Foto: Presidencia de la Repรบblica

El primer discurso presidencial de Claudia Sheinbaum: mismo relato, diferente voz

En un discurso que no fue novedoso ni audaz, la presidenta transmitiรณ devociรณn, orgullo y compromiso con la continuidad, asรญ como desprecio hacia los crรญticos.
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El dรญa llegรณ. Por primera vez, una mujer estรก al frente del gobierno de Mรฉxico. En los tiempos de divisiรณn, confusiรณn y furia que vivimos, ยฟcรณmo evaluar objetivamente las 4,466 palabras pronunciadas por Claudia Sheinbaum en su toma de posesiรณn? Propongo hacerlo a partir de las tres dimensiones retรณricas clรกsicas: la personalidad y credibilidad que estableciรณ la oradora (ethos), la lรณgica de su argumentaciรณn (logos)y el tono emocional del discurso (pathos).

Primero, evaluemos el ethos, que se establece siempre en el arranque. Las primeras lรญneas de un discurso son muy importantes, pues son cuando el orador busca ganarse el respeto y la buena fe de quienes le escuchan. Los primeros minutos del primer discurso de la primera presidenta de Mรฉxico establecieron su posiciรณn y el tono para el resto del mensaje: ella le profesa su devociรณn y su lealtad absoluta a un solo hombre: Andrรฉs Manuel Lรณpez Obrador. Dijo, entre otras muchas cosas, que:

Hoy lo decimos con certeza y sin temor a equivocarnos: la historia y el pueblo lo ha juzgado; Andrรฉs Manuel Lรณpez Obrador, uno de los grandes, el dirigente polรญtico y luchador social mรกs importante de la historia moderna, el presidente mรกs querido, solo comparable con Lรกzaro Cรกrdenas, el que iniciรณ y termina su mandato con mรกs amor de su pueblo. Y para millones, aunque a รฉl no le gusta que se lo digan, el mejor presidente de Mรฉxico…

Ese arranque debiรณ ser muy emocionante para los simpatizantes del expresidente, en la misma proporciรณn que fue muy decepcionante para quienes esperaban que Sheinbaum dedicara sus primeras palabras a temas mรกs elevados, como la causa de las mujeres mexicanas.

Despuรฉs del arranque, debรญa venir un diagnรณstico sincero sobre la situaciรณn del paรญs, con los retos y las oportunidades que tenemos por delante. En vez de eso, Sheinbaum leyรณ una larga lista de lugares comunes, redactados de manera muy bรกsica (le dimos al mundo el maรญz, el cacao y el jitomate, los mayas inventaron el cero, nuestras mujeres hacen bellas artesanรญas, nuestro pueblo es alegre, etc.) que estuvo tambiรฉn cargada de referencias a los personajes histรณricos de siempre (Hidalgo, Juรกrez, Madero, etc.). Esta secciรณn tenรญa un objetivo que, me parece, se perdiรณ por la larga y deficiente redacciรณn: comunicar que el Mรฉxico que nos deja Lรณpez Obrador es โ€œmaravillosoโ€ y โ€œgrandiosoโ€.

Para entonces, ya habรญan pasado casi 20 de los 45 minutos del mensaje. Y aquรญ la presidenta dedicรณ unas palabras a quienes no creen en el relato obradorista, invitรกndolos en tono desafiante a โ€œpensar con la cabeza frรญaโ€ para responder una serie de preguntas retรณricas:

ยฟCรณmo es que 9.5 millones de mexicanos y mexicanas salieron de pobreza en tan solo seis aรฑos? ยฟCรณmo es que, sin subir impuestos, se redujeron las desigualdades? ยฟCรณmo es que somos de los paรญses de la OCDE menos endeudados y con una moneda fuerte? ยฟCรณmo es que somos de los paรญses con menos desempleo? ยฟCรณmo es que hay mรกs bienestar y al mismo tiempo ganaron mรกs los empresarios y los bancos? ยฟCรณmo es que estamos en rรฉcord de inversiรณn extranjera directa y al mismo tiempo aumentaron los salarios? ยฟCรณmo es que aumentรณ el salario mรญnimo y no subiรณ la inflaciรณn? [โ€ฆ] โ€œAceptรฉmoslo, a todas y a todos les ha ido mejor.

Estamos ya a medio discurso, y nuestra nueva presidenta ha puesto frente al pรบblico un argumento central que puede resumirse asรญ: AMLO es el mejor presidente de la historia y nos ha legado un paรญs grandioso y maravilloso en el que a todos les ha ido mejor y, si no lo crees, entonces no estรกs pensando con la cabeza frรญa. Esa es la segunda carencia del discurso: la baja calidad de su argumentaciรณn lรณgica (logos).

Tal vez esto sea mรกs claro si analizamos la parte medular del mensaje: el plan de gobierno. La presidenta decidiรณ leer una larga lista de acciones, promesas y obras. Pero esa lista no se presenta de manera retรณrica y persuasiva, como producto de la visiรณn propia de una Claudia Sheinbaum que nos invita a imaginarnos un mejor futuro y a sumarnos a su construcciรณn. La lista es, mรกs bien, un recuento de todas las tareas que ella, y solo ella, tiene que hacer para asegurar plena continuidad al gobierno de Lรณpez Obrador. Si AMLO quiso que hiciรฉramos trenes, entonces ella harรก mรกs trenes. Si AMLO quiso repartir dinero, entonces ella repartirรก mรกs dinero. Si AMLO decidiรณ sembrar รกrboles, entonces ella sembrarรก mรกs รกrboles. Los conocidos slogans polรญticos del lรญder, como โ€œpor el bien de todos, primero los pobresโ€ o โ€œno puede haber gobierno rico con pueblo pobreโ€, se ponen aquรญ como la guรญa รบnica de la acciรณn del Estado, bajo el untoso concepto de โ€œhumanismo mexicanoโ€.

Quedรณ muy claro que Claudia Sheinbaum nos ha dicho siempre la verdad, aunque muchos todavรญa no han querido enterarse: ella es la continuidad absoluta e inflexible del gobierno de Lรณpez Obrador, e interpreta que su mandato es ser una gerenta discreta, leal y eficaz de esta nueva etapa de โ€œla cuarta transformaciรณnโ€. Nada de lo que ofreciรณ en este discurso como plan de gobierno (ni en la extenuante lista de 100 puntos que leyรณ horas mรกs tarde en el Zรณcalo), es novedoso, audaz o, por lo menos, interesante. Y asรญ es exactamente como ella quiere que sea.

Finalmente, en lo que hace al tono emocional del mensaje (pathos), se pueden identificar tres emociones genuinas y palpables: devociรณn por AMLO, orgullo por ser la primera mujer presidenta y desprecio a los crรญticos y opositores. La devociรณn se estableciรณ en la primera mitad del discurso, entre los halagos y la repeticiรณn de las frases del expresidente. El orgullo se comunicรณ al final, en lo que fue tal vez la parte mรกs emotiva del discurso, cuando Sheinbaum dijo:

Hoy quiero reconocer no solo a las heroรญnas de la patria, [โ€ฆ] sino tambiรฉn a todas las heroรญnas anรณnimas, a las invisibles, que con estas lรญneas hacemos visibles, a las que con nuestra llegada a la Presidencia, y estas palabras hago aparecer, las que lucharon por su sueรฑo y lo lograron, las que lucharon y no lo lograron. Llegan las que pudieron alzar la voz y las que no lo hicieron, llegan las que han tenido que callar y luego gritaron a solas, llegan las indรญgenas, las trabajadoras del hogar que salen de sus pueblos para apoyarnos a todas las demรกs, a las bisabuelas que no aprendieron a leer y a escribir porque la escuela no era para niรฑas, llegan nuestras tรญas que encontraron en su soledad la manera de ser fuertes, a las mujeres anรณnimas, las heroรญnas anรณnimas que, desde su hogar, las calles o sus lugares de trabajo, lucharon por ver este momento. ย Llegan nuestras madres que nos dieron la vida y despuรฉs volvieron a dรกrnoslos todo, nuestras hermanas que desde su historia lograron salir adelante y emanciparse, llegan nuestras amigas y compaรฑeras, llegan nuestras hijas hermosas y valientes, y llegan nuestras nietas; llegan ellas, las que soรฑaron con la posibilidad de que algรบn dรญa no importarรญa si naciรฉramos siendo mujeres u hombres, podemos realizar sueรฑos y deseos sin que nuestro sexo determine nuestro destino. Llegan ellas, todas ellas, que nos pensaron libres y felices.

Con las debidas correcciones en redacciรณn y estilo, estas lรญneas hubieran sido un arranque mucho mรกs emocionante, incluyente y digno que el que Sheinbaum eligiรณ para su discurso. Pero me he desviado. Decรญa que las tres emociones identificables (pathos) eran devociรณn, orgullo y desprecio. Por lo que hace al desprecio, Sheinbaum no dejรณ dudas: quienes piensan diferente, quienes critican a su lรญder y a su partido, quienes simplemente no estรกn convencidos de lo que ella dice y hace, son personas que, o no piensan โ€œcon la cabeza frรญaโ€, o โ€œmientenโ€ (como quienes hablan de autoritarismo) o โ€œestรกn equivocadosโ€ (como cuando hizo referencia a las crรญticas sobre la militarizaciรณn).

Finalmente, la hechura general del discurso nos queda a deber a todos. El mensaje fue una amalgama de segmentos que se perciben redactados y editados por plumas diferentes โ€“se ven de inmediato las costuras entre las loas a AMLO, el decรกlogo, el plan de gobierno y el mensaje a las mujeres. La longitud del discurso fue excesiva โ€“se pudo haber dicho lo mismo en 20 o 25 minutosโ€“ y la pronunciaciรณn โ€“que nunca ha sido el fuerte de Sheinbaumโ€“ tampoco le ayudรณ a la presidenta.

En suma, hubo en este discurso una genuina devociรณn a un lรญder y una fuerte convicciรณn de que las cosas se estรกn haciendo impecablemente bien desde el poder. No hubo ninguna seรฑal de voluntad de diรกlogo, ganas de entender, o al menos de respetar, a los otros. No hubo un diagnรณstico compartido del presente, ni una visiรณn persuasiva del futuro. No fue, desde el arranque, un discurso de una jefa de Estado que gobernarรก para todas y todos. El discurso fue, en eso tambiรฉn, continuidad de la narrativa populista, polarizante y demagรณgica de Lรณpez Obrador: ellos contra nosotros, el pueblo contra sus adversarios, los hรฉroes contra los villanos. Mismo relato, diferente voz. ยฟTendrรก Sheinbaum el mismo efecto sobre las masas que AMLO? Lo iremos descubriendo en estos seis largos aรฑos. ~

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Especialista en discurso polรญtico y manejo de crisis.


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