra รฉl porque les hacรญa la competencia.) En su renuncia, escrita seguramente por alguien, Jakes admite: โLa opiniรณn pรบblica tiene razรณn. Nuestra reestructuraciรณn se ha quedado en las grandes palabras no en los hechos autรฉnticosโ. El 27, Checoeslovaquia respeta la huelga general convocada nueve dรญas antes por los estudiantes. Es el momento decisivo: โUna golondrina no hace verano, ยกno cedamos!โ
A las 4:30 p.m. el Partido Socialista de Checoeslovaquia convoca a una conferencia de prensa en el Hotel Forum. Desde hace dรฉcadas ha sido un Partido con varias โpโ: pequeรฑo, palero, pusilรกnime. Lo รบnico glorioso que le queda es su pasado: es el Partido de Masaryk. Ahora, con la quiebra del Partido Comunista, ha tornado cierta fuerza. Cuatro figuras pรฉtreas ocupan el presidium. El Secretario explica que los acontecimientos han sido tan acelerados y sorprendentes que el discurso repartido minutos antes en la puerta, es obsoleto: sus bases lo han modificado. Habla de la necesidad de ampliar el Frente Nacional (el espectro de partidos), asegurar el acceso equitativo de los partidos a los medios de comunicaciรณn y promover elecciones democrรกticas. Un exaltado checo que acaba de regresar del exilio lo increpa: โยฟestรกn dispuestos a retomar la herencia de Masaryk? ยฟEstรกn dispuestos a abandonar el marxismo?โ. El robot responde: nunca hemos abandonado a Masaryk ni abrazado a Marx. Un corresponsal inglรฉs le pregunta: โยฟaceptan o no el papel hegemรณnico del P.C.CH.?โ Respuesta: Queremos igualdad con otros partidos. Siguen tres intercambios de antologรญa:
โ ยฟPor quรฉ durante estos 20 aรฑos nunca protestรณ usted contra las persecuciones?
โ Es verdad, nunca protestรฉ. Pero tampoco aprobรฉ.
โ ยฟQuรฉ opina del Foro Cรญvico?
โPreservaremos la identidad de nuestro partido. No aceptaremos cambiar el monopolio de una verdad por el monopolio de otra.
โ Los jรณvenes, cรณmo sabrรก usted, estรกn decepcionados del socialismo. El socialismo se ha desacreditado ante ellos. ยฟPiensa usted que su partido deberรก cambiar de nombre y proyecto?
โ Nuestro partido se fundรณ en 1897. Nuestro ideal proviene de nuestro origen. Si este ideal no coincide con la realidad no veo por quรฉ haya que cambiar de ideal.
Poco a poco los periodistas abandonan la sala. Con socialistas asรญ, ยฟquiรฉn necesita comunistas?
El Foro Cรญvico ofrece una conferencia de prensa muy distinta. Se realiza en la โLinterna Mรกgicaโ. En el estrado hay siete personas: representantes estudiantiles, acadรฉmicos y profesionistas. A la derecha del grupo destaca la cara sonriente โa la Peter Ustinovโ del Doctor Komarek. Hace aรฑos fundรณ una pequeรฑa instituciรณn independiente de Prospectiva econรณmica que previรณ, paso a paso, lo que ha ocurrido. En tiempos de complacencia, Komarek suministraba duchazos de agua frรญa a la jerarquรญa checa. La reforma polรญtica y la liberalizaciรณn econรณmica le parecieron siempre inaplazables. El pรบblico conoce la precisiรณn de sus ideas y su origen: abandonado por su madre, se criรณ en un hogar obrero que le dio el apellido Komarek, que significa โMosquitoโ. Hoy es uno de los hombres mรกs populares en Checoeslovaquia. No serรญa difรญcil que en el futuro resultara Primer Ministro.
โLa huelga ha sido un รฉxitoโ โinforma el vocero del Foroโ โA pesar de las comunicaciones defectuosas, tenemos noticia de una solidaridad generalizada, mรกs que suficiente para dar peso a nuestras negociaciones de maรฑana con el gobiernoโ. Despuรฉs de un recuento detallado de los objetivos de estas negociaciones y la identidad de los representantes, comienza la ronda de preguntas. Komarek toma una sola vez la palabra:
No creo que puede equiparar con justicia nuestra situaciรณn con la de Hungrรญa o Polonia. Checoeslovaquia vive ahora un movimiento polรญtico espontรกneo y generalizado. Nuestra tradiciรณn es reformista. La historia ha probado una y otra vez que nuestro pueblo no necesita administradores de la democracia. La situaciรณn de facto es una; la de jure otra. Es necesario que la segunda se supedite a la primera.
Los corresponsales inquieren sobre planes concretos: ยฟEl Foro Cรญvico se convertirรก en partido polรญtico? ยฟAceptarรญa una cohabitaciรณn de poder con el P.C.? ยฟSigue los pasos de “Solidaridad’? ยฟVolverรก a convocar a la huelga general si los medios incurren en la censura? Un miembro del Foro resume y responde:
Es demasiado pronto para precisar nuestro papel en el futuro. Solidaridad midiรณ mal sus tiempos, sus fuerzas, y tuvo que esperar 10 aรฑos. Nosotros hemos logrado mucho en diez dรญas. Aรบn ahora Solidaridad se enfrenta a un dilema: ยฟes un partido o un sindicato? Nuestro papel es el de vocero de la sociedad, un vocero independiente. Asรญ negociaremos maรฑana. Recordemos las palabras de Havel. โnuestro objetivo es no ser objetivosโ.
Afuera, en San Wenceslao, la gente atiende al periรณdico mural y protege las veladoras. Ya en la avenida frente al Forum, advierto un enorme edificio moderno totalmente iluminado. โEs la sede del P.C.CH.โ, me explica Denis, โestรกn en sesiรณn permanenteโ. Una hilera interminable de autobuses espera en las calles. Las placas denotan la mรกs variada procedencia. Han venido espontรกneamente acarreados a discutir formas de defenderse. โSoy un comunista fiel, lo he sido por 30 aรฑos โdeclara uno de ellos a la televisiรณnโ. Ningรบn estudiante me arrebatarรก lo que he logradoโ.
Mรกs de un millรณn y medio de comunistas checoeslovacos podrรญan afirmar lo mismo. ยฟQuรฉ ocurrirรญa si salieran a manifestar en San Wenceslao? Del enfrentamiento civil, lรญbralos San Mikhail G.
En Checoeslovaquia la Iglesia Catรณlica ha jugado un papel polรญtico menos activo que en Polonia. Este es tambiรฉn un paรญs protestante y aรบn preprotestante: recuรฉrdese la herejรญa de Juan Hus que tiene seguidores hasta hoy. Con todo la Iglesia Catรณlica es predominante: tiene millones de creyentes, varios santos de tiempos pasados, una santa โInรฉsโ muy reciente y, oficiรกndolo todo, el nonagenario Cardenal de Praga: Franciscus Tomรกsek.
Su relaciรณn con el gobierno comunista ha sido invariablemente tensa y, durante algunos aรฑos, trรกgica. En tiempos recientes, la jerarquรญa comunista habรญa tratado inรบtilmente de ganar su buena voluntad. A raรญz de los รบltimos acontecimientos, el Cardenal aceptรณ conversar con Miroslav Stepรกn, Secretario del Comitรฉ Municipal del P.C. en Praga. El rรฉgimen dio cuenta de ese encuentro llamรกndolo โdiรกlogoโ. El dรญa 24, Praga se enterรณ de la protesta del Cardenal:
Como pastor de la Iglesia trato de no rehusarme a hablar con quien se acerca a hablar conmigo. Pero mi encuentro con el seรฑor Stepรกn no puede verse como el diรกlogo por el que pugnรฉ en vano desde hace muchos aรฑos. Insisto en mi mensaje al pueblo de Checoeslovaquia. La Iglesia Catรณlica estรก decididamente del lado del pueblo en la presente lucha. Agradezco a los que ahora luchan por el bien de todos nosotros y confรญo por entero en el Foro Cรญvico, que se ha convertido en el vocero de la naciรณn.
Hoy todas las campanas de Praga repicaron a las 12 en punto. La Iglesia tambiรฉn llamรณ a la huelga.
De ciertas conversaciones en Oxford hacia 1981 con Julius Tomin, un atormentado disidente checo, recuerdo el nombre de Peter Uhl: es ingeniero, activista desde los aรฑos sesenta, es uno de los principales firmantes de la Carta de los 77 y ha estado innumerables veces en la cรกrcel. Su esposa, activista por su cuenta, ha corrido la misma suerte: ha sido golpeada y encarcelada durante todo el perรญodo policรญaco: 1969-1989. Su direcciรณn y telรฉfono en el directorio aparecen equivocados. No obstante, logramos hablar con su esposa. Nos cita a las 10 p.m. Uhl vive en un edificio lรณbrego. A oscuras subimos las escaleras interminables hasta dar con la puerta. Nos abre una chiquilla de 13 aรฑos, aterrada: โNo, mis padres no estรกn en casa, no sรฉ a quรฉ horas vendrรกn, no sรฉ nada, de verdad nadaโ. ยฟCuรกntas veces habrรก vivido la misma escena? Esperamos afuera a Uhl. Inรบtilmente. ยฟEs usted Uhl?, preguntamos a otro inquilino que entra al edificio: โNo, claro que noโ, y cierra de inmediato. Al dรญa siguiente Denis hablรณ por telรฉfono con la mujer.
โ Estรก muy apenada. Apenas el sรกbado lo soltaron de prisiรณn. Le hablan atribuido ciertas declaraciones a la BBC contrarias a la versiรณn oficial. Lo soltaron por decreto presidencial pero รฉl no acepta que su liberaciรณn sea un regalo. Quiere que se entable un juicio hasta sus รบltimas consecuencias. Han sido dรญas terribles. Trabaja como fogonero.
โMe imagino, ha de estar metido dรญa y noche en el Foro Cรญvico, redactando proyectos, estrategias etc… como fogonero.
โNo, Uhl trabaja en verdad como fogonero: entra a las 5 de la maรฑana y sale a las 10 de la noche.
El 29 por la maรฑana Praga se entera de las negociaciones entre el Foro Cรญvico y el Primer Ministro Adamec. En la โLinterna Mรกgicaโ la gente hace colas para recibir la informaciรณn. Un eficaz sistema de prensa atiende a los corresponsales extranjeros. Al leer el texto con los resultados, pienso que Havel quiso decir algo muy distinto: โNuestro objetivo es no ser objetivosโ, es decir, blancos fรกciles para el enemigo. En sรณlo diez dรญas recogieron de la sociedad un decรกlogo de exigencias que difรญcilmente el gobierno podrรก rehusar:
- El Primer Ministro se compromete a integrar un nuevo gabinete a mรกs tardar el 3 de diciembre.
- El Primer Ministro someterรก a la Asamblea Federal la supresiรณn de los artรญculos constitucionales que se refieren a la hegemonรญa polรญtica del partido comunista y la hegemonรญa ideolรณgica del marxismo-leninismo.
- El Primer Ministro harรก lo conducente para que el Foro Cรญvico tenga acceso a los medios masivos de comunicaciรณn y, a corto plazo, tenga un periรณdico propio.
- El Primer Ministro asegura al Foro Cรญvico que a mรกs tardar el 10 de diciembre (dรญa internacional de los Derechos Humanos) todos los presos polรญticos quedarรกn libres.
- El Foro Cรญvico se complaciรณ en enterarse a travรฉs del representante de la Asamblea Federal del establecimiento de un comitรฉ especial de investigaciรณn sobre la represiรณn del 17 de noviembre. Pide que los estudiantes formen parte del comitรฉ.
- El Foro Cรญvico pidiรณ al Primer Ministro, ademรกs del cambio de gabinete, un nuevo programa de gobierno que siente las bases legales para asegurar: elecciones libres, libertad de asociaciรณn, libertad de expresiรณn y de prensa, libertad de creencias, aboliciรณn de la supervisiรณn estatal en las iglesias. Es necesario abolir tambiรฉn las milicias populares y la presencia del partido en los centros de trabajo. El Foro Cรญvico advirtiรณ con claridad al Primer Ministro que si la opiniรณn pรบblica no estรก satisfecha con su nuevo programa o cree que no actรบa con la rapidez necesaria, pedirรก la renuncia al Primer Ministro y su gabinete y propondrรก al presidente un nuevo Primer Ministro.
- El Foro Cรญvico pedirรก por escrito al presidente, Dr. Gustav Husak, su renuncia antes del 10 de diciembre de 1989.
- El Foro Cรญvico pedirรก al Primer Ministro la formulaciรณn de una ley constitucional que revoque el mandato a aquellos miembros de los varios cuerpos directivos de la vida polรญtica checoeslovaca que hayan traicionado la voluntad de sus representantes.
- El Foro Cรญvico apela al gobierno y a la Asamblea Federal para que condene inmediatamente la ocupaciรณn del paรญs por los ejรฉrcitos del Pacto de Varsovia en 1968. La Asamblea Federal deberรก apelar igualmente al Soviet Supremo de la URSS y a los cuerpos legislativos bรบlgaros y alemanes con el objeto de que admitan la ilegalidad de la intervenciรณn no sรณlo en tรฉrminos de derecho internacional sino de las normas del propio Pacto de Varsovia, puesto que la intervenciรณn ocurriรณ sin conocimiento ni aceptaciรณn de los cuerpos estatales de Checoeslovaquia.
- Aunque les pide mantenerse en estado de alerta, el Foro Cรญvico considera que estos resultados son suficientes y permiten a los ciudadanos volver al trabajo. Los comitรฉs de huelga pueden transformarse en toros y levantar o no las huelgas de acuerdo a su libre decisiรณn. El Foro Cรญvico apela al pรบblico a calibrar la situaciรณn y los resultados de estas negociaciones y comunicarle sus opiniones en todas las formas posibles.
Coincidiendo con la huelga general, el Foro Cรญvico habรญa publicado un programa conciso y claro de siete puntos bajo el tรญtulo de โEsto es lo que queremosโ. Las negociaciones con Adamec han echado a andar el proceso de cambio polรญtico tal y como lo preveรญa aquel programa. Las previsiones sobre salvaciรณn ecolรณgica, justicia social y cultura libre pueden esperar. La economรญa checa tambiรฉn. No es ya la maravilla que fue, pero estรก libre de deudas y es una plataforma mรกs sรณlida que la de otros paรญses de la Europa Central que dan el salto a la libertad. En Checoeslovaquia no hay colas. Con todo, el Foro Cรญvico hablรณ claro tambiรฉn en este sentido: โQueremos abandonar los viejos mรฉtodos de manejar la economรญa porque restan motivaciรณn a las personas en el trabajo, porque provocan desperdicio de recursos y nos han quitado competitividad en el mundo. Queremos crear una economรญa de mercado, no una economรญa burocrรกticaโ.
Por la noche la televisiรณn informa que, punto por punto, el gobierno ha empezado a cumplir con los requerimientos del foro. (Ahora hasta los comunistas han creado su propio foro de โcomunistas democrรกticosโ). Por 309 votos contra 0, la Asamblea Federal ha aprobado el fin de la hegemonรญa comunista en Checoslovaquia. Un primer ciclo parece haber terminado. A travรฉs del Foro Cรญvico, esta sociedad ha impuesto un programa concreto y un plazo a su gobierno. En 10 dรญas que merecerรญan conmover al mundo, los checoeslovacos han practicado aquella maravilla ateniense: la democracia directa.
รltimo dรญa en Praga. Llegamos a la ciudad vieja. Los museos de historia y arte se han solidarizado con la huelga. Caminamos hacia el viejo barrio judรญo. Denis me seรฑala el lugar donde naciรณ Kafka. Es un hermoso edificio de amplios departamentos. Supongo que tienen una exhibiciรณn con fotografรญas, manuscritos en vitrinas, etc… pero Denis me decepciona: en la Enciclopedia Checa el escritor Franz Kafka no existe. En un รกngulo del edificio, las autoridades concedieron la disposiciรณn de un busto de acero negro en el que Kafka parece un cuervo: โAquรญ naciรณ Franz Kafka. 1883-1924โ. Es todo y es natural: ninguna premoniciรณn literaria del totalitarismo es comparable, en su detalle, anticipaciรณn y horror, a la de Kafka. Sus libros, por supuesto, no se consiguen. En una de las โbuenasโ librerรญas de Praga, el autor mรกs exhibido sigue siendo Lenin. Las sinagogas de Praga permanecen cerradas. Casi todas son museos estatales que conservan seis siglos de tesoros litรบrgicos y otros tesoros distintos, desgarradores: los dibujos de los niรฑos en el campo de concentraciรณn de Terezin que segรบn la propaganda oficial โmostraban asรญ su oposiciรณn al fascismoโ. Quiero entrar pero ningรบn ruego vale: โla democracia es la democraciaโ. Desde un taburete, sobre una barda, contemplo el cementerio judรญo. Es un naufragio de lรกpidas en el tiempo. Una animada congregaciรณn de piedras que se miran y discuten, una marcha sinuosa en la hojarasca hacia el Este, hacia Jerusalem. La vieja sinagoga donde, segรบn la leyenda, a mitad del siglo XVI el Rabi Jehuda Loew ben Bezalel, amasando cabalรญsticamente arcilla y letras creรณ una rรฉplica humana, estรก cerrada tambiรฉn. El golem en huelga.
Tomo el camino real hacia el puente del rey Carlos. Cuesta arriba por la calle Neruda, se llega al brumoso Castillo de Praga. Su dominio sobre la ciudad formรณ parte, con toda certeza, de la topografรญa psicolรณgica de Kafka. Hoy lo habita el presidente Husak. Hasta hace unos dรญas Husak era tan ubicuo e inaccesible como Klamm, su homรณlogo en la novela de Kafka, ahora debe de estar haciendo sus maletas. El pueblo ha tomado el Castillo y lo ha vuelto su propiedad. Un nuevo presidente lo ocuparรก a partir de diciembre. El agrimensor Dubcek, quizรก. O el seรฑor K…: Komarek.
En la plaza vieja las autoridades han plantado un gran รกrbol de Navidad. En su base los estudiantes han robado una manta con una sola palabra: โRenuncienโ. Del edificio donde el padre de Kafka atendรญa su negocio cuelga un cartel: โDemocracia y humanismoโ. Los checoeslovacos saben que la cultura es el barรณmetro sensible de la libertad. Por eso el punto final del manifiesto โEsto es lo que queremosโ del Foro Cรญvico, se refiere a la cultura:
La cultura no compete solo a los artistas, cientรญficos y profesores sino a la vida toda de nuestra sociedad. Debemos liberamos de las ideologรญas restrictivas y superar la separaciรณn artificial entre nuestra cultura y la cultura mundial. El arte y la literatura no deben ser mรกs objeto de censura sino de contacto libre con el pรบblico.
La ciencia debe tener su justo lugar en la sociedad. De ese modo superaremos las expectativas inocentes y absurdas sobre la ciencia asรญ como su supeditaciรณn a los dictados del partido.
El nuevo sistema educativo democrรกtico deberรก basarse en principios humanitarios y evitar el monopolio estatal en la educaciรณn. La educaciรณn es nuestro mayor patrimonio nacional: debe dirigirse a crear hombres de pensamiento independiente y alta responsabilidad moral.
Poco a poco los exiliados internos de la โRevoluciรณn Culturalโ checa salen a la superficie. Los maestros, intelectuales, profesionistas y escritores que el seรฑor del Castillo enviรณ a trabajo forzado en minas, fรกbricas, hospitales o bosques vuelven a atreverse a hablar. Vaclav Havel verรก sus obras en los escenarios de Praga. Por aรฑos trabajรณ como empleado de una cervecerรญa. La cรกrcel y la censura eran su pan de cada dรญa. (Su รบltima detenciรณn ocurriรณ en mayo. Su delito: prender una veladora en la tumba de Jan Palach). Ahora vive un momento de triunfo pleno, tan pleno que puede darse el lujo de confesar:
Me gustarรญa arreglar con el Ministro del Interior estar libre tres dรญas a la semana y volver a la prisiรณn dos dรญas a la semana para tomarme un respiro de libertadโฆ de la libertad.
La ironรญa de Havel contiene una verdad profunda. Para Occidente, en muchos sentidos, Europa Central fue el corazรณn cultural del fin de siglo XIX y de las primeras dรฉcadas del XX. Hoy tiene en ella una reserva moral. La segunda guerra mundial abriรณ un perรญodo de โsecuestroโ, segรบn el vocabulario polรญtico de Kundera: secuestro nazi, secuestro comunista, secuestro policรญaco. En la oscuridad de ese secuestro la cultura centroeuropea โcheca, polaca, hรบngara, rumanaโ produjo obras notables, contraparte de actitudes colectivas no menos notables. El tรญtulo de Croce โLa Historia como hazaรฑa de la libertadโ se cumpliรณ en la dura vida diaria de estos pueblos y en sus insurrecciones: Varsovia 1945, Budapest 1956, Praga 1968, Gdansk 1981. Ahora la cultura y el temple popular han ganado la libertad. ยฟQuรฉ harรกn con ella?
Por lo pronto estarรกn atareados con mil problemas concretos: desde la producciรณn econรณmica hasta el replanteamiento de fronteras seguras tanto para la geopolรญtica como para la identidad. La batalla que les espera para sobrevivir en el siglo XXI serรก menos espectacular, menos romรกntica, mรกs sorda y desesperante que la que han sostenido durante las dรฉcadas de secuestro. Pero el tiempo llegarรก en que la libertad positiva, la libertad para…, tomarรก el lugar de la negativa, la libertad de. ยฟQuรฉ harรกn con ellas? Una sรญntesis. Desperdiciarรกn menos, apreciarรกn mรกs. Su pasado reciente y remoto los apresarรก siempre en la condiciรณn humana. Sonreirรกn de los otros y de sรญ mismos. Entrarรกn y saldrรกn libremente de la cรกrcel de la vida.
Este artรญculo se publicรณ por primera vez en enero de 1990, en el Nยฐ 158 de Vuelta.
Historiador, ensayista y editor mexicano, director de Letras Libres y de Editorial Clรญo.