Los pueblos tardan en tomar conciencia de los daรฑos del populismo. Eso es lo que ocurre ahora mismo en Venezuela, a una semana de las elecciones presidenciales. Marรญa Corina Machado, valerosa lรญder con una larga trayectoria de oposiciรณn, ha logrado congregar en torno suyo al pueblo que inunda las calles, las plazas y caminos del paรญs para superar al rรฉgimen imperante desde hace un cuarto de siglo. El evidente atropello del que fue objeto Machado al invalidarse su candidatura no hizo mรกs que fortalecer su legitimidad y popularidad. Ahora marcha junto a Edmundo Gonzรกlez, candidato de oposiciรณn que no ha sido vetado. Todas las encuestas creรญbles lo favorecen. Pero el panorama es de altรญsimo riesgo.
No a partir de estadรญsticas sino desde la angustia y precariedad de su existencia, la gente formula a Machado el deseo colectivo: que las familias se reunifiquen y las abuelas conozcan a sus nietos; que haya un alivio a la represiรณn y la inseguridad; que se combata la pobreza, sin detrimento de la libertad.
Las estadรญsticas son en verdad aterradoras. Y prueban que la destrucciรณn de Venezuela no comenzรณ con la muerte de Chรกvez sino que es obra de ambos: Chรกvez y Maduro, el original y su caricatura. En 1998, el PIB per cรกpita de Venezuela era el segundo mayor de Amรฉrica Latina. Hoy es inferior al de Haitรญ. En aquel aรฑo, bajo la empresa estatal PDVSA, la producciรณn petrolera alcanzรณ los 3.5 MM de barriles. Hoy produce 0.75 MM. Los servicios de educaciรณn y salud (que Chรกvez sustituyรณ con sus “Misiones” gracias a un barril que alcanzรณ los 150 dรณlares) han colapsado enteramente. Hacia 2018, un exministro de Chรกvez calculaba que 300 BDD habรญan sido robados de los ingresos en veinte aรฑos (de un total de 800 BDD). ยฟCuรกl serรก la cifra actual? Quizรก la tragedia mayor โy la expresiรณn final del fracasoโ es la emigraciรณn: mรกs de 8 millones de venezolanos (el 25% de la poblaciรณn) viven desperdigados en Amรฉrica Latina, Norteamรฉrica y Europa.
Polรญticamente, el rรฉgimen ya no es propiamente populista, pero tampoco es de izquierda, como Chile o Brasil. Venezuela es una dictadura polรญtico-militar alineada con Cuba, Irรกn y Rusia. El instrumento especรญfico de poder ha sido la cooptaciรณn y la represiรณn (partidos, candidatos, empresarios, acadรฉmicos, radio, televisiรณn, periodistas, estudiantes). Hace tiempo que en Venezuela no existe la separaciรณn de poderes, la libertad de expresiรณn, las garantรญas individuales y la confianza en el sistema electoral.
Despuรฉs de la รบltima manifestaciรณn masiva de 2017, la oposiciรณn languideciรณ en el desรกnimo, la deserciรณn, la divisiรณn y el destierro. Los lรญderes posibles resultaron fallidos. En ese momento extremo, apareciรณ Machado. “Esto no lo para nadie”, ha repetido en sus mรญtines, transmitiendo un admirable valor personal. Impedida a salir de su paรญs, con sus tres hijos exiliados en el extranjero, el programa liberal de esta ingeniera industrial de 56 aรฑos es importante pero lo es mรกs su temple y su ejemplo: encarna la esperanza.
Maduro y el grupo gobernante se resisten a ceder el poder, y recurrirรกn a toda suerte de subterfugios. Sin embargo, la ola democrรกtica crece y el agravio a su voluntad de cambio puede detonar la violencia y la represiรณn. A sabiendas del peligro, hay sectores del oficialismo (en las gubernaturas, en el propio ejรฉrcito) que estarรญan de acuerdo con una soluciรณn negociada, pasadas las elecciones. Pero la cuerda se tensa. El aparato represivo de Maduro ha atacado ya directamente al equipo de campaรฑa de Machado. Todo puede pasar.
La soluciรณn razonable serรญa la salida de Maduro y su clique del poder y del paรญs, y un acuerdo general de convocar a elecciones generales. Esas elecciones resultarรญan en una nueva Asamblea legislativa que a su vez renovarรญa la Fiscalรญa y el รณrgano electoral. No es una utopรญa. De lograrse, las familias venezolanas se reunificarรกn. Volverรก la inversiรณn productiva. Cuando los populistas hablan de detener la migraciรณn venezolana atendiendo a las “causas de fondo”, se refieren a la pobreza. Lo que no dicen es que la “causa de fondo” de esa pobreza ha sido la falta de democracia y libertad.
En 1998 Hugo Chรกvez prometiรณ que Venezuela “navegarรก en el mismo mar de felicidad del pueblo cubano”. Su promesa se ha hecho realidad, pero el pueblo venezolano ha decidido que no le gusta navegar en ese mar. En vez de “Patria, socialismo o muerte” (el grito de Chรกvez) prefiere “Patria, libertad y vida”. Y las conquistarรกn. Ojalรก que sea este 28 de julio. ~
Publicado en Reforma el 20/VII/24.
Historiador, ensayista y editor mexicano, director de Letras Libres y de Editorial Clรญo.