Ya nadie formula así,
como lo hizo el joven Sócrates
para así sobrellevar
lo que demostró Parménides;
la pregunta más moderna
es la de mi hijo de ocho años:
"¿Podría un segunda base
ser también un jardinero?
¿Quién decide?" Digo: el mánager
(escojo la ruta fácil).
"¿Por qué no decide él mismo?"
Y le traduzco a Platón:
Cada porción de lo múltiple,
¿es unitaria o diversa?,
¿por qué el Uno se coloca
por encima de lo Múltiple
en esta vacua República
pero llena de aspirantes?Se juega sólo un jardín.
Si lo haces bien permaneces
y es posible que te incluyan
en algún Juego de Estrellas.
Si lo haces mal te conviertes
en cualquiera de nosotros,
espectadores que a veces
juegan pelota llanera
e imitan las formas ciertas
de las verdaderas Ligas,
pero que son tan distintos
como lo son parecidos,
pues Parménides explica
que la Unidad y lo Mismo
son diferentes ideas.
Un padre es también un hijo,
pero nunca el hijo ideal
de su mito predilecto,
ni siquiera su propio hijo
en cuya vida interviene
con renovada esperanza.Para entonces huyó el niño
y yo regreso a Parménides
y su prueba de que lo Uno
está en proceso de ser
más viejo y joven que sí,
como la ley de las Ligas
y sus crónicas doradas,
su secuencia de novatos
siguiendo a los veteranos.
El beisbol es uno y muchos,
ejemplo de duración:
el diamante no se apaga.La felicidad de mi hijo
es mucho menos siniestra.
La velocidad y el peso
para llegar a primera
son sus solas condiciones
(yo uso guante de trampero).
Él ya comienza a apagarse
(jerga de profesionales)
en la plúmbea jerarquía
de las Ligas Infantiles,
mas lanza correctamente
y hace un swing de jardinero.
Su aptitud será medida
por un siglo diferente.
Y aunque mi oportunidad
de gloria ya haya pasado,
soy su colega amateur,
ni idéntico ni distinto,
con un rostro familiar
como un Dodger con un Dodger,
un Mellizo y un Mellizo
o cualquier agente libre
con un Salón de la Fama.Terminó nuestro simposio.
El crepúsculo permite
salir a soltar el brazo,
luego unas pocas entradas
de los Tigres en la tele
y en la cama alguna historia
sobre el inmortal Bambino. ~
Versión de Julio Trujillo
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