El meme accidental

Sobre los memes de la recaptura de El Chapo y una convergencia llena de coincidencias.ย 
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I

Quizรก lo mรกs honesto sea empezar confesando que no tengo muy claro de quรฉ hablamos cuando hablamos de memes. No sรฉ, por ejemplo, quรฉ tan lejano queda ya el “meme de internet” de la definiciรณn original de Richard Dawkins que aprendรญamos en la escuela, cuando la web todavรญa era 1.0 y el concepto mismo del meme, imposible. ¿Es el meme la idea base que se propaga y va variando a cada vez  (todos los posibles subtรญtulos a una escena de “El Hundimiento”)? ¿O la idea que se reproduce como copia idรฉntica sin variaciรณn, pero cuya autorรญa pertenece a aquel que la comparte?

Inmediatamente despuรฉs del anuncio de la (mรกs reciente) captura del Chapo, el escritor Pablo Duarte publicรณ en Twitter el dibujo de tres “monitos” en una hoja de cuaderno acompaรฑado de la frase:  “Recapturaron al Chapo. No tengo fotos, pero les dejo un dibujo”. El tuit tuvo mรกs de 700 retuits. A las pocas horas un programa de W Radio llamado “El Weso” publicaba en su pรกgina de Facebook la misma imagen con el texto: “No tenemos imagen de la captura del Chapo, pero les dejamos un dibujo.” El post fue compartido casi 40,000 veces. Entre los comentarios un indignado (que no era Duarte) reclamaba: “Ja,ja,ja, esa era mi foto”. A lo que “El Weso” respondรญa: “Igual te la robaste, ja,ja,ja”.  ¿Es eso un meme?

Quizรกs esta no sea una pregunta vรกlida, pero: ¿Cuรกl es la finalidad de un meme?  Entiendo que para “El Weso”, una empresa, un meme se traduce en visitas y audiencia y por tanto en dinero. Supongo que para el que falsamente clama el meme como suyo es una cuestiรณn de seguidores en las redes sociales (¿“fama”?). Pero en la gran mayorรญa de los casos la autorรญa de un meme quedarรก enterrada bajo su propia viralidad.

El destierro final del concepto de autor, el acto creativo (e incluso el trabajo manual/digital) sin otra finalidad que la “generosa” entretenciรณn de las masas: Podrรญa decirse que el meme (en la era de la reproducciรณn viral) es la esencia misma del apropiacionismo, de la creaciรณn no-creativa. Pero no: en la escritura experimental el apropiacionismo siempre va firmado y en el arte, el apropiacionismo siempre produce alguna ganancia. El meme es una suerte de Richard Prince que regalarรญa todas sus obras.

 

II

A los pocos minutos de que las primeras fotos de la (mรกs reciente) captura del Chapo empezaran a circular en Twitter, @cupagu publicรณ una foto de la portada del disco Goo de Sonic Youth al lado de la foto del Chapo y el Cholo en el interior de un coche. Aunque las dos imรกgenes estaban “en espejo” la convergencia era interesante a varios niveles, no solo el formal.

El tรฉrmino “convergencia” designa a imรกgenes improbables cuyas resonancias estรฉticas, estilรญsticas o hasta conceptuales las aparejan. Es un ejercicio de observaciรณn y archivo propuesto por el escritor Lawrence Weschler en su libro All That Rises en 2006 y popularizada en un concurso de convergencias organizado por la revista literaria McSweeney’s.Una iglesia diseรฑada por Sol LeWitt y un salรณn de fiestas en Oaxaca, la portada de Architectural Digest y un cuadro de Botticelli, un busto de Dionisio y el peinado de Melanie Griffith en “Secretaria Ejecutiva”: busco y colecciono convergencias desde hace algunos aรฑos.

El diseรฑo grรกfico del disco de Sonic Youth pertenece a Raymond Pettibon, artista angelino de la generaciรณn punk de los ochenta; las portadas de Goo y el logotipo del grupo Black Flag son sus trabajos mรกs emblemรกticos, pero la producciรณn de Pettibon es vastรญsima e icรณnicamente definitoria tanto del punk como de la cultura marginal y DIY asociada a la adolescencia, la ilegalidad, la rebeliรณn y la fuga. 

La convergencia conceptual entre las dos imรกgenes era irresistible. La portada de Goo es un รญcono de la rebeldรญa nihilista adolescente (aunque sea apreciada sobre todo por los nada adolescentes fans contemporรกneos del disco): dos jรณvenes acaban de cometer un crimen[1] y huyen en un descapotable, el epรญtome del cool, indiferentes y melancรณlicos. El Chapo y el Cholo no solo estรกn dispuestos en el coche como los adolescentes homicidas de Pettibon, hay igualmente en ellos una actitud similar de contemplaciรณn y melancolรญa.

Busquรฉ las imรกgenes originales para realizar un composite (respetando la idea de convergencia y no intentando transformar la foto del Chapo en una copia de la portada del disco[2][) y al hacerlo descubrรญ que la (otra) foto del Chapo en un motel convergรญa perfectamente con el verso del LP en donde una mujer limpia de sangre y lipstick de la cara de un hombre perplejo y petrificado (como el Chapo). Arreglรฉ ambas imรกgenes y las compartรญ con @cupagu y los otros tres o cuatro que, hasta ese momento, habรญan comentado el hallazgo.

Ninguna imagen recibiรณ muchos retuits (hasta ahora no tiene mรกs de treinta) y nunca imaginรฉ que nuestro hilo de conversaciรณn con referencias a Aby Warburg y Lawrence Weschler terminarรญa siendo el origen de un meme. Subรญ la foto de la portada principal a Facebook, Pamela Echeverrรญa, directora de la galerรญa LABOR, me pidiรณ la foto para subirla a Instagram[3], un amigo la compartiรณ y alguien mรกs comentรณ “ahรญ tienes una pieza” (en otras ocasiones he hecho proyectos en los que “diseรฑo” portadas de LP). Hasta ahรญ, pensรฉ, termina esto: como una broma un poco snob entre entendidos.

No obstante que solo diez  o quince personas habรญan compartido la foto en Facebook[4], horas despuรฉs regresรณ a mรญ convertida en meme: la periodista Pati Peรฑaloza la compartรญa sin saber que era mรญa. Comentรฉ la historia del (ahora) meme y Pati tuvo el cuidado de aclarar a cada comentarista que este meme (excepcionalmente) tenรญa autor; a lo que alguien comentรณ: “por primera vez conozco a un creador de memes”. Pensรฉ en aquel capรญtulo de los Simpson en el que en el sรณtano de un restaurante chino, hay un grupo de empleados mecanografiando apuradamente el contenido de las galletas de la suerte que se subirรกn a los comensales.

Mientras tanto, el artista Ignasi Duarte siguiendo el hilo de conversaciรณn que llevaba a @cupagu habรญa descubierto en รฉl a un futuro colaborador para su proyecto de Conversaciones Ficticias y gracias a ello supe que @cupagu es Cuauhtรฉmoc Padilla Guzmรกn, un artista con un blog de poesรญa concreta bellรญsimo llamado The text is silence. Al final esta habรญa sido una colaboraciรณn artรญstica involuntaria (un meme d’artiste, dixit Duarte).  Una convergencia llena de coincidencias.

Al parecer, hubo pocos memes con relaciรณn a esta nueva captura del Chapo. Algunos lo atribuรญan a que el meme de Sonic Youth y el Chapo “fue tan bueno” que detuvo la producciรณn de memes. Yo aventurarรญa otras explicaciones, la mรกs obvia y optimista: estamos, por fin, hartos y el humor (involuntario) del gobierno y su parafernalia en torno a las fugas y capturas del Chapo nos produce cada vez menos “gracia” y mรกs consternaciรณn.

Otra explicaciรณn es la complejidad estรฉtica y conceptual de las primeras dos fotos difundidas de la captura del Chapo. En la รบltima fuga del Chapo las imรกgenes, como la historia misma, estaban ya llenas de humor, de banananerismo, el chiste se contaba solo: la procuradora inclinada mirando fijamente al tรบnel vacรญo o en la rueda de prensa tapando su cara con la foto del Chapo. Las dos nuevas fotos del Chapo parecieran contar una historia (muy probablemente falsa) novelesca, reminiscente de una estรฉtica cinematogrรกfica, de forajidos fracasados, de nostalgia outsider, una estรฉtica no muy lejana a la de Raymond Pettibon.

“[Lo del meme del Chapo] es una cosa tan rara, tiene que ver mรกs con la naturaleza de las imรกgenes” me escribiรณ Cuauhtรฉmoc Padilla,  “son como animales con vida propia. Hablan entre sรญ como animales y se dicen cosas que sรณlo ellas entienden. En fin.”

 



[1]En realidad el dibujo corresponde a un recorte de prensa en el que Maureen Hindley y David Smith, testigos de algunos de los asesinatos Moor en Inglaterra en los aรฑos 60, se dirigen a la corte a declarar. 

[2]Las parodias mรกs o menos chabacanas de  la portada de Goo abundan, la idea no era realizar una parodia que integrara la foto de forma impecable, sino crear un collage aproximado.

[3]Lee Ranaldo comentรณ la portada del disco en el Instagram de Labor y despuรฉs la compartiรณ en el suyo con copia a Raymond Pettibon. Mรกs tarde Kim Gordon hizo lo mismo en Twitter.

[4]Enviรฉ las fotos originales a Letras Libres para ilustrar este artรญculo, esto resultarรก obvio para los conocedores de la meme-mecรกnica, pero para mรญ es un asombro: es la primera vez que las comparto directamente.

 

 

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Ejerce la polivalencia diletante, vive entre Mรฉxico y Parรญs y, cuando no le queda otro remedio, trabaja como artista.


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