En la definiciรณn clรกsica de Max Weber, โel Estado tiene el monopolio legรญtimo de la violencia dentro de un territorioโ. En Sicilia, el nuevo Estado italiano (1870) fue incapaz de ejercerlo, lo cual provocรณ el nacimiento formal de la mafia. Algo similar estรก ocurriendo en Mรฉxico. El antiguo rรฉgimen creyรณ dominar a la naciente mafia pactando con ella. Se equivocรณ. Los gobiernos de la transiciรณn democrรกtica la enfrentaron de manera errรกtica, tibia e incluso turbia. Se equivocaron. Desde 2018, el Estado mexicano renunciรณ a enfrentarla. Se ha equivocado aรบn mรกs. En el Mรฉxico de hoy, como antes en Sicilia, el uso ilegรญtimo de la fuerza por la delincuencia desplazรณ al uso legรญtimo de la fuerza por el Estado.
Hay paralelos estremecedores. En Mรฉxico son famosos los narcocorridos y las series de narcos. Tambiรฉn en Sicilia la mafia gozรณ de buena fama. Su apariciรณn coincidiรณ con el estreno en Palermo de una obra de teatro, I mafiusi de la Vicaria, que tuvo inmenso รฉxito y presagiรณ el aura de heroรญsmo que por mucho tiempo rodeรณ a los maleantes.
En Sicilia, la unificaciรณn italiana significรณ nuevos impuestos, servicio militar obligatorio y la presencia de una nueva clase polรญtica despรณtica y ajena a la isla. Este doble agravio de desatenciรณn y abuso habrรญa reforzado a la mafia. Ya en 1867, el alcalde de Palermo describรญa asรญ la nueva forma de dominaciรณn ilegรญtima, la Cosa nostra.
La mafia es poderosa, quizรกs mรกs poderosa de lo que la gente creeโฆ Solamente aquellos que gozan de protecciรณn de la mafia pueden moverse libremente en el campo. La falta de seguridad ha provocado la siguiente situaciรณn: cualquiera que quiera ir al campo y vivir ahรญ debe convertirse en bandido. No hay alternativa. Para defenderte a ti mismo y a tu propiedad, debes conseguir protecciรณn de los criminales, y atarte a ellos de alguna manera.
Ucciardone, la prisiรณn de Palermo, es un gobierno en sรญ mismo. Desde ahรญ se dictan las reglas y รณrdenes. En Ucciardone lo saben todo, lo que nos hace pensar que la mafia ha reconocido formalmente a los jefes. En el campo alrededor de Palermo, los grupos criminales han proliferado y hay distintos jefes, pero a menudo actรบan coordinados unos con otros y buscan liderazgo en Ucciardone.
Un Estado indiferente y omiso, territorios ocupados, derecho de piso, gobierno mafioso desde las cรกrceles. ยฟNo es eso lo que estamos padeciendo en Mรฉxico?
Aunada como la langosta bรญblica a los desastres naturales โel terremoto de 1908 dejรณ 60,000 muertos en Mesinaโ, la mafia siciliana fue desgarrando el tejido social y apagando, segando o dominando las fuentes productivas de Sicilia cuya poblaciรณn emigrรณ en masa a Argentina y Estados Unidos, paรญs donde la mafia puso sucursales que se volvieron capitales. En Mรฉxico, paรญs telรบrico, asistimos al mismo desgarramiento, seguido de olas migratorias de gente inocente y mafiosos transnacionales.
Aunque la historia de la mafia siciliana estรก ligada al carรกcter agrรญcola de la isla, a lo largo de un siglo diversificรณ sus operaciones hasta volverse una multinacional dedicada al asesinato, secuestro, fraude, extorsiรณn, contrabando, juego, blanqueo de capitales, trรกfico de armas y personas, narcotrรกfico, etcโฆ
Punto por punto, es el caso mexicano desde los aรฑos ochenta.
En Sicilia, la mafia ha sufrido golpes esporรกdicos, a veces severos, por parte del gobierno italiano, pero nunca fue doblegada. Parecรญa invencible, hasta que el martirio de los jueces Giovanni Falcone y Paolo Borsellino, asesinados en 1992 por la mafia, cimbrรณ a Italia y convenciรณ a los sicilianos de que la batalla por la legalidad era al menos posible.
Tambiรฉn en Mรฉxico se han asestado golpes a la hidra, nunca definitivos. Lo que no hemos tenido, desdichadamente, es un movimiento nacional de repudio al crimen y respaldo a la legalidad.
Sicilia, esa isla prodigiosa, testigo de todas las culturas mediterrรกneas, perdura con dificultad. Una muestra es la ciudad de Agrigento. Violenta desde siempre, se respira en ella un aire de desolaciรณn, opresiรณn y tristeza. En Agrigento no se habla, se musita. Los taxistas son los escuchas de la mafia. ยฟQuรฉ serรญa Sicilia si imperara en ella el Estado de derecho?
Inevitablemente pienso en Mรฉxico, en Michoacรกn, en Tamaulipas, en todas las zonas de Mรฉxico que ya no son enteramente nuestras.
El futuro siciliano estรก aquรญ. El mexicano teme, sufre en silencio, cierra negocios, entierra a sus muertos y emigra. ยฟQuรฉ serรญa Mรฉxico si imperara entre nosotros el Estado de derecho?
Historiador, ensayista y editor mexicano, director de Letras Libres y de Editorial Clรญo.