Este artรญculo forma parte del Free Speech Project (Proyecto Libertad de Expresiรณn), una colaboraciรณn entre Future Tense y el Tech, Law, & Security Program del Washington College of Law de la American University, en el cual se analiza la forma en que la tecnologรญa estรก influyendo sobre lo que pensamos acerca de la expresiรณn.
Durante las รบltimas semanas, todos los viernes por la noche cientos de jรณvenes cubanos se han quedado despiertos hasta la madrugada para comenzar su fin de semana con una probadita de algo ilรญcito: la informaciรณn sin censura.
Asรญ pues, evaden uno de los regรญmenes de censura mรกs estrictos del mundo para sintonizar “Esta semana en Cuba”, una sala de chat de audio en vivo en Twitter, donde destacados activistas e influencers sostienen una discusiรณn abierta sobre la polรญtica y la actualidad cubana.
Si bien el gobierno cubano no prohรญbe el uso de Twitter, los cubanos que usan la plataforma para tuitear contra el rรฉgimen corren el riesgo de sufrir acoso, intimidaciรณn y de ser arrestados. Sin embargo, la naturaleza รญntima y efรญmera de las discusiones de audio en vivo estรก animando a los cubanos a hablar sobre los problemas que plagan a su paรญs, o a simplemente escuchar a sus pares.
โEl propรณsito de estos espacios es mostrarle a la gente que hay mรกs cosas fuera de lo que el gobierno te enseรฑaโ, dijo Daniel Gonzรกlez, quien organiza y conduce las conversaciones, en el arranque de la ediciรณn del 23 de abril de โEsta semana en Cubaโ. โEl objetivo es simplemente hablar. Hablar de lo que pasรณ en Cuba esa semana, decir lo que piensas y aprender a ser respetuoso con los que no estรกn de acuerdo contigoโ.
“Esta semana en Cuba” ha conseguido hasta ahora un modesto nรบmero de seguidores: aproximadamente 200 usuarios asistieron a una reuniรณn a mediados de abril. No obstante, las discusiones sin limitantes โque tocan temas sensibles como la reforma polรญtica, las medidas contra la vigilancia y las condiciones de “hambre, miseria y privaciones” en Cuba, como lo describiรณ un participante hace dos semanasโ ya han atraรญdo a algunos de los disidentes y periodistas mรกs destacados de la isla. Y todo indica que seguirรกn creciendo.
La mayorรญa de los usuarios de internet mรณvil en Cuba usan Android, lo que significa que nunca han accedido a Clubhouse, la aplicaciรณn de audio en vivo para iOS que comenzรณ a generar interรฉs desde el otoรฑo pasado. “Esta semana en Cuba” estรก alojada en Spaces, la nueva plataforma de audio en vivo de Twitter que se lanzรณ en marzo. Por lo tanto, los chats semanales ofrecen a muchos cubanos su primera prueba del formato de audio en vivo que ya ha causado revuelo en otras partes del mundo.
โEste es un medio mucho mรกs participativo e interactivoโ, dijo Rafael Santos, un joven de 35 aรฑos residente de La Habana que participรณ en la segunda ediciรณn de โEsta semana en Cubaโ. “Es una mejor plataforma para el debate y el intercambio que lo que hay enYouTube o Facebook”.
Santos dijo que decidiรณ participar en los chats porque “se le hizo imposible ignorar lo que estรก pasando en Cuba”. Debido a la pandemia y a las debilidades de la planificaciรณn econรณmica a cargo del estado, la economรญa de Cuba se ha venido abajo durante el รบltimo aรฑo, provocando algunas de las mayores protestas contra el Partido Comunista de Cuba en dรฉcadas.
Si bien es difรญcil conocer con certeza la composiciรณn demogrรกfica de la audiencia que ha asistido a cada evento, la estrategia de promociรณn de Gonzรกlez hasta ahora se ha dirigido a los jรณvenes, y no necesariamente a aquellos que son polรญticamente activos. Para atraer a un pรบblico amplio, Gonzรกlez, quien dejรณ Cuba hace cuatro aรฑos y ahora vive en Miami, contรณ con el apoyo de influencers cubanos en las redes sociales, muchos de ellos jรณvenes de alrededor de 20 aรฑos. Si bien algunos publican con frecuencia sobre polรญtica, muchos construyeron su base de seguidores a travรฉs de memes sobre deportes, videojuegos y cultura pop.
โEsto… era impensable en Cuba hace cinco aรฑosโ, dijo Ariel Falcรณn, de 21 aรฑos, uno de los influencers que ha participado en los chats y que ayudรณ a promocionarlos entre sus 17,000 seguidores en Twitter. โLa gente vive diferentes realidades aquรญ en Cuba. El solo comunicarnos y ver lo que tenemos en comรบnโฆ no existe una cultura de hacer eso en Cuba “.
El entusiasmo por el audio en vivo y el marketing inteligente no son las รบnicas razones por las que los chats tienen un alto potencial de crecimiento.
Los altรญsimos precios de los datos mรณviles de Cuba y su economรญa estancada pueden limitar los hรกbitos de navegaciรณn de los usuarios cubanos de internet. Pero “Esta semana en Cuba”, que hasta ahora ha durado de tres a seis horas seguidas, ha sorteado esos desafรญos explotando una peculiaridad de la economรญa de internet en la naciรณn caribeรฑa.
Como arranca los viernes a horas altas de la noche, โEsta semana en Cubaโ coincide con una oferta del รบnico proveedor de telecomunicaciones en Cuba, ETECSA: el descuento a mitad de precio en datos mรณviles todos los dรญas entre la 1 y las 6 de la maรฑana. Los chats de audio cuestan mucho menos para los cubanos que otros medios comunes entre los activistas, como la transmisiรณn en video a travรฉs de Facebook o YouTube.
De alguna manera, la emociรณn que rodea a “Esta semana en Cuba” replica lo que sucediรณ a principios de este aรฑo en China, donde los usuarios de internet utilizaron masivamente Clubhouse y hablaron con libertad sobre temas censurados en otras plataformas de redes sociales del paรญs. Pero, mientras que China bloqueรณ rรกpidamente el acceso a Clubhouse a travรฉs de su Gran Murall Cortafuegos, las autoridades cubanas tienen pocas alternativas a su alcance para reprimir “Esta semana en Cuba”.
A travรฉs de ETECSA, el Partido Comunista de Cuba restringe habitualmente el acceso a internet a los disidentes y activistas mรกs visibles. El control sobre el trรกfico de internet hasta los niveles de IP, HTTP y DNS tambiรฉn le permite bloquear el acceso a publicaciones de noticias extranjeras. Pero los chats de audio admitidos por mรบltiples usuarios en plataformas de redes sociales carecen de un punto dรฉbil equivalente. Las soluciones tรฉcnicamente viables, como la prohibiciรณn total de Twitter, serรญan polรญticamente costosas.
Aun asรญ, serรญa ingenuo descartar la posibilidad de que la polรญtica limite el crecimiento de “Esta semana en Cuba”.
La naturaleza abierta de Twitter Spaces, a los que cualquier usuario de la red social puede unirse, hace que la vigilancia gubernamental sea sencilla. Y dado que el Partido Comunista de Cuba puso la censura de internet como prioridad de su agenda durante su reciente congreso partidista, muchos temen que el gobierno se estรฉ preparando para apretar las riendas del discurso en lรญnea. Incluso si el gobierno no puede bloquear las discusiones directamente, podrรญa limitar el acceso de usuarios individuales a internet, monitorear lo que dicen los participantes o intimidar y coaccionar a los asistentes fuera de lรญnea.
Una mujer que participรณ en una ediciรณn reciente de โEsta semana en Cubaโ se negรณ a hablar oficialmente sobre su experiencia. Cuando se le preguntรณ por quรฉ se sentรญa cรณmoda hablando en los chats pero no con la prensa, explicรณ que tampoco se sentรญa segura en los chats. โEn realidad, no creo que nos sintamos seguros. Pero por un momento te olvidas de que vives en una dictadura y te expresas libremente, sin preocuparte por las consecuenciasโ.
Varios participantes de โEsta semana en Cubaโ, incluido Gonzรกlez, el organizador, dijeron que operan bajo el supuesto de que el gobierno ya estรก monitoreando las discusiones. Si bien algunos insistieron en que los chats no cruzaron ninguna lรญnea o que la naturaleza efรญmera del audio en vivo los libra del castigo, estรก claro que el futuro de los chats es precario.
Ruhama Fernรกndez, una activista de 22 aรฑos, ha participado en cada โEsta semana en Cubaโ. Tras ser amenazada, vigilada constantemente e interrogada dos veces por sus crรญticas abiertas al Partido Comunista de Cuba, Fernรกndez dijo que ahora vive sola, para proteger a su familia de ser afectada por las acciones con que el gobierno busque silenciarla.
Si bien se muestra escรฉptica de que los chats puedan durar mucho mรกs en su forma actual o de que una reforma polรญtica seria sea inminente dentro de Cuba, Fernรกndez dijo que le alegra ver cรณmo los chats, y las redes sociales en general, estรกn cambiando la forma en que los jรณvenes cubanos ven el mundo.
“Lo que estรก pasando con los jรณvenes es increรญble”, dijo Fernรกndez, quien tiene un canal de YouTube con mรกs de 15 mil seguidores. โYa no creen en las mentiras de la revoluciรณn. Estรกn comenzando a estudiar mรกs allรก de lo que se les enseรฑa en la escuelaโ.
Ariel Falcรณn, el influencer, tambiรฉn tiene un tono agridulce cuando habla sobre la importancia de participar en foros abiertos como โEsta semana en Cubaโ.
โCuando vives en Cuba, pierdes ese sentimiento de optimismoโ, dijo. โSรฉ que las probabilidades de que podamos hacer un cambio duradero son de una en un millรณn. Pero si podemos hacer que diez personas piensen mejor, podrรฉ estar feliz con nuestros logros “.
Este artรญculo es publicado gracias a una colaboraciรณn de Letras Libres con Future Tense, un proyecto de Slate, New America, y Arizona State University.
es un periodista radicado en Nueva York, que cubre temas de tecnologรญa y ciberseguridad.
