El dedo en el renglón Según la Ley de Fomento para la Lectura y el Libro, promulgada por el presidente Calderón el día 23 de julio de 2008, “Toda persona física o moral que edite o importe libros estará obligada a fijar un precio de venta al público para los libros que edite o importe. El editor o importador fijará libremente el precio de venta al público, que regirá como precio único.” (Capítulo V, Art. 22) La aplicación de esta ley depende del Programa de Fomento para la Lectura y el Libro, aprobado el 13 de noviembre del mismo año y que incluye como “logro cuantitativo esperado” para su primera fase (2009-2010) la “instrumentación de un sistema para el registro del precio único del libro”. Eso quiere decir que, si todo marcha según lo planeado, antes de finalizar este 2010 se pagará un mismo precio por cada título publicado con independencia del lugar donde se adquiera. ~ |