Amigos revolucionarios

La amistad entre Cabrera Infante, Fuentes y Cortรกzar se nutriรณ de chistes, apodos, juegos de palabras y el triunfo de la Revoluciรณn en Cuba. Pasado el tiempo, aquella relaciรณn โ€“en la que hubo lugar para las colaboraciones fallidas, las revistas efรญmeras y las diferencias ideolรณgicasโ€“ terminรณ por romperse.
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Fuentes daba una fiesta de fin de aรฑo que fue una despedida porque los amigos de entonces ya no son amigos.
Guillermo Cabrera Infante

La madrugada del 1 de enero de 1959, Fulgencio Batista huyรณ de La Habana y Caรญn โ€“Guillermo Cabrera Infanteโ€“ se llenรณ de alegrรญa. Entrรณ a un restaurante donde pidiรณ โ€œcafรฉ con leche y pan con mantequillaโ€ y el desayuno le recordรณ otro, un 4 de julio aรฑos atrรกs, โ€œaunque entonces comรญ revoltillo y pan y cafรฉ con leche. No habรญa terminado de tomar el desayuno cuando sentรญ una euforia nueva. De pronto se me saltaron las lรกgrimas de pura felicidad: estaba llorando por la libertad recuperada, nunca antes habรญa llorado por tan feliz momentoโ€. Aquel 4 de julio habรญa visto debutar a Miriam Gรณmez y, cuenta en Cuerpos divinos, un amigo le dijo: โ€œโ€“Pobre Mirta โ€“se referรญa a mi mujerโ€“, te acaba de perder esta noche.โ€ Y fue verdad.

Aรบn corrรญa la algarabรญa por la entrada de Fidel en La Habana, cuando Cabrera Infante publicรณ en Carteles โ€œLa isla partida en dosโ€ โ€“una historia sangrienta en tiempos de Batistaโ€“ cuyas primeras palabras dicen: โ€œAhora casi no vale la pena publicarlo. Es demasiado fรกcil. Cualquiera puede hacerlo. Incluso aquellos que no solo no protestaron, sino que ayudaron con su silencio o con su indiferencia o con su cobardรญa a que sucedieran las cosas que aquรญ se relatan.โ€ Era enero cuando recordรณ aquellos sucesos. Para el 11 de abril, ya en Revoluciรณn โ€“el diario que se volviรณ oficial al triunfo de Castro y donde habรญa colaborado junto a Carlos Franqui desde la clandestinidadโ€“, se sentรญa actor โ€œde una historia increรญbleโ€. ร‰l y sus compatriotas eran โ€œespectadores de otra historia aรบn menos verosรญmil. La gesta imposible de los barbudos, el triunfo total de la revoluciรณn […]. Pero no hay mรกs que separarse un poco de los acontecimientos para ver claroโ€. Muy pronto ocurriรณ esa separaciรณn y pudo comprobar que las primeras palabras de โ€œLa isla partida en dosโ€ lo transformaban โ€“y a nosotros con รฉlโ€“ en espectador de una pelรญcula cuyos personajes โ€“โ€œaquellos que no solo no protestaron, sino que ayudaronโ€โ€“ eran sus propios amigos.

Ah, la amistad, esa flor a veces frรกgil. Cuรกntos amigos nacen al calor del triunfo de un movimiento revolucionario, un movimiento transformador que acabarรก de raรญz con los males del mundo. Y los males, que son tantos, se cuelan entre las baldosas, resurgen de Dios sabe dรณnde y forman una espesura que cubre a la flor y la marchita. โ€œLa amistad es como las plantas โ€“le decรญa Octavio Paz a Carlos Fuentes en 1982โ€“: hay que regarla a diario. A veces, tambiรฉn, hay que podarla: demasiado frondosa deja de dar flores y frutos. Y mucho sol โ€“un acuerdo totalโ€“ la marchita. Las diferencias โ€“si se dicenโ€“ son un agua milagrosa.โ€

(( Cito por la fecha de la siguiente correspondencia depositada en Princeton: Guillermo Cabrera Infante Papers, Fuentes, Carlos; 1969-1981; Box 12, Folder 33; Paz, Octavio; 1971-1979; Box 12, Folder 23. Carlos Fuentes Papers, Paz, Octavio; Box 306, Folder 4; Manuscripts Division, Department of Rare Books and Special Collections, Princeton University Library.))

Precisamente Carlos Fuentes llegarรญa a ser un amigo cercano de Caรญn. El mexicano habรญa estado en La Habana el mismo dรญa que entrรณ Fidel victorioso, pero Cabrera Infante no lo conociรณ en esa fecha pues estaba en la redacciรณn del periรณdico. Ese momento en la historia de la Revoluciรณn cubana podrรญa muy bien filmarse atendiendo a los rostros de quienes se volverรกn grandes amigos en el futuro y que aparecen en la escena, en medio de la algarabรญa de โ€œlos barbudosโ€, sin cruzarse. Fuentes y Garcรญa Mรกrquez serรญan el ejemplo perfecto. Separados por las circunstancias en aquella fecha โ€“uno como periodista, otro como invitadoโ€“, Garcรญa Mรกrquez y Fuentes se conocerรญan hasta 1961, en la calle de Cรณrdoba nรบmero 48 en la Ciudad de Mรฉxico, direcciรณn de la compaรฑรญa productora de Manuel Barbachano Ponce. Eso ocurrirรญa algunos aรฑos despuรฉs, pero tambiรฉn podemos imaginar la historia de otros futuros amigos por medio de un montaje paralelo y observar quรฉ hacรญan en ese instante, lejos de la fiesta en la noche habanera, Cortรกzar, Vargas Llosa y, aรบn en La Habana, el propio Caรญn, sentado tal vez en su escritorio sin saber que, ese mismo aรฑo de 1959, Fuentes aparecerรญa en su รณrbita, pero no en Cuba, sino en el, entonces, Distrito Federal, adonde habรญa llegado el cubano para hablar con Luis Buรฑuel y Barbachano Ponce. Estaban viendo escenas de Nazarรญn cuando Fuentes cruzรณ la sala de proyecciรณn, saludando y sonriendo. โ€œDe repente se abriรณ la puerta y entrรณ Carlos con un pequeรฑo objeto metรกlico en la mano. ยกCreรญ que era un revรณlver!, pero ยกse frotรณ la cara con รฉl! Su sonrisa se tornรณ mueca cuando estirรณ la piel de su quijada y puso los ojos en blanco. Carlos era mucho mรกs divertido que Nazarรญn. En realidad estaba afeitรกndose. Yo no habรญa visto en mi vida una mรกquina de afeitar sin cable y me entraron unas ganas locas de comprarme unaโ€, contรณ en una de las famosas entrevistas de The Paris Review.

((The Paris Review. Entrevistas (1953-2012), Barcelona, Acantilado, 2020, p. 1281.))

A partir de entonces pudo ver a Fuentes en muchas ocasiones. No solo se reunieron en las locaciones donde se filmabaย Nazarรญn, acabado el rodaje acompaรฑaban a Buรฑuel a cenar, segรบn narra Rita Macedo โ€“โ€œA veces nos caรญan en la locaciรณn Barbachano, Carlos y los cubanos Cabrera Infante y Alfredo Guevara, pertenecientes al equipo de Fidel Castroโ€โ€“,

{{Cecilia Fuentes, Mujer en papel. Memorias inconclusas de Rita Macedo, Ciudad de Mรฉxico, Trilce Ediciones, 2020, p. 170.}}

 y atestiguaban la preparaciรณn de โ€œestrafalarias bebidasโ€ que preparaba el cineasta. En Cuba, y despuรฉs de un dรญa de sol en La Bodeguita del Medio, entre tragos, amigos y alegrรญa verdaderamente revolucionaria, Fuentes visitรณ a Franqui en las oficinas de Revoluciรณn y quedรณ admirado por la vitalidad que ahรญ se respiraba. Estaba frente a una โ€œRevoluciรณn de la juventud. El sueรฑo de tantas generaciones universitarias hispanoamericanas โ€“llegar al poder con el brรญo, la imaginaciรณn y la limpieza de la juventud, barrer con estilos y hombres caducos, mediocres y acomodaticiosโ€“ se ha cumplido en Cubaโ€, reportรณ para Mรฉxico en la Cultura.

{{Carlos Fuentes, โ€œLas horas de Cubaโ€, Mรฉxico en la Cultura 543, 9 de agosto de 1959, p. 11.}}

 Eran pasadas las dos de la maรฑana cuando llegรณ Caรญn y propuso entusiasmado que se realizara un nรบmero sobre literatura mexicana en Lunes โ€“el suplemento literario de Revoluciรณn que dirigรญaโ€“y la conversaciรณn continuรณ esa madrugada que casi alcanza al dรญa, cuando Fuentes y Cabrera Infante se despidieron a las puertas del hotel donde el mexicano se hospedaba. โ€œAllรญ quedรณ fijado el compromiso: lunes dedicarรญa un nรบmero a la literatura mexicana. El tiempo de cumplir la deuda no se precisarรญa con demasiado rigor. Luego Carlos Fuentes volviรณ a Cuba โ€“el pasado 26 de julio, en noviembre para el concurso de Casa de las Amรฉricas, al Primero de Mayoโ€“ y el proyecto comenzaba a convertirse en realidad.โ€ Asรญ quedรณ escrito en el editorial con que abriรณ el nรบmero 63 de Lunes, fechado el 13 de junio de 1960 y dedicado, naturalmente, a Mรฉxico.

En Mรฉxico, en Cuba, y mรกs tarde desde Bruselas o en Londres, los amigos tuvieron tiempo para escribirse o comentar sobre literatura, polรญtica o cine. Habรญan construido una amistad pero, sobre todo, un lenguaje particular salpicado de chistes, apodos, juegos de palabras y referencias cinematogrรกficas que lo transformaban en un cรณdigo casi impenetrable, salvo para ellos dos. Cualquiera que haya leรญdo correspondencia del cubano habrรก observado que su lenguaje da pie para responder a sus juegos verbales en el mismo tono. Incluso Paz, al escribirle, se contagiaba, como cuando le comenta, en una carta del 10 de diciembre de 1972, que habรญa recibido el libro de entrevistas de Rita Guibert,ย Seven voices, y la del cubano lo habรญa deslumbrado: โ€œVoz vivaz, vibrante, vidente, vindicatoria, viril. Viola violenta. Ya ves: me contagias.โ€

En la correspondencia de Fuentes esos juegos eran tambiรฉn muy abundantes, de modo que resultรณ insuperable entre los corresponsales del cubano: admitiรณ el juego y jugรณ hasta convertir ese lenguaje compartido en una fuente de intimidad que solo las verdaderas amistades logran: entenderse รบnicamente entre ellos. De tanto jugar quizรก no se entendieron y un dรญa acabรณ la amistad de โ€œAbelita Croixโ€, como a veces firmaba Fuentes sus cartas, y โ€œJaw-Blandishing Caรญnโ€, uno de los nombres con los que llamaba al cubano.

Cuenta Dunia Gras que la primera referencia a la escritura de un guion de Cabrera sobreย Aura, de Fuentes, ocurre en septiembre de 1968,

{{Dunia Gras, โ€œDe Aura (1962) a Birthdays (1969) pasando por Cumpleaรฑos (1969)โ€ฆ y hasta The horizontal door (1971)โ€, La escritura meta-final de Guillermo Cabrera Infante (2017), p. 146.}}

 el mismo aรฑo en que Tomรกs Eloy Martรญnez le hizo una entrevista para Primera Plana, donde Cabrera denunciรณ la situaciรณn en Cuba y โ€“prolegรณmeno de lo que ocurrirรญa tres aรฑos despuรฉsโ€“ fue tristemente refutado por Heberto Padilla. Pero antes de que eso ocurriera tuvo lugar uno de esos momentos estelares que solo con el paso del tiempo adquieren su verdadero sentido. Era el รบltimo dรญa de 1967 y el cubano se encontraba en la casa de los Fuentes que esa noche ofrecรญan la fiesta de fin de aรฑo. Le habรญan regalado un pastel de chocolate y โ€œhashโ€. Al ofrecerlo, โ€œFuentes dio dos sobresaltos hacia atrรกs para declarar: โ€˜No necesito drogas para expandir mi concienciaโ€™โ€. Paz, a quien acababa de conocer, se lo comiรณ sin ninguna dificultad. Ese hecho se convirtiรณ en una revelaciรณn para Cabrera Infante: โ€œcomo si el cake de chocolate y hasch fuera la pata de mono de W. W. Jacobs pero al revรฉs, hubo divorcios entre las parejas y separaciones entre los hombres y algo irrecuperable se perdiรณ para siempreโ€.

{{Guillermo Cabrera Infante, โ€œTodos de alguna forma alrededor de Octavio Pazโ€, El รngel de Reforma 19, 24 de marzo de 1994, p. 29.}}

 Fue en enero cuando los dos amigos se refirieron al futuro guion como Birthdays. Ambos deseaban que โ€œThe Old manโ€ o โ€œThe Old man of the Volcanoโ€ โ€“Buรฑuelโ€“ filmara la pelรญcula. Justo el 24 de enero, Fuentes le escribiรณ a Buรฑuel para desearle un nuevo aรฑo prรณspero y, entre otras cosas, le contรณ de la fiesta a la que habรญan acudido amigos comunes que realizaron โ€œmรกs de una libaciรณn de Gordonโ€™s Dry en su honorโ€.

{{Carlos Fuentes, Luis Buรฑuel o la mirada de la medusa. (Un ensayo inconcluso), Madrid, Cuadernos de Obra Fundamental, Fundaciรณn Banco Santander, 2017, p. 157.}}

 Nada le dijo de Cabrera Infante, aun cuando los dos amigos ya habรญan hablado del proyecto de filmar Aura teniendo a Buรฑuel como director. Fue hasta el 10 de julio de ese 1968 cuando Fuentes le escribiรณ a Buรฑuel presentรกndole a Cabrera Infante, como si fuera alguien desconocido por el cineasta:

Otro aspecto es que, para asuntos de adaptaciรณn cinematogrรกfica, trabajo en tรกndem con Guillermo Cabrera Infante, el novelista cubano radicado en Londres, donde ya ha escrito y vendido dos excelentes guiones (uno de ellos, la adaptaciรณn de โ€œLa autopista del surโ€, ese maravilloso cuento de Cortรกzar sobre el embotellamiento total, universal y permanente). Cabrera domina a la perfecciรณn el idioma inglรฉs y la tรฉcnica cinematogrรกfica de adaptaciรณn.

((Ibid., p. 165.))

El guion de โ€œLa autopista del surโ€ es otra historia de desencuentros del cubano, pero no fue lo que rompiรณ su amistad con Cortรกzar, a quien habรญa conocido por carta en el verano de 1963, cuando le enviรณ un ejemplar de Asรญ en la paz como en la guerra. El 8 de septiembre de ese aรฑo, desde Parรญs, Cortรกzar daba acuse y le aseguraba que un dรญa al fin se encontrarรญan: โ€œPero estรก escrito que cuando usted baja a Lut-eh-Cia, yo subo para Helsinki o Addis Abeba. Ahora, por ejemplo, me vuelvo a Austria por un mes, y probablemente usted ya estรก tomando el aviรณn para venir a Parรญs. Vaya juego absurdo el que hacemos, pero un dรญa vendrรก en que nos encontraremos, y entonces habrรก desquite.โ€

((Julio Cortรกzar, Cartas 1955-1964, Buenos Aires, Alfaguara, 2012, p. 426. En adelante cito por la fecha de la carta.))

Ese mismo aรฑo se conocieron y Cabrera Infante le regalรณ a Cortรกzar su libro de crรณnicas cinematogrรกficas,ย Un oficio del sigloย XX. Quizรกs entonces naciรณ en ambos la idea de que Caรญn podrรญa hacer el guion de alguna obra del argentino. โ€œLa autopista del surโ€ fue el texto elegido en 1966. Con guion de Cabrera y direcciรณn de Joe Massot, se realizarรญaย On the speedway, nombre que mรกs adelante cambiรณ aย The jam. Pero nunca se filmรณ. La historia es conocida y ese proyecto serรญa el primer traspiรฉ en la amistad fallida entre los narradores, asunto que solo acompaรฑรณ las diferencias ideolรณgicas que se interpusieron entre ambos y que tendrรญan su punto mรกs รกlgido en 1971, con el caso Padilla y el nacimiento de una revista efรญmera,ย Libre, que vino al mundo rodeada de malos presagios y del veto explรญcito de Cortรกzar contra Cabrera. Lo verdaderamente curioso es que Cortรกzar no hubiera roto esa amistad antes, pues desde la entrevista paraย Primera Planaย nadie podรญa hacerse el occiso respecto de las ideas del cubano.

En 1970, una troupe de amigos revolucionarios viajรณ de Barcelona a Aviรฑรณn para asistir al estreno de El tuerto es rey, de Fuentes. No fueron Paz ni Cabrera Infante ni otros de los amigos que aquella noche en Londres habรญan brindado por la llegada de 1968. Tampoco fue Emir Rodrรญguez Monegal, apestado por los cubanos desde el drama de Mundo Nuevo y sobre quien tambiรฉn cayรณ el veto del argentino el 15 de agosto cuando se realizรณ una fiesta para discutir el nacimiento de Libre en la casa de campo de Cortรกzar en Saignon. ร‰l y Ugnรฉ Karvelis estaban felices. Ugnรฉ acababa de volver de Cuba y con ella llegaron โ€œtu abrazo, tus noticias, el aire y el perfume de Cubaโ€, le escribiรณ el dรญa 16 a Roberto Fernรกndez Retamar. Quizรก las noticias no fueron favorables para los excluidos de Libre y Cortรกzar narrรณ algunas generalidades de la fiesta a su amigo, asegurรกndole que la fiesta habรญa sido โ€œuna ocasiรณn admirable para hablar del discurso de Fidel del 26 de julio (recibido, como era previsible, con admiraciรณn y satisfacciรณn incluso por algunos recalcitrantes que conozco)โ€.

De 1968 a 1970 Cabrera Infante habรญa trabajado en un circo de mil pistas. En la que corresponde a The jam el asunto no marchรณ bien pues a Cortรกzar no le gustรณ la intervenciรณn de Joe Massot, quien aparentemente resultรณ un bandido y saliรณ de la escena; surgieron tambiรฉn dificultades por la cesiรณn de derechos y, finalmente, tampoco fue posible hacerla con el productor elegido, John Barry, como nos enteramos en la รบltima y cariรฑosa carta de Cortรกzar a Cabrera, del 23 de febrero de 1970. Seis meses despuรฉs, Cortรกzar le pondrรญa las cruces en Saignon. Pero, poco antes de que eso ocurriera, el cubano habรญa sido protagonista de โ€œuna ocasiรณn memorableโ€, narrรณ en โ€œYo acuso en el Wilson Centerโ€, donde contรณ cรณmo Fuentes lo habรญa invitado a comer junto con Vargas Llosa. El motivo de la plรกtica era el nacimiento de una revista en Parรญs. โ€œCarlos llegรณ, luncheรณ y lanzรณ el magazine que era como una segunda venida: el monstruo acezando para llegar a la luz.โ€ Al finalizar la comida ocurriรณ un asunto embarazoso: โ€œยฟPuedes encargarte de la cuenta, hermano? Cuando Carlos dice hermano suena mรกs a Caรญn que yo mismo.โ€ Cabrera Infante pagรณ y tambiรฉn supo de Libre. En el verano, cuando se dirimiรณ su caso en Saignon, Fuentes saliรณ inรบtilmente en su defensa. Fue hasta el 11 de diciembre cuando Cabrera se lo agradeciรณ. Sabรญa todo lo que habรญa pasado, pero decidiรณ ser discreto, a peticiรณn de Juan Goytisolo โ€“quizรกs el animador mรกs importante de aquella triste historia llamada Libreโ€“. โ€œAhora Cortรกzar acaba de decir en una entrevista en B. Aires los mรกs increรญbles horrores contra mรญโ€, le contรณ a Fuentes, y aรบn faltaba el caso Padilla. Al inicio de esa misma carta, Cabrera le comentรณ que โ€œesperaba tener noticias concretas โ€“que siempre son las mรกs abstractasโ€“ sobre nuestro comรบn Cumpleaรฑosโ€. Su โ€œcomรบnโ€ Cumpleaรฑos cambiarรญa de nombre. Birthdays y The horizontal door fueron los tรญtulos del guion que el cubano escribiรณ y reescribiรณ, una vez que Buรฑuel les hizo comprender que no le interesaba filmar Aura.

En 1969, Fuentes habรญa publicado su novela breve Cumpleaรฑos, pero habรญa seguido trabajando en el guion junto a Cabrera, intentando resolver problemas de copyright que al cubano le parecรญan fundamentales, el pago de algรบn anticipo, asรญ como el probable reparto, que discutieron varias veces. A principios de 1970, llegรณ a pedirle a Cabrera que se apresurara pues necesitaba con urgencia el dinero que ganarรญan con la pelรญcula. Sin embargo, esta tampoco se filmรณ. En 1995, Cabrera Infante narrรณ en entrevista cรณmo รฉl y Fuentes habรญan vivido un โ€œincidente muy penoso con un guion de cine mรญo que รฉl transformรณ para convertirlo en su novela Cumpleaรฑosโ€. De acuerdo con el cubano, Fuentes le habรญa pedido que hiciera un breve guion de Aura, pero รฉl habรญa escrito ciento veinte pรกginas de uno titulado La puerta horizontal. โ€œTiempo despuรฉs, Fuentes me enviรณ su novela Cumpleaรฑos, con una nota que decรญa: โ€˜Para que veas en quรฉ terminรณ todo.โ€™โ€

((Jorge Luis Berdeja, โ€œCabrera Infante se une al coro. Fuentes usรณ mi guion para una de sus novelasโ€, Cultural de El Universal, 26 de agosto de 1995, p. 1.))

Ciento cuatro pรกginas tuvo este guion, nos informa Dunia Gras, quien cotejรณ de manera muy puntillosa la novela de Fuentes y los tres guiones que Cabrera Infante realizรณ en colaboraciรณn con el mexicano โ€“dos llamadosย Birthdaysย y el รบltimo, posterior al lanzamiento deย Cumpleaรฑos,ย The horizontal doorโ€“. En su trabajo advierte algunos โ€œparalelismos significativosโ€ y algunas escenas compartidas, si bien considera queย Cumpleaรฑosย โ€œse desvรญa de la propuesta del guion en la que estaban trabajando juntos, y muestra, de alguna forma, una mayor impronta de sus conversaciones con Buรฑuelโ€.

((Dunia Gras, op. cit., p. 156.))

De los amigos revolucionarios de los sesenta, Fuentes y Cortรกzar se volverรญan blanco de los dardos de Caรญn, pero fue particularmente cruel con el argentino. En โ€œCuando Emir estaba vivoโ€ recordรณ que โ€œlas viejas guerritas literarias, al conjuro de las barbas, se hicieron guerrillas, sin que ninguno de los autores armados de argumentos prestados jamรกs cogiera algo mรกs parecido a un fusil que un lรกpizโ€. En ese texto acusรณ a รngel Rama y a Cortรกzar de ser los โ€œperseguidoresโ€ de Rodrรญguez Monegal y se refiriรณ al autor deย Rayuelaย de este modo: โ€œTal vez el mรกs encarnizado perro de presa no fuera el que ustedes piensan, sino uno que para disfrazarse del Che en Parรญs acudiรณ a hormonas y barbas postizas y poder adoptar asรญ el lenguaje marxistaย ร  la mode. Parรญs bien vale una mรกscara.โ€ ~

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(Ciudad de Mรฉxico, 1961) es poeta, ensayista y editora de poesรญa en Letras Libres. Este aรฑo su libro Estrella de dos puntas. Octavio Paz y Carlos Fuentes: crรณnica de una amistad (Ariel, 2020) recibiรณ los premios Mazatlรกn de Literatura y Xavier Villaurrutia.


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