Lee aquí una reseña de Tienes que mirar.
En 2012, la escritora Anna Starobinets descubre, en una visita rutinaria al médico, que el niño que espera no vivirá. Lo que comienza siendo la crónica de una decisión familiar acaba convirtiéndose en una historia de terror. ¿Qué hacer cuando el futuro se desmorona en la pantalla de un ecógrafo? Starobinets narra con desgarradora humanidad el peregrinaje por las instituciones sanitarias de su país, su posterior viaje a Alemania y el duelo por el hijo perdido.
7
Veredicto alemán
En el hospital Charité me recibe el profesor Kalache, una eminencia alemana del diagnóstico por ultrasonidos, especialista en malformaciones intrauterinas. Hablamos en inglés; nos acompaña mi amiga Natasha por si es necesaria una traducción del alemán.
Lo primero que me dice el doctor Kalache cuando entramos a la consulta es:
—Lamento mucho que estén en nuestro hospital por tan triste motivo.
Pasa la sonda por mi vientre y la cara de mi hijo aparece en la pantalla grande. Se chupa el pulgar. ¿Y si la eminencia alemana ahora rechaza el diagnóstico? O no, dirá que el diagnóstico en general es correcto, pero que en su hospital saben cómo tratar estos casos…
—Lamentablemente, no puedo más que confirmar el diagnóstico que le dieron en Moscú. Esta es la enfermedad renal poliquística de tipo infantil o la multiquística bilateral. No hay líquido amniótico. En cualquier caso, el pronóstico de vida es desfavorable. Lo siento mucho de verdad. Este niño no tiene ninguna posibilidad. This little baby has no chance.
Lee el adelanto completo aquí: